cap

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Recobro el sentido con la sensación de un leve balanceo.
Mí cuerpo se siente adolorido y entumecido.

— Dasha despierta ya, porfavor — escucho la voz de Aaron suplicar muy lejana y sacude suavemente mi cuerpo.

Abro lentamente los ojos, siento mucha pesadez, mi vista se va aclarando poco a poco.
Me doy cuenta que estoy en la habitación, sobre la cama.

Trato de sentarme y Aaron me detiene con su mano obligándome a permanecer acostada.

— no hagas demasiado esfuerzo Dasha — dijo suavemente — ésta vez se me pasó la mano, discúlpame— sonó avergonzado.

En serio se está disculpando, no logro asimilar sus palabras y mi cara lo refleja.

— ya viene un doctor a revisarte, por favor no digas lo que sucedió — dijo rascando su cuello con nervios.

Este no es el Aaron que yo conozco, solo asiento ante la intensidad de su mirada y permanezco acostada inmóvil.

El sale de la habitación y un rato después entra el doctor.
Se presenta y me comienza a revisar.
Por momentos me duele mucho y determina que es mejor trasladarme al hospital. Aparentemente puedo tener fractura de brazo y costillas.

Los paramédicos entran a la habitación y me trasladan a la camilla, no puedo evitar quejarme al sentir intenso dolor.
Logran bajarme del segundo piso y me ingresan a la ambulancia, Aaron se pone a mi lado y toma mi mano.

Me mira a los ojos y me siento amenazada sin que diga una palabra.

Llegamos al hospital y me llevan directamente a hacer las radiografías, luego me trasladan a una habitación de reposo mientras espero el diagnóstico.

No puedo dejar de pensar que esto lo provocó Erick y entre más lo pienso mi corazón se comprime de dolor, él prometió siempre cuidarme  y solo me ha hecho daño.
Como puede parecer lógico en su cabeza que yo le de hijos a él, no entiendo como puede pedirme eso, ¿Como puede siquiera  pensar en la posibilidad? sabiendo que somos primos, sabiendo que si lo hago y los white se dan cuenta de eso me matan.

— Dasha... Dasha — Aaron me sacudió al tiempo que me llamaba y me percaté que había estado observando la pared frente a mí todo el tiempo, me observó con tristeza y besó mis manos con lágrimas en los ojos — de verdad lo siento Dasha— murmuró

Retiré mi mano con cuidado, aprovechando que el doctor apareció, no sé que me aterra más, su agresividad o su supuesto arrepentimiento.

— Bueno sra white — me observó luego de mirar las radiografías — tiene fisura en dos huesos costales por contusión, afortunadamente no hay riesgo de que se perfore ningún órgano, por otro lado tiene fractura del hueso cúbito y necesitará yeso.

Observé a Aaron, definitivamente es un animal.

El médico procedió a ponerme un vendaje alrededor del torso para contener la lesión y que sea más tolerable desplazarme.
Luego comenzó a vendar mi brazo con las capas para poner el yeso.

— sra white, como sucedieron sus lesiones? Le debo preguntar para el reporte debido a que presenta muchas heridas y contusiones en diversas áreas del cuerpo, algunas de vieja data. — dijo el médico.

Se me enfrió la sangre y mi mente se nubló.
Que diría? Qué podría ser creíble en una situación así? Más importante, el médico sospecha algo ?
Ante mi mutismo, Aaron aclaró su garganta y habló.

— Doctor, mi esposa a veces es un poco distraída y suele tener pequeños accidentes en casa donde se hace algún moretón— suspiró — y bueno resbaló por las escaleras y es así como terminamos aquí, trataremos de que tenga más cuidado, verdad cielo? — mr cuestionó.

— ehh si, si, trataré de ser más cuidadosa— le dí una sonrisa al médico que terminó pareciendo una mueca.

Él me miró inquisitivo y suspiró al mismo tiempo que dejaba caer sus hombros para decir...

— bien, en ese caso sra White le haré su receta y le enviaré recomendaciones para que se recupere satisfactoriamente, la sra white necesita descansar, la internaremos unos días a esperar su evolución— salió dejándonos solos.

— muy bien Dasha— besó mi mano— eres una buena esposa — dijo  acariciando mi cabello.

Asentí, solo quisiera descansar son las 5 pm segun el reloj de la habitación y no he comido nada en horas, cerré mis ojos para descansar un rato...

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Unos golpes en la puerta me despertaron, el reloj marca las 5:30pm

— hola querida, como estás? — ay Dios no puede ser, que hace ésta señora aquí?

Le sonreí con hipocresía a mi querida suegra.

Ella se me acercó, miré alrededor de la habitación sin rastro de Aaron.

— vine a reemplazar a mi hijo, tenía una reunión importante con socios. — dijo la madre de Aaron

Ah bien, su mensaje ha sido ignorado con éxito.
La sra se quedó callada por menos de 5 min para nuevamente empezar a hablar

— no entiendo como eres tan testaruda Dasha, tanto te cuesta ser una buena esposa? — preguntó con fastidio.

Me quedé en silencio, seguramente si le respondo tendré más problemas.

— estuvimos hablando con Aaron y dijo que pronto nos darán nietos, la verdad no estoy segura de que serás una buena madre, claramente el papel de esposa te ha quedado grande— siguió parloteando.

Cuánto veneno tiene ésta víbora...

— ya veo porque tus abuelos se querían deshacer de ti ... Eres un dolor de cabeza,  no entiendo cómo mi pobre hijo se encaprichó contigo, hasta echar a perder su vida a tu lado — dijo indignada.

Por favor, si la que está perdiendo su vida soy yo al lado de él.
Tampoco comprendo el capricho de Aaron, pero si no lo comprende ella que fue quién lo crío mucho menos yo lo podría hacer.

— Aaron llamó a tú familia, adivina qué? Ni les importó, ellos saben que todo esto es culpa tuya, es que si no fueses una mala mujer, éstas cosas no pasarían — refunfuño.

Dios, ya no sé cuánto más me pueda aguantar, lleva al menos media hora de cantaleta.

— eres una mujer estúpida, aprenderás por las buenas o por las malas tu lugar, con mi hijo no vas a jugar— dijo apretando el brazo que no tengo enyesado.
Le quité el brazo bruscamente y no aguanté más.

— Señora, Ya sé que soy lo peor y su hijo lo mejor, no hace falta que diga más, déjeme descansar, mucho hice con no denunciar a su hijo por maltrato — le contesté con mucho enojo entre dientes.

Levantó la mano para abofetear mi rostro pero en ese momento entró una enfermera con una charola de comida y me acomodó la mesita para comer, dejó la bandeja frente a mí.
la madre de Aarón se sentó apartada en un sillon y no le dí más atención.

Comí tan ligero en el desayuno y ni siquiera almorcé, asi que me devoré todo rápidamente.

Al terminar otra enfermera se llevó la bandeja y me pusieron medicamento para el dolor que ya estaba empezando a despertar nuevamente.

Me quedé dormida, por el cansancio, por tantas emociones revueltas.
mentiría si dijera que no me duelen todas las palabras de la madre de Aarón, la indiferencia de mi familia, pero lo que más dolor me causa es la traición de mi primo.


DashaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora