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Una cantidad de soldados llegaban al palacio Imperial, pues se rumoreaba que  el Emperador no se encontraba en disposición en ese momento de gobernar o al menos la misión inicial había parado, por otro lado, habían algunos informes de que los campos de concentración de Omegas y traidores estaban siendo atacados.

No había ningún sospechoso hasta el momento y los soldados imperiales tuvieron que solicitar auxilio al Norte, los segundos mejores guerreros del mundo, Park Hyungsik llegaba junto con otro grupo de soldados siendo recibidos por Hoseok en la entrada principal del palacio.

Todos se reverenciaron y fueron invitados a entrar al lugar, fueron recibidos con honores por sus méritos en la guerras del Norte al frente siempre. Finalmente Hoseok les informó que el Emperador estaba indispuesto por lo que disculparan si no los recibía con su presencia.

Park Hyungsik por su parte, no se tragó ese cuento ya que Taehyung había entrenado con él en el Norte y tuvo que haber sucedido algo demasiado grave para que Taehyung se comportará de esa manera tan impropia de él. Se retiró antes de que todos terminarán de comer y se acercó a los aposento reales, aunque estaban custodiados, pero al conocer a Hyungsik lo dejaron pasar sin ningún problema.

El hombre tocó la puerta y al no recibir respuesta empujó con total cuidado la puerta asomando su cabeza por el umbral de la separación de la puerta. Taehyung ni siquiera se inmutó ante tal cosa, no respondió al principio pero únicamente emitió un sonido de aprobación, el hombre entró y caminó hasta él con total precaución, su aura estaba demasiado densa y parecía muy estresado, o tal vez se equivocaba pero podía notar un toque de tristeza. Se quedó a su lado únicamente en silencio.

—Dijeron que atacaron la fortaleza más grande campo de concentración de Omegas ¿Aún no saben del culpable?

El Alfa negó rotundamente y siguió mirando a la nada.

—Hyungsik, cuando llegue el momento quiero que acabes con mi vida. Ya no tengo nada por lo que luchar, lo único valioso para mí, fue destruido por mis propias manos, quiero encontrar a quienes hicieron eso, destruirlos y luego acabar con esta guerra para poder morir finalmente.

—¿Es eso lo que realmente quieres?

El hombre asintió, Hyungsik, se levantó de su lugar y se acercó a la puerta.

—Un mes... Eso te doy para que te repongas y empecemos la cacería.

Un mes después.

Taehyung finalmente se encontraba más tranquilo, ese día iría de cacería para encontrar quienes estaban causando disturbios. Ese día se vistió del comandante militar. Muchas cosas habían tomado un poco de sentido, su padre seguía cautivo en algún lugar, cosa que no le interesaba en lo absoluto, el dios sol lo dió como una garantía y ahora Taehyung tampoco necesitaba explicaciones de todo el drama que se cargaba junto con la diosa luna, después de todo moriría pronto y acompañaría a su amado Jungkook en el más allá.

En sus días de desolación realmente entendió demasiadas cosas que en su mente no lograba conectar, primero veían Jungkook como un objeto y así fue hasta desear asesinarlo pero con el tiempo encontrar a una persona que no le temiera después de todo y que se preocupará genuinamente por él así como el hecho de convertirlo en su esposo. Esas decisiones no se tomaban a la ligera en su mundo, pero la revelación mas grande que encontró en su interior es que realmente se había enamorado y amaba a ese Omega por lo que su pérdida significaba el total desinterés en mantenerse con vida. Aún en sus pesadillas veía a Jungkook sonriendo y a la vez huyendo de él. Pero esa era la promesa de que un día pagaría por todo eso.

Los militares del Norte junto con Hoseok y algunos otros soldados se adentraron al bosque que rodeaba la fortaleza de tortura de los Omegas, todos tanteaban terrenos y hacían guardias alrededor, pero una explosión no muy lejos de ahí captó la atención de todos, especialmente en la ala Oeste de la fortaleza. Los soldados de la fortaleza comenzaron a dispersarse. Muchos Omegas salían corriendo a duras penas cubiertos con una capa de luz a su alrededor. Hyungsik  desenvainó su espada con rapidez. Taehyung atacó la misma manera, encontrándose con NamJoon, ambos se miraron solo por el rabillo del ojo unos instantes ante aquella cantidad de humo. Las personas se dispersaban corriendo por sus vidas.

Jungkook se encontraba al frente, cerrando sus ojos para concentrarse en encontrar las raices de árboles que se encontraban debajo de aquella fortaleza, aquellos seres cobraron vida y empezaron a luchar contra los soldados que eran enviados lejos del lugar. Yoongi, se encontraba a su lado junto con SeokJin, Jungkook percibió la presencia de Taehyung cerca, volteó a mirar a Yoongi.

—¿Dónde está Jimin? Yoongi, mi bebé... Dónde está MiJun.

El chico que ahora su cabello era mucho más largo, rebelde y con mechones ondulados cubriendo su frente y con una coleta alta manteniendo una parte de su cabello por sobre su nuca, corrió fuera de la fortaleza, sintiendo una ansiedad incontrolable.

Taehyung corría intentando atrapar a algunos Omegas y rebeldes que escapaban justamente cuando saltó hacía la rama de un árbol su mirada se encontró con la de Jimin cubierto con una bata oscura hasta su cabello, el chico no pudo evitar sorprenderse y que su boca se torsiera en una expresión de preocupación, eso no era todo, llevaba consigo un pequeño bulto, envuelto completamente solo unos pequeños mechones sobresalian de la manta color gris.

Taehyung saltó de la rama cayendo frente a Jimin, el chico cayó sobre su trasero y se empujó con sus pies hacía atrás intentando escapar de Taehyung.

—Jimin...

Justamente la manta se removió un poco mostrando un pequeño rostro, el Alfa reconoció ese aroma tan peculiar era el suyo combinado con el de Jungkook, los ojos de aquel niño lo escudriñaban con total intensidad, un ojo de iris negra y el otro de gris casi amarillo. No lloraba únicamente se mantenía expectante, Jimin movió al pequeño hasta cubrirlo. Taehyung intento tocarlo pero este rápidamente lo apartó de un manotazo.

"KIM TAEHYUNG" por un momento aquella voz retumbó en sus oidos como un volcán erupcionando en su estómago, volteó a mirar a un costado y ahí estaba, su Jungkook, más esbelto, sus facciones ya no eran tan aniñadas, vestía como un guerrero rebelde, estaba apuntando a él sin ninguna vacilación, en su mirada no había más amor, únicamente se encontraba el rostro de un joven resentido.

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⏰ Última actualización: Sep 27 ⏰

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𝐏𝐑𝐎𝐇𝐈𝐁𝐈𝐓𝐄𝐃 𝐋𝐎𝐕𝐄 - 𝗧𝗔𝗘𝗞𝗢𝗢𝗞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora