PASION PROHIBIDA

Extra Rinaldi( Pasado,parte1)

Hola, este es un extra que vi necesario ya que para mejor entendimiento de la historia es necesario que vean todas las partes de la historia y juzguen por ustedes mismos.

¡Atención, contenido sensible, ( leer bajo su responsabilidad)!

Este extra está dividido en 2 partes.

(Italia, 21 años antes de la actualidad).

Emily Rinaldi

— ¡Niña idiota! — grita mi madre enfurecida y me empuja haciendo que mi trasero impacte contra el suelo frío y duro de la calle.

— Lo siento..yo..yo

— ¡Callate maldita, bastarda! ¡Eres inútil, inútil, los clientes no pagan por tú maldita culpa! — me sigue gritando llamando la atención de las personas que pasan que son muy pocas.

Yo sollozo y recuerdo como ese horrible y mayor señor me hacía daño sin importarle mis lágrimas y mi dolor.

No digo nada ante sus reclamos y lloro en silencio y entonces recibo el primer golpe y luego otro.

Siento el ardor en mis pomulos y la sangre caliente que baja por mi nariz mientras mi madre me golpea hasta el cansancio por ser una inútil y una bastarda.

— ¡Para, madre, para! ¡Por favor! — el impacto en su mano en mis ambos pómulos no se detiene, la sangre brota y siento mi piel abrirse mientras mis lágrimas corren y grito esperando que se detenga.

— Duele, duele, mami..por favor — no le importan mis súplicas no para, parece no tener razón, pero siempre lo hace, siempre me pega si no cumplo el trabajo con uno de esos señores que visitan a mi mami.

Empiezo a marearme y a mirar borroso entre lágrimas y los puños de mi madre se hacen borrosos hasta que veo totalmente negro y el dolor para.

[...]

Despierto en una habitación que reconozco perfectamente y mi cuerpo tiembla al pensar en lo que mi hicieron mientras estaba inconsciente.

No hay sábanas que me cubran y veo mi desnudez y una mancha de sangre que ya estoy acostumbrada a ver, pero aún así duele.

Las lágrimas brotan de mis ojos y suelto un quejido bajo cuando el líquido salado bajo por mis pomulos seguramente rotos y sangrientos ya que aquí a nadie le importa la vida de nadie.

No me molesto en ver las marcas que seguramente tiene mi cuerpo y trato de sentarme, pero todo me duele y pienso en dulces para no pensar en todo lo que seguramente hicieron y mi madre estuvo de acuerdo.

Me mentalizo que es mi trabajo y tengo que obedecer a mi madre, pero mi mente no obedece y me dice que eso está mal y que huya.

Pero soy una bastarda y no tengo a donde ir y recuerdo las palabras de mi madre: "nadie te querrá, eres una cualquiera y una puta, esa es tu realidad, nuestra realidad, bastarda".

No, yo no quiero que esa sea mi realidad, no quiero.

Hoy es mi cumpleaños, cumplo 11 años y ya estoy acostumbrada a no esperar nada por parte de mi madre.

Escucho los sonidos a los que ya estoy acostumbrada todos los días y cierro los ojos.

Tranquila, Emi, algún día serás feliz y tú mamá te querrá.

Me repito esas palabras siempre, pero ya me he empezado a resignar que esta es mi realidad, mi vida y mi futuro.

No tengo donde ir, no tengo papá o si lo tengo no importa, tampoco me ha de querer.