Chiara's POV
La luz de la mañana comienza a molestarme y abro los ojos con dificultad, sonrió al ver a mi novia entre mis brazos totalmente dormida y relajada, recuerdo que estoy en Menorca.
Parece increíble, estoy en mi isla con la chica que amo y toda mi familia, no puedo ser más feliz.Observó el rostro de la pelirroja, está tranquila y no se ha despertado en ningún momento en toda la noche, ni siquiera a gruñido frustrada o algo por el estilo.
Giro mi cabeza y en el reloj de mi mesilla veo la hora, las diez y media de la mañana, si queremos llegar a tiempo a rehabilitación debería despertarla ya, por mucho que me duela tener que interrumpir su tranquilo sueño. Así que me acerco a ella y comienzo a acariciar y besar su piel como cada mañana hasta que porfin la pelirroja abre los ojos y al verme los vuelve a cerrar, se abraza más a mí cuerpo y sonríe.
—Amor, vamos a llegar tarde. Me estoy dando cuenta que eres una dormilona. —Ella se ríe y abre sus ojitos. Sus labios rosas me emboban pero esos ojos ragados me matan, nunca he conocido a nadie con una mierada tan hipnotizante.
Violeta me sonríe, y se sienta en la cama, ella sola. Sin ayuda de nadie. ¿Me siento orgullosa? Pues claro que sí. Está mejorando y con el fisio va a mejorar aun más rápido, quizá nos da tiempo hasta a dar una vuelta por Menorca andando, aunque sea con muletas o algo.
Le ayudo a sentarse en la silla no sin antes dejar un casto beso en sus labios.
—Kiki. —Toda mi atención se centra en ella. —Hoy hay luna llena. —Asiento pero sigo sin saber que quiere. —¿Podemos bajar a la playa? — Sonrió enternecida, se lo mucho que le encanta la luna, me doy cuenta cada vez que se queda embobada mirándola o me habla sobre poemas de Lorca que hacen referencia a la luna.
—Claro amor, hoy bajamos a una cala. Hay que coger el coche pero merece la pena, suele estar vacía y lejos del bullicio de las casas.
Los ojos de Violeta y puedo ver la ilusión en ellos, es como una niña pequeña cuando le regalan el juguete que tanto tiempo ha esperado.
***
Después de una ducha, bajamos y vemos a mi madre, está preparando el desayuno y cuando me ve se acerca a darme un beso acompañado de los buenos días, se que ha echado de menos verme todos los días aunque no lo admita, tras darme un beso a mí se agacha a la altura de mi novia y le da otro a ella en la frente. Por alguna razón que puedo deducir, sus ojos se humedecen.
—¿Que os apetece desayunar cariño? —Pregunta mi madre mientras señala lo que hay en la nevera. —Hay fruta, tostadas...
—Yo me voy a preparar un yogur mamá. —Mi madre asiente y dirige su mirada hasta la motrileña, que está mirando un punto fijo. —¿Y tú cariño?
— Yo fruta. —Responde mientras sonríe y mi madre saca de la nevera un bol de fresas y se las entrega.
Tras un corto desayuno, pues teníamos prisas salimos de casa, no son antes despedirnos de mi madre.
Ayudo a Violeta a subir al coche y me subo en el lado del piloto, tras ponerme el cinturón emprendo rumbo hasta la clínica de fisioterapia donde tratarán a Vio.El camino es ameno, escuchamos música y cantamos a la vez, mi derecha está entrelazada a la izquierda de Violeta, parece que la vida nos sonríe, parece que ya solo vamos a ser ella y yo y nadie se va a interponer en lo nuestro, ni nadie nos va a hacer daño. Por eso ambas estamos felices.
***
Después de un corto camino por la carretera de Menorca, que no rodea la isla si no que cruza por la periferia, llegamos a la clínica. Tras sentarnos en la sala de espera, ella se apoya en mi y esperamos pacientemente hasta que una chica con melena marrón y ojos del mismo color abre la puerta.
—¿¡Keeks!? —Mi mejor amiga grita sorprendido al verme melodeando por la isla.
—Hello Paula! — Me levanto efusivamente a abrazarlo y ella me corresponde levantándome en el aire.
Mi novia mira con una sonrisa en la cara el encuentro mientras sigue sentada en su silla.
—¿Que haces por aquí? —Me pregunta.
—Hemos venido unos días a la isla, bueno, no tenemos días en concreto. —Ella me mira y sonríe con picardía al ver a mi chica detrás.
—Oh, Violeta es mi novia por cierto.—Digo mientras me acerco a ella y empujo su silla hasta quedar frente a Paula.
Se saludan con dos besos y Violeta está sonriendo tímidamente, se que no está incómoda pero sí cohibida.
—Encantada Violeta, soy Paula, la mejor amiga de la guiri esta. —Dice mientras le extiende la mano y luego me sacude el pelo y yo la miró mal. —Supongo que es a ti a quien voy a tratar.
Violeta extiende la mano también y se dan un apretón. —Si soy yo. —Mi novia sonríe con un leve rubor en las mejillas.
—Bien pues no perdamos más tiempo, Kiki, por mucho que te quiera el protocolo dice que te tiene que quedar fuera. —Le miro con mala cara mientras me siento otra vez en la incómoda silla de la sala de espera y recojo la piernas en forma de indio y luego sonrío falsamente. —No te preocupes, tú novia está en buenas manos, dentro de nada estará como nueva.
Y tras eso, pasan a la sala y yo me quedo ahí, jugando con mi móvil a Subway surfers esperando a que pase el tiempo.
***
Violeta's POV
Tras una intensa hora y media de sesión salgo de sala, aún en la silla. Lo que he trabajado sobre todo ha sido el movimiento de la columna y solo he podido ejercitar una pierna pues el yeso de la otra impide que pueda hacer mucho más , sin embargo, estoy reventada, parece que hubiera hecho tropecientas horas en el gimnasio seguidas.
Allí fuera, me sigue esperando la morena que me ha robado el corazón que nada más verme se levanta y me ve la cara de cansada y probablemente mis ojos algo cristalinos pues no es mentira que durante la larga sesion me he sentido un trapo y no tenia apenas fuerza para hacer nada.
Me abraza con sutileza y me deja besos en la cabeza.
—¿Cómo ha ido?
—Bien, estoy cansada. — Le sonrió y ella acaricia mi piel.
—Bien pues ahora nos vamos a casa y te echas una buena siesta, y está noche bajamos a la playa para que no te pierdas la luna llena.
Y así hacemos, nos vamos a casa y comemos en familia, como me hubiera encantado que mi familia hubiera hecho pero eso nunca pasó.
Cuando terminamos de comer, ayudo a fregar a los platos junto a Chiara a pesar de la insistencia de Emma de que no lo haga, y antes de irme a dormir, llamo a Tana para preguntarle cómo va todo y me quedo tranquila cuando me dice que está bien y que se lleva muy bien con la hija de Noemí.
Y tras eso, me tumbo en la cama junto a Chiara, nos tapamos con una manta y ella se pone a ver la tele que está enfrente a la cama mientras yo en un momento caigo dormida entre los brazos de Chiara.
❤️❤️❤️
He vuelto!!! No he tenido q penas tiempo de escribir pues me fui de viaje y la semana que viene me voy otra vez :(
Pero voy a intentar escribir algo antes de irme para no abandonar tanto tiempo de nuevo.
Probablemente mañana tengáis capítulo (o pasado no estoy segura)Kisses from L.💋
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A Escondidas / Kivi
FanfictionVioleta y Chiara se conocen en su primer año de bachillerato, Violeta con sus 17 años recién cumplidos y Chiara con 18. ¿Podrán congeniar o la familia de alguna de las dos no querrá que su hija tenga contacto con la otra chica? *Historia dura *Conte...