| C A P I T U L O [XII] |

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| CAPITULO [XII] |

━ ❝ Desayuno. ❞

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━━━ Narra Choi Na-ri.

No sentía miedo ni nada por el estilo, es más, no podía aguantar las ganas de llegar y ver las expresiones de todos en aquella reunión. Luego de la fiesta de ayer, la noticia de mi aparición se hizo muy conocida y por lo mismo es que, mi abuelo organizo una reunión con toda la "familia" y también invitó a sus vasallos de confianza.

Me levanté muy temprano por la mañana para tomarme mi debido tiempo para estar lo mejor arreglada posible y llegado el momento partí hacia el lugar. Hyun bajó conmigo del auto y juntos ingresamos a la casa de mi abuelo, que es donde sería la reunión y además, nadie podría causar un escandalo. 

— Llegaste. - Sonrió mi abuelo al verme y me recibió con un fuerte abrazó. - Na-ri, hay unas personas que te quiero presentar. 

Me separé de él y miré en dirección a cinco hombres, que además de estar muy bien vestido, emanaban una aura agradable y eso me hizo sentir cómoda. — Buenos días, mi nombre es Na-ri y es un gusto conocerlos. - Hablé mientras hacia una reverencia y sonreía. - 

— No tienes que hacer una reverencia ante estos viejos. - Sonrió uno de ellos. - Se parece mucho a Dae-hyun, en especial en su sonrisa y mirada.

— Lo mismo digo. - Sonrió otro de ellos. - Estoy seguro que tu padre estaría muy orgulloso de tu inteligencia y apariencia. 

— Ellos son amigos de tu padre, estudiaron con él. - Intervino mi abuelo. - Ellos son mis hombres de trabajo, pero además, se encargaban de ti en secreto. 

Cada uno se presentó y me comentaron algunas cosas que hicieron por mi, y era verdad lo que decían. Con eso, medí cuenta que mi abuelo nunca me dejó sola y que, estos hombres además de ser amigos de mi padre, eran sus fieles seguidores y ahora, ellos estarían cuidándome en lugar de él. 

Papá, gracias por dejar a estas personas conmigo. - Pensé y dejé escapar una sonrisa. -

Continuamos hablando hasta que dos hombres se comenzaron a acercar, llamando mi atención y la de los hombres que estaban rodeándome. — Buenos días, padre. - Saludaron ambos. - 

— Junho, Youngjae. - Nombró mi abuelo. - Buenos días para ustedes también.

— Parece que la charla estaba muy buena, pero. - Me miró. - Mi hermana y tus nietos te están esperando en el comedor.

— Es cierto, se me olvidó. - Me miró y extendió su brazo hacia mí. - Vamos, Na-ri.

Agarré su brazo y justos comenzamos a caminar seguidos por aquellos hombres a nuestras espaldas. Esta era la primera vez que venía a casa de mi abuelo y admito que cada cosa que veía dentro de ella, aparentaba ser demasiado caro. También llegué a ver algunas fotos de él y inclusive de sus hijos, entre ellos, de mi padre. 

Entrando a la cocina todos los trabajadores hicieron una reverencia de noventa grados y aquellos que ya se encontraban sentados, se levantaron de su lugar. Mi abuelo les hizo una señal al resto de que se sentara y aquellos hombres que nos siguieron, también se fueron a sus respectivos lugares. 

Mi abuelo palmeo mi mano sobre la suya y miró al resto. — Antes que nada, gracias a todos por brindarme algo de tiempo en esta hermosa mañana. - Dijo. - Y este desayuno lo organicé con la única intención de incorporar a mi nieta menor a la familia. 

Él me dedicó una sonrisa y luego yo miré al resto de las personas reunidas, sabía quien era cada quién y todo eso debido a que leí sus archivos para este momento. — Buenos días familia. - Sonreí. - 

Solamente los cinco hombres de antes me devolvieron la sonrisa, el resto solo se limitó a mirarme fijamente y eso a mi me daba igual. Juntos nos acercamos a la mesa y mi abuelo se sentó en la cabecera, Hyun quien siempre estuvo detrás de mi corrió la silla que estaba a la derecha de la cabecera y en ella me senté yo. 

— Padre. - Habló uno de los hombres de antes, mi tío Junho. - Aquí hay otro lugar disponible, al lado de mi hija Mi-na.

— Lo sé, pero quiero que Na-ri esté a mi lado. - Sonrió y agarró mi mano. - 

— Abuelo. - Ahora intervino el nieto mayor, Min-hyuk. - Sabes que ese lugar únicamente puede utilizarlo por el futuro heredero, ¿verdad?.

— ¿Ahora tú quieres enseñarme, a mi?. - Preguntó con sarcasmo mi abuelo, nunca antes lo había visto así. - Yo sé mucho más que tú y que todos de aquí, no lo olvides, ¿entendiste?. 

— Si abuelo, perdón. - Se disculpó agachando la mirada. - 

— Por dios, padre. - Intervino la única hija de mi abuelo, Eun-hae. - Sabes que mi sobrino no lo dijo con mala intención, pero es verdad, aún no se ha hablado de la sucesión y ocupar ese lugar es. 

— No quiero interponerme en esta conversación familiar, pero, ¿puedo opinar?. - Exclamó uno de los hombres de antes desde el otro extremo de la mesa. -

— Eres de la familia, claro que puedes. - Autorizó mi abuelo comiendo de su servido. - Procede.

— Como todos ustedes saben, el señor Choi Dae-hyun era el sucesor original y luego de su fallecimiento, su única hija pasa a ser la sucesora legítima. - Habló. - Por lo mismo me atrevo a decir, que ese lugar y posición le corresponde a la señorita Na-ri.

— Señor Boo, ¿cómo puede sacar un tema como ese?. - Preguntó el tercer hijo de mi abuelo, Youngjae. - Hablar de un muerto, es increible.

— Tío. - Lo interrumpí y todos me miraron. - No quiero ser irrespetuosa pero le voy a prohibir que hable despectivamente de mi padre. - Dije. - Ahora, estamos en un desayuno y de verdad agradecería que no saquen ese tema de conversación. 

Miré a mi abuelo y él solo se limitó a escucharme atentamente a cada palabra que decía. — Si el problema es este lugar, aunque admito que es una discusión infantil, con gusto me cambiaré de lugar. 

— Agradezco tu madures, de la cual, la mayoría carece. - Dijo mirando al resto de los integrantes de la familia. - Y si estas bien con eso, hazlo. 

Así fue como terminé sentándome en medio de mis primos, aún lado tenía a la hija del hermano mayor de mi padre, Choi Mi-na y del otro lado tenía a la hija de la única hermana mujer de mi padre, Choi Eun-bi. Ambas me miraban de reojo pero no llegamos a cruzar ni una palabra, y por mi parte, solo me limité a desayunar.

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𝐉𝐄𝐑𝐀𝐑𝐐𝐔𝐈́𝐀 [𝐛𝐨𝐲'𝐬]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora