Guía y nitidez [Tododeku]

Capítulo 42: Boda no soñada.

-Seguramente llegaron temprano para no llamar la atención, pero es inevitable...

-Qué incómodo ha de ser que tu antigua omega de compañía termine casándose con tu ex esposo.

-¿Será ese el motivo por el que se divorciaron? ¿Lo dejó por otra sirvienta?

-Ya vemos que el amor que tanto presumían no duró para siempre...

Izuku mantiene la compostura, lo que la gente busca es una reacción, más motivos para hablar, pero él no iba a dejar que aquello suceda.

No iba a permitirlo, él también tenía un poco de orgullo.

Siente presión en su mano, es Shōto ofreciéndole otra de sus hermosas y ligeras sonrisas reconfortantes, le devuelve el gesto antes de enrollar su mano en el brazo de este y avanzar juntos al interior de la capilla.

Son recibidos por Mitsuki y Masaru, que los reciben con calidez y formalidad antes de ir a acomodarse en sus respectivos lugares seleccionados para esperar a que todo dé inicio.

Conforme los demás iban llegando, los susurros se intensificaban al notar la presencia de Izuku, quien ya los empezó a ignorar y prefería simplemente recostarse en el hombro de Shōto mientras se entretenía jugando con sus manos, comparando la diferencia de tamaños.

-Lord Izuku...

Izuku y Shōto se dan la vuelta desde sus asientos, cuando ven a cierta vizcondesa rubia con una sonrisa altanera, supieron que no iban a tener un momento de paz.

¿Cuál era la obsesión de Kemy con ellos? ¿Tan miserable era su vida que intentaba rebajar la felicidad de los demás?

-Ignórala, cariño. No lo vale -le murmura Shōto retornando la vista al frente, donde Katsuki ya estaba parado en el altar con cara de pocos amigos.

Izuku decide que su amado tiene razón así que le voltea la cara a la omega, dándole la espalda.

-Ah, creo que ya sé la historia -ríe ella en voz baja-. El barón Katsuki te dejó por tu omega de compañía, así que para darle celos decidiste meterte con el primer hombre que encontraste y ese era Lord Shōto, ¿no?

Izuku no iba a responder, se limita a suspirar mirando con indiferencia a Katsuki a lo lejos, que también lo miraba. A él y a Shōto en realidad.

-¿Cree acaso que Lord Katsuki, un alfa en todas sus letras, va a ponerse celoso de un insignificante beta? -oyen otra voz.

Es Lord Minoru, sentado detrás de Lady Kemy, ella ríe.

Suficiente.

Izuku puede tolerar especulaciones sobre él, mas no sobre Shōto, mucho menos que lo denigraran y se metieran con su casta, que ha sido la mayor de sus inseguridades hasta el momento.

Gruñe girándose para enfrentarlos.

-¿Están hablando de chismes? Yo también quiero.

Antes de siquiera abrir la boca, alguien toma asiento al otro lado de Shōto y habla tan fuerte como puede, o al menos lo suficiente para llamar la atención de quienes están cerca sin hacer un escándalo.

-Empecemos con usted, Lady Kemy, ¿algún avance con su marido o sigue esperando a que la note? De hecho, ¿dónde está Lord Inasa? Mmm... -finge mirar a los alrededores -Oh, ahí está, y con su concubina como acompañante. Lady Kendo ya está embarazada y usted sigue guardándose para alguien que ni la hora le da, qué lástima.

Izuku mira con leve sorpresa al rubio que traía una sonrisa altanera mientras la vizcondesa ponía una expresión de incomodidad, como si quisiera que la tierra se la tragase.