Capítulo 27: Sin Opción a Evitarlo

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🩸Amber🩸




~Día 426~




Con cada cosa que mencionan o nos dicen que estamos obligados a hacer, más me aclaran que odio esto y que quiero salir huyendo.

Repiqueteo los dedos esperando a ver si Víctor dice algo más y al parecer quiere que nosotros hablemos, ya que nos mira.

—¿Cuándo será eso? —pregunta Aquiles con voz neutra.

—Con el tipo de evento que es y considerando que han sido muchos años los que hemos tenido para planificarlo, varios equipos ya están en estos momentos encargándose de cada cosa. Comida, ambientación y demás, por lo que mañana es la fecha fijada —le responde el hombre.

—¿Y por lo menos no pudieron decirnos con tiempo? —las miradas se posan en mí.

—Ustedes solo deben preocuparse por asistir. No lo veo tan difícil de hacer.

—Pues ahí tú, ya que no te están obligando —contesta sin tacto —. No llego a entender por qué motivo quieren hacer de nuestra llegada algo majestuoso —mi espalda se endereza —. Les hemos dejado claro de una y mil maneras que nuestro deseo no es dirigir esta mierda de organización —mi mano impacta de manera levemente dura en la mesa, sin que lo planee y arde un poco.

—Te pido que controles tu vocabulario.

—Pues trágate tu petición porque no tengo planes de guardar silencio. No ahora —se levanta de la silla sosteniendo a la niña —. No te considero nada mío para que siquiera me dirijas la palabra —Víctor hace el intento de hablar, pero ella se lo impide —. Es fácil notar que no nos sentimos a gusto. ¿No nos ven o qué? —se exaspera —. Muy en el fondo entiendo que esta es su vida, por la que la eligieron, porque se veían así en un futuro, pero nosotros cinco no. Así que pueden hacer su maldito evento si es lo que quieren, pero nosotros cinco no iremos si al menos uno no se siente a gusto. De esa manera deberían funcionar las cosas, no solo decirlos "Vayan y ya" —miro a Hanna —. Eres la única persona aquí considero cercana y sé que entiendes —habla más calmada.

—Lo hago, cariño, pero deben entender ustedes también un poco la situación—dice ella con dulzura y las personas de la mesa se muestran algo perplejas al ver que no la interrumpí, ni la mande a callar como lo hice con el espécimen que se cree mi abuelo —. Luego de que el último miembro del viejo mando muriera, se dejaron claras especificaciones en donde se indicaba que nadie más, aparte de ustedes, serían las personas las cuales podrían acceder a expedientes clasificados. Incluso, como ya se les dijo antes, existen documentos que solo ustedes podrán leer. Nadie más.

—Entonces, si el problema son esos malditos documentos, podemos desbloquear todo lo que dicen y pasarle el mando a otra persona que nosotros elijamos —interviene Dominick —. A alguien que siquiera y si vea futuro en esto.

—El hacer eso solo traería un desequilibrio total en la organización. Por no decir que su desplazamiento del lugar que les pertenece perjudicaría hasta el más mínimo proyecto que hemos tenido aquí.

—La fecha del evento es algo que no se podrá cambiar, ya que cada uno de los grupos que representa las cinco bases de manera momentánea, asistirá —interrumpe Víctor —. Por lo que mejor averigüen que les ayudara a soportar esas horas que deben hacer presencia —se levanta de su silla y maniobra algo en la mesa de cristal —. Ahora, dejando ese tema a un lado, hablaremos de los eventos que se han presentado en la base del Amazonas.

X - ENS: Las Cinco Bases © - Saga: X - ENS - Libro #3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora