Capítulo 21: La Primera Etapa

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🩸Dominick🩸




~Día 401~




Los pasos de la castaña que va a mi derecha son normales, pero a pesar de eso, sé que lo único que quiere es dar media vuelta y regresar corriendo para resguardarse en la nueva casa que nos hicieron habitar.

Yo, simplemente, hago lo mismo que ella y me concentro en caminar sin ponerle atención a la incomodidad del uniforme que llevo. A pesar, de que es de mi talla, el pantalón me aprieta un poco.

Así que luego de replantearme, si debo mencionarle la incomodidad a las personas que veremos, decido que mejor no, ya que yo no les dirigiré la palabra por voluntad propia y si no es una conversación donde me acompañen ellos cuatro.

—El ascensor está tardando —dice Amber en un murmuro —. Mejor tomemos las escaleras.

—Son varios pisos —se queja Aquiles.

—Será una especie de calentamiento —toma a la niña de la mano y avanzan juntas —. Así, cuando empecemos con eso que haremos, no te da un calambre.

—Nunca me dan calambres —indica, siguiéndola, así que nos unimos.

—Nunca digas nunca —dice ella, jodiéndolo y los tres reímos —. Vamos, amor, un escalón más —dice cuando están cerca del último —. Muy bien, eres la mejor en esto.

Los cuatro vemos como ellas tienen su momento y esperamos hasta que deciden seguir con el siguiente grupo de escalones.

Gracias a eso, nos tardamos más de lo esperado, pero de todas formas vale la pena, ya que cada vez que Aitana sube las gradas, ríe estando más que feliz y eso es increíble de presenciar.

—¡Nom! —me llama cuando llegamos al piso que queremos y cuando miro en su dirección me doy cuenta de que está estirando los brazos en una señal de que la cargue.

—De acuerdo, pero solo porque ya sabes subir más rápido las escaleras —la elevo en el aire y ella sonríe muy contenta.

—Dominick, date prisa que se hace tarde —me apremia la castaña y los alcanzo en cuestión de segundos.

Para cuando las personas que vigilan la puerta de la oficina de Hanna nos da paso, el ambiente y nuestro alrededor se torna muy pesado y nada cómodo.

—Buenos días, chicos, ¿Cómo se encuentran? —habla la doctora —. Me alegra verlos aquí.

—Nuestras opciones eran nulas —indico de mal humor.

—Lamentamos eso —interviene Jeison —. De todas formas, para que sientan que las horas que trabajaremos pasan rápido, empezaremos ahora.

Como ninguno se mueve o dice algo más, el hombre de uniforme camina hasta la puerta luego de despedirse de su esposa y nos insta a seguirlo.

—De acuerdo, chicos —empieza a caminar al lado de Aquiles, el cual es el que va en una esquina —. Hoy haremos algo básico, como es el calentamiento físico, y veremos la resistencia que tienen en ciertos ejercicios. De esa manera sabremos qué punto o unidad de entrenamiento debemos reforzar en ustedes —se aclara la garganta —. Serán unas cuantas horas, pero serán horas con bastante intensidad, así que depende de ustedes, si esas horas aumentan o se mantienen.

X - ENS: Las Cinco Bases © - Saga: X - ENS - Libro #3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora