Capítulo 28: Mi Niño.

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Roier.

Alce la cabeza del hombro de Cellbit cuando Bobby jalo mi pantalón, bostece y me incorpore.

-¿Qué paso, chaparro? -subió al sillón y pego su rostro a mi brazo, frunci el ceño, estaba pasando algo-. ¿Bolby?

Un pequeño e inaudible sollozo escapó de sus labios, me preocupe al instante, lo rodee con mis brazos y senté sobre mi regazo, no me importo despertar al cenizo con el jalón de manos.

-¿O que...? -paro su hablar cuando mi pequeño siguió sollozando. Me volteo a ver-. ¿Guapito?

Con un gesto le indique que yo tampoco sabia lo que pasaba. Sobe la espalda de mi niño y recargue mi mejilla sobre su cabeza.

Bobby mantenía su carita escondida en mi pecho, agarraba en un fuerte puño mi camiseta y sus piernitas estaban tensas. Mordí mi labio, no sabía lo que le pasaba a mi hijo y eso me angustiaba, últimamente lo he descuidado mucho y me siento mal, no dejaba de ser un niño de cinco años.

-P-Papá... -mi cara cambió drásticamente a una de angustia, Bobby nunca me llamaba papá a menos de que estuviera pasando algo.

-¿Qué pasa, Bolby? -un nudo en mi garganta me hizo pasar saliva.

-¿Cuándo volveremos a nuestra casa? -su pregunta me desconserto al igual que Cellbit.

-¿Por qué dices eso, Bobby? -la mano del cenizo se apoyo en su espalda delicadamente después de que habló.

-Es... Es solo curiosidad -alzó su vista, sus ojitos observaban a Cellbit atentamente-. No quiero que te enojes conmigo porque vivimos aquí por mucho tiempo.

Una lagrima traicionera resbaló por miejilla, me pecho se apretó y trate de reprimir un sollozo, conocía a mi niñito como para saber lo que le ocurría.

-¿A qué te refieres, pequeño? -las piernas de Cellbit chocaron con las mías cuando se acercó más a nosotros.

Mi pequeño sobrio su nariz y tallo uno de sus ojitos con el dorso de su manita. A lo lejos, pude ver a Richas acercarse dudoso, le sonreí e hice un seña para que lo hiciera. Su papá, igualmente noto su presencia y le indico que subiera a su regazo con unas palmaditas en sus piernas.

Richas se acercó a su mejor amigo y lo abrazo fuertemente, la imagen me destruyó y no pude evitar derramar más lágrimas, Cellbit deposito un beso en el lateral de mi cabeza y le agradecí con una pequeña sonrisa que correspondió.

-¿Ya les dijiste, Bobby? -el rizado se separó de mi niño y este primero así tío freneticamente con la cabeza, para después negar de igual forma, el menor contrario frunció los labios.

-¿Qué nos tienes que decir, campeón? -alente con una pequeña sonrisa a que siguiera hablando. Él pareció dudar pero finalmente habló.

-En la escuela, unos niños me dijeron que yo vivía de arrimado en la casa de Richas -hipo pero siguió hablando-, que yo no tenia nada y su papá -volteo a ver a Cellbit-, por lástima nos dejó vivir aquí, dijo.... Que no nos querías, y que pronto nos sacarías nos sacarías de tu casa, así -subió su manita a su cabello, jalando de este y haciendo como si alguien más lo estuviera haciendo caminar.

Mis lágrimas ya no trataba de ocultarlas, mi cuerpo entero se lleno de enojo e impotencia por no poder hacer algo, estaba tan ocupado con mis propios problemas, que no le tome la atención necesaria a mi hijo.

Últimamente he estado trabajando el doble, los días que voy a la oficina trato de entregar todo lo que avanzo fuera de esta, en las noches, llegando de cualquier lugar, me pongo a trabajar, tuve algunas peleas con Cellbit por esto, ya que lo hacía cuando nos íbamos a acostar, al principio pensé que era porque le molestaba la luz o algo, pero después me explico que se preocupaba por mi, por mi salud y que durmiera correctamente.

