Capítulo 31: Camino a la Base del Amazonas (Parte 02)

475 43 24
                                    




🩸Dominick🩸




~Día 430~




Al bajar del maldito tren lo primero que hago es buscar un basurero y voy corriendo hasta donde está el bote verde, para vaciar mi estómago.

No le hago caso a nada, ya que las arcadas no me dejan concentrar, pero sí escucho hablar a los chicos.

—Si va a ser así siempre que viajemos, te esperan momentos desagradables —me dice Aquiles.

Enseguida siento una mano en mi espalda que acaricia la zona. Sé que es Amber, no debo ni dudarlo.

—¿Dom está mien? —oigo preguntar a Aitana.

—No amor, le duele el estómago —le responde su mamá y apenas ahí me incorporo.

—Ten Dominick —veo una botella de agua delante de mí y reconozco de quién son las uñas —. Preguntaré por acá si tienen algún dulce o menta —añade Isabell, alejándose.

Bebo el agua, queriendo deshacerme del mal sabor, pero no lo consigo enseguida.

—¿Estás mejor? —me pregunta Sebastian y asiento a pesar de que evito otra arcada.

—Chicos —levantamos la mirada al escuchar a Hanna —. Ya nos están esperando en el centro de comando general —añade —. Síganme.

Los otros que nos acompañaron no se mueven y en el momento en que quedamos a la misma distancia de Hanna, ellos hacen un atisbo de dar un paso.

Trato de no poner los ojos ante semejante acción estúpida.

—¿Cómo están las cosas? —pregunta Amber.

—Los equipos tácticos que están en el exterior, han logrado exterminar a una cantidad adecuada de muertos —avisa —. De todas formas, y a pesar de que mandar más personas afuera es lo más sensato para lograr cumplir la tarea en menos tiempo, no podemos sin que lo autoricen ustedes.

—¿Los cinco? ¿No se supone que es Amber la que da las órdenes en esta base? —digo y ella asiente.

—Cuando se presentan este tipo de casos, la orden debe ser dada por los cinco. No uno ni tres, los cinco de manera directa, para ejecutarla —llegamos hasta un elevador —. Cuando sea así, los otros cinco equipos saldrán y podremos ver en las cámaras del comando general como marcha todo.

Entramos al ascensor que es bastante grande, pero de todas formas al ser muchos, en este viaje solo vendrán Isa, Conrad y Jeison con nosotros.

—¿Y los sismos? —pregunta Killian —. Sé que cuando el movimiento es grande, suele haber réplicas a los minutos.

—Las hubo —contesta la mamá de él —. En total fueron ciento trece réplicas que se mantuvieron en el rango de magnitud 3 hasta la magnitud 5.5 en la escala de Richter. Esa fue la suma total de todos los países.

—¿A qué hora fue la última?

—Hace cincuenta tres minutos exactamente —contesta al ver su reloj —. La precisión es buena, así tenemos un rango estimado de cada cuanto ocurren y darnos una idea de cuándo podría haber otra.

X - ENS: Las Cinco Bases © - Saga: X - ENS - Libro #3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora