Sergio Michel Pérez Mendoza, es hijo de uno de los políticos más importantes de México. A la edad de trece años, se fue al extranjero para terminar sus estudios académicos. Tenía uno de los mejores promedios y los recursos necesarios para llegar a u...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
En la habitación de cierto neerlandés se siente la desesperación. Esta noche saldría con el pecoso mexicano, su cita era en una hora y sintió que todo se le miraba mal, por esa razón recurrió a Lando.
—Max se miraba en el espejo—. ¿Qué opinas, Lando? ¿Me veo bien? —Los nervios en la voz de Max eran casi palpables.
—Lando se encontraba sentado en la cama, observando al neerlandés cada conjunto que se probaba—. No estaba mal—lo miro de arriba abajo—, pero creo que podrías mejorar un poco.
—El ojiazul lo vigilará con terror—. ¿Como asi? ¿Qué sugieres? —Max miraba su reloj, se le iba a hacer tarde si no se apuraba.
—Bueno, para empezar, creo que la camisa está un poco arrugada—el británico la miraba con desaprobación— Plánchala un poco para que se vea más elegante.
—Max se quitó la camisa y la observó—. Tienes razón. Está un poco arrugada —suspirándose—. La plancharé enseguida.
—También pienso que deberías usar un cinturón. Le dará un toque más formal a tu atuendo.
—Max buscó un cinturón en su armario —Este cinturón funcionaría? —Max le mostró el cinturón—. Era muy simple de la marca Ferragamo.
—Sí, ese está bien—Lando se levantó de la cama del neerlandés—. Te queda bien.
—Max se puso el cinturón deprisa—¿Ahora si me veo bien? —seguía sin verso bien en el espejo.
—Rodó los ojos el castaño—. Te ves bien, Max, solo confía en ti.
—El ojiazul le sonreía—. Gracias, Lando por tu ayuda. Sé que ya casi no hablamos y respeta tu decisión, pero esto es muy importante para mí.
—De nada, Max —el castaño le regresó la sonrisa—. Que te vaya bien en tu cita. No conozco tanto a Sergio y no lo considero un amigo, pero en verdad espero que no lo lastimes, Max es una buena persona.
Max no le contesto, simplemente se despidió del británico y se marchó del departamento.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
