Epílogo.

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Roier.

Varios meses después, tras organizar una boda y unas merecidas vacaciones en familia. Llegamos a este día.

Mis manos sudaban y no me mantenía quieto en un solo lugar, daba vueltas por toda la habitación mientras Richas balanceaba sus pies y miraba de un lado a otro todo el lugar.

El traje blanco que traía puesto me picaba las axilas y la entrepierna. Digamos que en las últimas semanas gané un poquito de peso, y ya no había el tiempo suficiente para hacerle más arreglos al traje.

Jaiden bufó y me jaló del brazo, sentándome en la cama a un lado de mi hijo y colocando unas flores de color moradas entre la bandana blanca y mi cabello castaño.

-Ro, te tienes que calmar.

-Lo sé, solo que no puedo hacerlo.

Pasamos varios minutos tratando de tranquilizarme, Richas me platicaba sobre su escuela y Jaiden acomodaba mi cabello.

Alguien tocó la puerta, Mariana y Rivers asomaron la cabeza, mire a Jaiden, sabiendo que era hora.

Bajamos las escaleras y nos subimos al auto del más alto, Mariana conducía, Rivers iba de copiloto y mi hijo, Jaiden y yo íbamos atrás. Mariana puso música para desviar mis nervios, funcionó y cuando menos lo esperé, estábamos frente al jardín en donde me casaría.

La ceremonia fue realmente hermosa, lloré un par de veces y Cellbit me consoló en cada una de ellas, Slime nos jugó una mala broma sobre que se oponía, lo insulte algo feo y después de decir que era broma, Mariana lo sentó y susurró algo que no alcancé a escuchar.

El padre recitó sus típicas palabras, dejé de prestar atención cuando paró de hablar, fruncí el ceño viendo a Cellbit, estaba igual de confundido que yo, sentí que alguien tocaba mi hombro, al mismo tiempo, mi novio y yo volteamos.

Allí, detrás de nosotros, dos hermosas mujeres vestidas de un amarillo pálido sostenían entre sus manos cada una un ramo de amarantos, una radiante luz las acompañaba, inspeccioné sus rostro, reconociendo de inmediato a Linda, la mamá de mi Bobby, mis ojos se cristalizaron. La otra hermosa mujer me sonrió amplio, ninguno dijo nada. Linda le sonrió a Cellbit, volteando a verme y asintiendo con la cabeza, lágrimas escurrieron por mis mejillas y una amplia sonrisa se dibujó en mis labios. Carolina, como conocía a la difunta esposa de Cellbit, me regaló una radiante sonrisa, asintiendo también. 

Las dos se tomaron de la mano, viendo a cada uno por última vez, dieron la vuelta y caminaron elegante y delicadamente por el tramo que anteriormente había recorrido, desvaneciéndose en el camino. No entendí que fue lo que paso, pero cuando me voltee hacia Cellbit, me di cuenta de que no hacia falta saberlo, sonreí mas ampliamente.

Nuestros invitados parecían desconcertados, y eso me alegró. Solo lo vivimos Cellbit y yo.

La recepción estuvo llena de risas, lágrimas y lindos momentos que compartimos todos juntos, nuestros amigos, hijos y conocidos cercanos nos felicitaron y desearon buenas cosas todo el tiempo. En un momento, mientras todos bailaban, tomaban o seguían comiendo, me retiré sin que nadie me viera, en recargué en un pared un tanto alejada.

Pensé en todo lo que había ocurrido hasta ahorita, todas las cosas que había vivido en un tramo tan pequeño de tiempo, lo feliz que era solo con Bobby y lo feliz que ahora soy con Cellbit y Richas, todo lo que logré con su ayuda y el cómo avancé en mi mismo.

Me sentía feliz, completo, y lo más importante de todo. Resolví este amor confuso que tuve gracias a las travesuras de los pequeños que son mis hijos, y que sin su ayuda, hoy no estaría aquí, casado.




























4 años después...

—Cellbo...—jadee, apretando la pierna que tenía sobre su cadera.

Se movió lento y perezoso, torturándome y haciendo que me desesperara.

—Te lo mereces, guapito.

—N-no...

Empujó más rápido, me aferré a sus hombros mientras él lo hacia a mi cadera y pierna. Llegamos al clímax juntos, respirando algo acelerado, salió de mi y retiró el condón, me moví hasta apoyar la cabeza en su pecho desnudo, escuchando el rápido latir de su corazón.

—Tengo que ir a despertar a los niños—murmuré, mis párpados se caían, besó mi frente y me apretó contra si.

—¿Y si no van a la escuela?—reí contra su piel, negando con la cabeza, salí de la cama y me cubrí el cuerpo con una bata negra.

—No, ahora ponte la bata y ve al cuarto.

Salí de la habitación rojiza con negro, Cellbit salió detrás mío, palmeo mi trasero y cuando giré la cabeza para regresarle el golpe, me robó un beso y tomó mi mano, deslizando mis anillos en mi dedo.

—Los olvidaste.

No me dio tiempo de decirle nada, se fue muy contento a nuestra habitación a un lado. Me giré para cerrar con llave la sexdungeon, como yo le llamaba. Se salió con la suya al construir esta casa, Vegetta me preguntó para que sería esta habitación en su momento, no tenía la menor idea hasta un día que llegamos juntos del trabajo y los niños seguían en la escuela.

Bajé las escaleras al segundo piso, abrí la puerta de la habitación de nuestros hijos y los desperté lentamente, les pedí que se arreglaran mientras yo subía a hacer lo mismo. Una vez listos los cuatro, bajamos a desayunar y dejamos a los niños en la escuela.

Bobby había entrado en una escuela especial para arte y Richas siguió sus pasos.

Al llegar al restaurante principal, me di la vuelta y le di un beso duradero a mi esposo como despedida.

—Paso por ti al rato.

—Sip, ten un buen día, gatinho.

—Tú también, guapito.

Sonreí y volví a besar sus labios, un golpe en la ventana hizo que nos separáramos, Mariana, Rivers y Missa estaban ahí.

—Consíganse un hotel, hijos de puta.

—Comen enfrente de los pobres, wey.

 Rodee los ojos, abriendo la puerta y sacando mis cosas salí del auto.

—Cállense el hocico, pinches envidiosos.

Cellbit soltó una risita, encendió el auto.

—See you soon, gatinho...

Un chillido salió de Cellbit, reí y comencé a caminar hacia la entrada del restaurante, escuché su grito.

—¡See you soon, guapito!















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AHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH 😭😭😭

se acabó mi gente latino, en serio, estoy muy agradecida con todos ustedes, por su apoyo y por haber leído esta historia. 

En serio, no me caben las palabras para agradecerles todo, los quiero mucho y espero seguir viendo a muchos de ustedes por acá.

tengo muchas ideas todavía y me gustaría compartirlas, me gustaría saber de qué otros ships les gustaría que hiciera algo, si les soy sincera, le traigo unas ganotas al luckity, también por ahí me habían dicho que el fooligetta y creo el teaduo, también me gustaría hacer algo Deathduo, ahí veré que hago primero, pero si me gustaria que me dejaran sus opiniones y posibles tramas que les gustarían.

siendo todo de mi parte, los quiero mucho, mucho a todos y cada uno,  espero que nos volvamos a encontrar, byecitoooooo.

-Incógnita 😭💕

Un amor confuso | Guapoduo. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora