Caos Series (#1 - #4)

2: Angel

Los edificios al exterior aumentan lentamente su tamaño conforme nos movemos. Llegando a Manhattan, llegando al Museo de Historia Natural.

No debería estar en el colegio. Cómo era posible que un solo chico pudiera pagar dos colegiaturas, un departamento y alimento sin tener un trabajo, sin tener de algún aporte monetario.

¿Quién era Grant?

Por qué solo confió en el ciegamente sin cuestionarme nada.

Por qué...

Un golpe en mi hombro me desvía de mis cavilaciones, haciéndome pegar un brinco en el asiento, los audífonos caen de mis sonidos haciendo que el solo de guitarra rasgue en el silencio del autobús.

―Melanie ―dijo Sam―, ¿estás bien?

Miro a Samantha, por ahora ella es lo único real en mi vida, lo único seguro, porque es lo único que forme por mí misma. Y aun así no puedo darle toda mi confianza porque siento esta ola de recelo. Algo me dice que la lastimaré si sigo con ella.

La veo mirarme como esperando algo, y ahí recuerdo que me hizo una pregunta.

―Bien, estoy bien…

―¿Piensas en tu novio? ¿Por qué no vino?

Niego con la cabeza.

―Grant… Él tiene entrenamiento, partido final… no pudo venir.

Sam me mira lentamente recorriendo mis facciones,  analizando todo.

Suspiro.

―¿Segura que no paso nada?

―¿Por qué es tan importante para ti?

―Eres mi amiga.

Miro el bus, en busca de algo para desviar su atención. Sam lo encuentra antes que yo.

―El chico nuevo ―habla Sam―, te está mirando desde hace rato.

―¿El que gano el torneo de tiro con arco hace dos días?

Sam me codeo.

―Te vi mirándolo en la cafetería el otro día. Y él a ti.

Me muerdo el labio, por un momento mirando unos ojos azules, luego desvían la mirada. Liberándome.

―No le conozco ―me encojo de hombros y paso mi mirada a Sam―, no está en ninguna de mis clases, no he hablado con él.

―No porque no quieras. Te atrae, y mucho si puedo decir.

Me gire en mi asiento, pensando por un momento en Grant. Sam tenía más razón de lo que suponía. Angel era nuevo en la escuela y desde el primer momento que lo vi, llego a mí de una manera diferente. No me gustaba.

Pero me atraía, no de manera romántica, más bien como un simple reconocimiento, afinidad. La primera vez que lo vi fue en una de sus prácticas, preparándose para el evento donde consiguió el primer lugar.

Ese porte y poderío que emanaba, apartando todo a su alrededor, nublando a todos con su sola presencia, ese poder me parecía familiar.

Grant no estaba conmigo, sino no sabría como poder explicárselo, porque si era más tímida que las demás, más reservada me había parado tan estrepitosamente solo para verlo. Su cabello marrón, su espalda recta y fuerte, sus ojos azules fijos en el blanco frente a él.

Me fascinaba, y a la vez me aterrorizaba.

Me giro para enfrentar a Sam a mi costado, pero estoy sola, el último  alumno bajando por el autobús por lo que me apresuro a la puerta. Mirando a mi alrededor, buscando a alguien a quien seguir, no había nadie, todos ya habían ingresado. No me quedaba de otra, por lo que entre sola al museo.