@robychapa03
Espero que te guste el one shot
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Era una tarde soleada de sábado cuando decidiste hacer algo especial. Habías ofrecido cuidar a tus sobrinos, Max y Ella, mientras sus padres salían a hacer algunas compras. Tenías muchas ideas en mente, pero sabías que necesitabas un poco de ayuda. Así que decidiste llamar a Lando Norris, tu amigo y piloto de Fórmula 1.
—¿Lando? ¿Te gustaría venir a ayudarme a cuidar a los niños? —preguntaste mientras te acomodabas en el sofá, esperando su respuesta.
—Claro, suena divertido. ¡Me encantaría! —respondió con entusiasmo.
No pasó mucho tiempo antes de que Lando llegara. Traía su típica camiseta cómoda y unos pantalones deportivos, una imagen del chico despreocupado que siempre era. Los niños estaban emocionados al verlo entrar.
—¡Lando! —gritaron ambos, corriendo hacia él.
—¡Hola, niños! —dijo, agachándose para darles un abrazo.
La tarde comenzó con juegos en el jardín. Lando se convirtió rápidamente en el héroe de los niños, lanzándolos al aire y jugando a la pelota. La risa de Max y Ella llenaba el aire, y no podías evitar sonreír al ver lo bien que se llevaban.
Después de un rato, decidieron hacer una pausa y se sentaron en la hierba para descansar.
—¿Sabes qué? —dijo Lando, mirando a los niños con una sonrisa—. Cuando era pequeño, solía jugar en el jardín con mis amigos. Siempre hacíamos carreras de autos de juguete. ¿Les gustaría hacer eso?
Los niños asintieron emocionados, y antes de que te dieras cuenta, Lando había sacado de su mochila una colección de coches de juguete. Se sentaron en círculo y comenzaron a jugar, creando pistas improvisadas con piedras y ramas que encontraron en el jardín.
—Mira, yo soy el campeón de la pista. —dijo Max, colocando su coche al frente.
—No tan rápido, Max. Yo tengo un turbo especial en este. —respondió Lando, riendo mientras movía su coche hacia adelante con movimientos exagerados.
Los gritos de emoción y las risas llenaban el aire. Te quedaste observando, disfrutando del momento. Lando tenía una conexión natural con los niños, y era evidente que disfrutaba cada segundo.
Después de un rato, decidieron pasar al interior para un bocadillo. Lando se ofreció a preparar algunos sándwiches, y los niños se sentaron en la mesa, esperando ansiosos.
—Voy a hacer sándwiches de superhéroes. —anunció Lando, mientras comenzaba a preparar la comida.
—¿Qué ingredientes les gustan a los superhéroes? —preguntó Ella, mirándolo con curiosidad.
—Cualquier cosa que les dé superpoderes. —respondió Lando con una sonrisa traviesa—. Tal vez un poco de mantequilla de maní y mermelada.
Los niños se miraron, emocionados, y comenzaron a hacer una lluvia de ideas sobre los ingredientes que querían.
Mientras preparaban los sándwiches, tú les contaste historias de las aventuras de Lando en la Fórmula 1. Los ojos de Max y Ella brillaban de emoción al escuchar sobre las carreras, los coches veloces y las competiciones emocionantes.
—¿Alguna vez has ganado? —preguntó Max, curioso.
—Más de una vez —respondió Lando, guiñando un ojo—. Pero siempre es más divertido cuando hay amigos como ustedes alrededor.
Una vez que los sándwiches estaban listos, se sentaron a comer. El ambiente era alegre y lleno de risas. Mientras disfrutaban de la comida, Lando comenzó a contar anécdotas graciosas de sus días en las carreras, haciendo que todos rieran a carcajadas.
Después de comer, decidieron hacer una actividad creativa. Sacaron pinturas y papel, y Lando se unió a ellos, disfrutando de cada trazo de pintura.
—Voy a hacer un coche de carreras gigante. —anunció Max, mientras pintaba con entusiasmo.
—Yo haré un dibujo de mí corriendo con mis amigos. —dijo Ella, concentrada en su obra.
Lando comenzó a pintar su propio coche, y pronto, se creó un ambiente artístico lleno de risas y colores. Cada niño se esforzaba por hacer el mejor dibujo, mientras Lando los animaba.
—¡Eso es! ¡Pinta más rápido! ¡Tienes que ganar la carrera! —exclamaba, riendo y disfrutando de la energía de los pequeños.
Cuando la tarde avanzó, decidieron jugar un último juego en el jardín. Lando sugirió una carrera de obstáculos improvisada, y todos se unieron a la diversión. Hicieron saltos, carreras y hasta un pequeño desafío de equilibrio. Lando se mostró competitivo, pero también muy divertido, asegurándose de que todos se sintieran incluidos.
Finalmente, después de un día lleno de risas y diversión, los niños estaban exhaustos. Max y Ella se sentaron en el sofá, con los ojos pesados, mientras Lando y tú los miraban con ternura.
—Hoy fue el mejor día de mi vida. —dijo Max, mientras se acomodaba en el sofá.
—¡Sí! ¡Gracias, Lando! —añadió Ella, sonriendo con los ojos entrecerrados.
—Gracias a ustedes por hacerme sentir como un niño otra vez. —respondió Lando, inclinándose hacia ellos—. ¡Nunca subestimen el poder de los superhéroes y las carreras!
A medida que el sol se ponía y la habitación se llenaba de una suave luz dorada, Lando se sentó junto a ti en el sofá. Ambos miraron a los niños dormir, sintiendo una paz que solo el amor y la conexión podían brindar.
—No sabía que cuidar niños podía ser tan divertido. —dijo Lando, sonriendo—. Me encantó pasar este tiempo contigo y con ellos.
—A mí también me encantó. —respondíste, sintiendo una conexión más fuerte con él—. Tienes un don con los niños.
—Quizás deberíamos hacerlo más a menudo. —sugirió Lando, mirándote a los ojos—. Podría ser una buena forma de pasar tiempo juntos.
—Me encantaría. —sonreíste, sintiendo que el día había sido más que una simple diversión, sino una oportunidad para acercarte a Lando.
Mientras las risas y las aventuras de la tarde llenaban tu mente, supiste que sin importar lo que el futuro traiga, esos momentos compartidos eran solo el comienzo de algo especial.
...
Espero que les haya gustado. :)
-Awadelemon