II

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Pov. Patricia

  Marcela ya había abierto como 4 botellas y tenía intenciones de abrir una quinta al parecer porque la ví pararse de su silla, se tambaleaba un poco en su camino a la cocina, la ví llegar con la botella y sabía que esto no era por solo una infidelidad de Armando si no que era ese sentimiento amargo de no sentirse suficiente para alguien.

  Marcela se sentó un poco más cerca mio e intentó abrir la botella sin éxito, cuando Marcela se emborracha es como un niño pequeño se frustra muy fácil, y es como si fuera la persona más tierna del mundo.

  Hizo un puchero cuando no pudo abrir la botella por su falta de puntería gracias al alcohol.        Después de intentarlo un par de veces más me pasó la botella y el sacacorchos.

  Abrí la botella y le serví un poco en su copa, ella estaba bastante sonriente, bastante más de lo normal diría yo.

-Me gusta pasar tiempo contigo, es divertido. Hay que hacerlo más seguido.

- Si Marce eres divertida borracha.

- Yo no estoy borracha.

  Me parece gracioso que ella se crea que eso es cierto.

  Seguimos tomando por otro rato hasta que mi mundo comenzó a girar un poco más rápido de lo normal, ya era momento de parar.

- Ay Marce, yo te diría que ya fue mucho por hoy.

- Mmm como que quizás si ¿no?

- Si Marce ya habría que acostarnos porque mañana Armando me va a ahorcar.

- Ay no paty nosotras mañana dormimos hasta tarde, yo le invento algo a Armando, que me enfermé o algo así.

  Ok ahora sí era raro Marcela nunca, pero cuando digo nunca es nunca,  ha faltado a trabajar mucho menos mentirle a Armando con algo de la agencia, obvio que sin contar esa vez en la que le robamos el informe a la fea.

- vamos a dormir que ya no doy más de sueño.

  Tomó mi mano y me guío hacia su cuarto, la verdad es que creí que me iba a mandar a dormir al sillón, pero se ve que hoy está de buenas.

  Me dió un pijama y se fue al baño mientras yo me cambiaba salió e hizo algo que nunca creí que haría Marcela Valencia en más de 10 años de amistad, se cambió en frente de mí.

  Comenzó a sacar su  camisa lentamente, para luego sacarse su brasier ¿esta mujer está loca o que?

- pats  - me llamó un par de veces hasta que salí de mi trance gracias a Dios ella está lo suficientemente ebria como para no notar que le ví lo pechos, es que yo también  ¡¿Cómo se me ocurre hacer algo así?!-  ¿qué hice mí pijama? recién lo tenía en la mano.

-es..está en…en el piso marce.

  Dios Patricia que bruta, ni siquiera puedo hablar bien, que pena.

-ah si si, tienes razón.

  Se quedó mirando su pijama como por 5 segundos y finalmente se arrodilló a juntarlo del piso ¿Dios que te hizo creer que yo soy tu mejor guerrero?

En definitiva mi juicio estaba siendo puesto a prueba, ella se veía muy linda con su cara de confundida, creo que estaba analizando cómo era que el pijama había terminado en el piso.

  Finalmente se terminó de vestir, apagó la luz y se acostó a mi lado.

- Buenas noches Marce.

- Buenas noches Patricia.

¿Y si...?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora