08/03/2022 - Argentina, Latinoamérica.
MATÍAS
—Eres muy disimulado... — su voz sarcástica detrás mío me hizo saltar del susto, pero sin mirarle, le regañé.
—¡Cállate! ¡Que nos van a descubrir!
—Si gritas de esa manera sí que nos van a descubrir, Matías.
—Solo quiero saber de qué hablan, parece que se divierten mucho. ¿Por qué no es así de amable conmigo?
—Quizá porque eres un acosador.
—¡No lo soy! — defendí mi postura.
—¿Y qué estás haciendo ahora mismo? Llámame loco, pero yo creo que esto se llama acosar.
—Si no me vas a ayudar vete, Agustín. Harás que me pillen.
Espera.
¿Agustín?
¿AGUSTÍN?
Por primera vez, giré sobre mi eje para ver a mi amigo de ojos verdes y cabello castaño, quieto frente a mí, sonriendo de oreja a oreja. Mi corazón dio un vuelco, y una mezcla entre sorpresa y emoción se apoderaron de mí en cuestión de segundos.
¿Era real lo que estaba viendo? ¿O el efecto del holograma de Enzo me había afectado demasiado?
—Es real lo que ves.
¿Cómo? ¿Lo había dicho en voz alta?
—Sí, lo has dicho en voz alta. — afirmó Agus. —¿Tanto te sorprende verme?
Un nudo se hizo presencia en mi garganta, pero esta vez no era de tristeza, sino de alegría. Había esperado tanto tiempo este momento, había deseado tanto que el chico me volviera a dirigir la palabra, que me buscara, que me volviera a considerar parte de su rutina diaria. Y ahora, estaba pasando.
—Es que no... no sabía si querías hablar conmigo. — confesé.
—No es que no quisiera, pero la verdad tampoco tengo ningún tipo de excusa para darte. — mi amigo se tomó unos segundos de pausa antes de volver a hablar. —Te tengo que confesar que me asqueé, pero no por lo que hubiera pasado, tu sexualidad no es algo que yo deba juzgar, y estaré feliz te guste quien te guste. Pero no pude soportar el hecho de que Enzo te tratara así después de todo. Me acordé de la primera vez que hablamos de este tema, me dijiste lo importante que era para ti tu primera vez, que querías que fuera especial, me da tristeza ver como eso no se ha cumplido, y sobre todo ver como ya no puedes volver atrás para que las cosas cambien. Te juro que construiría una máquina del tiempo solo para ti, para que puedas evitar todo esto.
Cada palabra de Agustín borraba parte del malestar que había estado cargando. Ya no estaba solo, sentía como si un espacio vacío que habitaba en mí, y no sabía que existía, empezaba a llenarse. Jamás supe cuánto me importaba Agus hasta este momento, preferiría que cualquier persona se fuera antes que él, incluido Enzo. Y aunque en ese momento no sabía cómo responder, la sonrisa de mi rostro fue inevitable.
Sin poder contenerme, di un paso hacia adelante y envolví mis brazos alrededor de mi viejo amigo. Sus brazos se tensaron por la acción no esperada, pero al momento se relajaron, devolviéndome el abrazo y apretando nuestros cuerpos.
El familiar olor de Agustín no tardó en invadir mis fosas nasales, me permití cerrar los ojos y hundirme en el abrazo, recuperando la sensación de protección, tal vez no habría acabado todo, pero al menos él volvía a estar conmigo, y eso era suficiente paz mental para los próximos días.
—Matías... no quiero arruinar tu gran momento, pero como ayudante de un acosador tengo el deber de informarte que Enzo y Flora se están yendo.
—¿¡Qué!? — me separé de mi amigo tan rápido como pude para comprobar, y efectivamente, se estaban yendo. —Pero, ¿a dónde van?

ESTÁS LEYENDO
𝐇𝐀𝐁𝐈𝐓𝐀𝐂𝐈Ó𝐍 𝟏𝟎𝟑 - 𝐆𝐞𝐧𝐞𝐳𝐚.
Fanfiction¿Quién planea enamorarse de su compañero de rodaje? Nadie. Pero esto se convierte en una realidad para Matías cuando Enzo comienza a hacerle sentir cosas extrañas y nuevas para él. Le odia, pero algo dentro de él no quiere admitir que le quiere. Y E...