Caos Series (#1 - #4)

4: Olvido

Estoy soñando.

Lo sé. Lo recuerdo, me desmaye. Pero odio mi sueño, porque no sé si estoy soñando, o viendo una imagen de una alterada realidad, o quizá es una premonición de lo que puede pasar, pero estoy en una cueva, no puedo salir, no puedo moverme. Hay alguien detrás de mí, sosteniéndome, el me impide moverme.

―No ―me dice muy seguro―. No nos podemos involucrar en eso, nos quieren a nosotros no a ellos. Si mueren no es nuestro problema, no los mandamos ahí.

Oigo mi voz pero no muevo mi boca, golpeo la pared invisible que me deja ver todo y me restringe a la vez.

―¿Cómo que no es nuestro problema? ―grite―. Ellos... son la mejor forma para atraerme a mí, solo los utilizan ¡No puedo permitirlo! Yo...

―Déjame ir. ―La imagen sale a la luz, atónita veo a Ángel aparecerse frente a mí.

―Ellos no son nuestro verdadero enemigo. Tu flecha lo revelará.

Antes de que siquiera pudiera responderle sentí la barrera desaparecer y salí corriendo de ahí, pero no podía moverme, mies piernas no respondían, con mucho esfuerzo logre avanzar a lo suficiente, con el corazón en un puño me quede viendo como acontecía la pelea, ciertamente no les iba tan mal pero no podía arriesgarme a que pase a más, Poseidón, Temis, Preston y Apolo rodeando a una figura, peleando cansadamente.

Siento el peso de un arco en mi mano, incluso si no hay flechas sé que tengo que disparar, y lo hago, la flecha pasa directamente por todos ellos, entonces desaparecen. Ryan me mira sorprendido, la flecha incrustada en medio de su pecho.

Tu flecha revelará al verdadero enemigo.

Despierto.

Mi cabeza duele, siento nauseas. Me levanto suavemente, mirando a mí alrededor. Una figura traslucida brilla en la habitación.

―¿Hera? ―mi voz es un vago susurro por la sorpresa, entonces se vuelve dura―. ¿Cómo si quiera te atreves a aparecer? ¿Por qué demonios puedo verte?

Ella me mira triste.

―Es lo que eres, por eso también pudiste ver a la chica vástago.

Mis ojos se abren en sorpresa, ¿cómo sabía de Helena?

―Eris... yo no soy el verdadero enemigo.

Bufó, miro a mi madre.

―Me hiciste el enemigo, Hera. Finalmente vieron la verdadera tú, mi padre...

―Tú no tienes padres Eris, aun así yo te tomé como una hija, lo que te hice hacer tiene un motivo. Mi muerte, como la de Cronos y Metis fue algo que buscaba, tu padre tiene poco poder ahora, pero el experimento esta listo.

―¿De qué estás hablando?

―Hay muchas más cosas que olvidaste Eris, y necesitas la ayuda de tu caballero para recordar.

Me tenso, no quiero involucrar a Ryan, no quiero que se meta más en algo que no le importa.

―Él es solo un mortal.

―Tú y yo sabemos que no lo es. Y por el momento necesitas su ayuda.

―¿Qué quieres que haga?

―El inicio del leteo, llega allí y encontraras una cueva de la que nace el cauce. Recordarás lo que tu padre te obligo a olvidar.

Sin más desaparece, suspiro. Puede que no recuerde todo por completo pero sé que esto quizá sea un suicidio. Aunque en este momento eso parece lo más seguro que puedo hacer.