X - ENS: Las Cinco Bases © - Saga: X - ENS - Libro #3

Capítulo 29: Lo que no Esperábamos Descubrir

🩸Sebastian🩸

~Día 428~

El aplauso dura más de lo que creo necesario y después de eso, se oyen como las personas que no pisan la tarima, hablan entre ellos sin dejar de mirarnos y sonreír.

Llevo mis manos a mi espalda, manteniendo la postura recta y esperando a que la persona delante del podio termine de dar su discurso para que podamos irnos de una vez por todas.

—Frente a ustedes tienen a las personas que llevamos esperando algo más de dos décadas —habla —. Como una de las personas que dirige ASKAD de manera temporal, puedo decir que hemos esperado mucho, pero que al final me siento contento porque ellos tomen el lugar que les corresponde —trato de no poner los ojos en blanco —. Ellos cinco han puesto todo su empeño para que dentro de unos meses tomen el mandato general de todas las bases, así que solo queda esperar unas cuantas semanas más para verlos, haciendo eso para lo que fueron creados —voltea hacia donde estamos un poco y cubre el micrófono —. ¿Gustan decir algo?

—¿Tenemos cara de querer hablarle a esas personas? —dice Amber, sin tacto —. Evidentemente no —se contesta sí misma y su abuelo la mira mal —. Tú sigue hablando, que se ve que eres bueno para eso.

Víctor nos da la espalda luego de lo que dice la castaña y sigue con su monólogo que los del frente escuchan con atención.

—Esto es lo más patético que he presenciado —me dice Dominick.

—Ni que lo digas. Nos miran como si fuéramos iguales que ellos.

—Por lo que lo único me queda decir es que disfruten la fiesta y de sus anfitriones —nos deja ver en la totalidad cuando se aparta y nos quedamos en nuestros sitios.

Luego de un último estúpido aplauso, Víctor nos indica que podemos bajar, así que avanzamos a las pequeñas gradas para llegar a donde estamos.

—¿Cómo se sintieron? —pregunta la doctora.

—Como piezas de museo expuestas. Pararme ahí es lo más absurdo que he hecho en mi vida —contesta su hijo —. Espero no tener que hacerlo de nuevo.

—No de esa manera, Killian, así que despreocúpate.

—¿Cuándo nos podemos ir de aquí? —pregunta Amber alisando su vestido.

—Necesito que solamente se queden dos horas más —tomo aire —. Les pido eso y a cambio no se realizarán reuniones a las que deben asistir, por cuatro días. Me encargaría personalmente de aplazarlas.

—Supongo que podemos aguantarlo un rato más —indica Dom, terminando su copa —. Aunque, a decir verdad, apenas salgamos de aquí, seremos atacados con preguntas, presentaciones y demás, cosa de la que no quiero ser parte.

—Eso ya vendría siendo algo inevitable, con lo que solo puedo ayudar un poco —la miramos —. Si gustan, en el tiempo que quede, puedo mantenerme con ustedes para así dar la imagen de que están ocupados conmigo, etc. Isabell puede ayudarnos, al igual que Conrad, ya que siguen en horario laboral.

—Si eso los aleja, sería bueno —murmura nuestra chica.

—De acuerdo. Llamaré a los chicos —ella se aleja unos segundos con su teléfono y nosotros esperamos en nuestro sitio, solamente mirándonos.