Además de todo eso, no le he dado una respuesta concreta al cenizo, trato de pensar en ello pero el tiempo no me da, la cabeza hay días que no la aguanto y no doy para más; he tratado de tomar las cosas con calma pero simplemente no puedo.

El estrés y la preocupación de que se sienta desilusionado me mata, claro que siento lo mismo por él, sin embargo, tengo tantos problemas que ya pospuse demasiado; quede con Vegetta de ver la reconstrucción de mi casa, por lo cual, debo juntar el dinero suficiente, tengo un trabajo que requiere tiempo, Etoiles me esta presionando con lo del restaurante, Jaiden quiere ayudar, pero no la dejo porque ya hizo suficiente, Cellbit se me confesó y a esperado pacientemente una respuesta, y lo más importante; tengo un hijo, un hijo al que descuide y no estuve al pendiente de lo que le pasaba fuera de esta casa.

Mordí fuertemente mi labio al pensar en todas las cosas que tengo que hacer, y es que no podía posponerlas más, llevamos tres meses viviendo con los brasileños y no he hecho nada para arreglar nuestra casa, me siento tan frustrado y un complejo idiota por no hacer nada. Me tomo demaciados descansos y no puedo permitirme descansar más.

-Bobby, escuchame con atención -el tono que Cellbit uso fue firme y claro-. Ni yo ni Richas tenemos ningún problema con que ustedes vivan aquí con nosotros, ¿Verdad Richas? -su pequeño asientio varias veces-. Al contrario, disfrutamos mucho de su compañía, sabes que te quiero mucho, como si fueras mi hijo, y a tu papá es igual, lo quiero mucho y no dejaré que nada les pase -su mirada viajó hasta la mía y no pude evitar perderme en el azul cielo de sus ojos-, a ninguno, los protejere a los tres con todas mis fuerzas.

Bobby lloriqueo más fuerte, ahora lanzandose a los brazos del cenizo, Cellbit los abrazo de vuelta, los niños estaban fuertemente pegados a su pecho. Entrelace nuestras manos junto con los dedos, y recargue mi cabeza en su hombro.

Me sonrió como solo él sabe hacerlo, decidido, dejé un beso algo prolongado en su mejilla qué lo hizo sonreír.

-Yo, yo -Bobby señaló sus mejillas algo sonrojadas debido al llanto, solté una risita y bese repetidas y sonoras veces sus mejillas, mi pequeño río en alto.

-Yo, pai, yo, pai -el cenizo hizo exactamente lo mismo que yo, besando las mejillas de Richarlyson.

-Ahora los dos -Cellbit y yo reímos, comenzamos una guerra de besos en los dos niños, ellos reían escandalosamente, casi como si no hubieran estado llorando hace cinco segundos. Niños.

En un momento, estuvimos a punto de besarnos Cellbit y yo, de no ser porque Richas se hizo para enfrente, de no ser así, verga.


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¿¿¿¿QUIÉN ESTÁ LISTO PARA VER LA VELADA????, YOOO 👺

JAJAJAJAJA, no se crean, pero si ando bien emocionada, ya quiero que se agarren de las greñas >:D

En fin, nuevo capitulo, se van acercando más y más, hoy vimos un poco de Bobby, es un niño muy valiente y que defiende a los que quiere, pero también es sensible y le afecta lo que le digan los demás, ta chiquito todavía, no a descubierto su verdadera personalidad.

Roier no le ha dado una respuesta a Cellbit, pero este a sido paciente, pues es consiente de todo lo que ocurre en la mente de su guapito, aun así, se siente algo intranquilo, ya veremos como es su relación día con día después de que se confesó.

Ya me alegue mucho, pero por último, se vienen capítulos intensos, veremos un poquito de drama y otras cositas qué a lo mejor les interese.

Como siempre, muchas gracias a las pernositas que votan y leen mi historia, de igual forma, muchísimas gracias a lxs que comentan, sus comentarios siempre me hacen muy feliz 🫶

Siendo todo de mi parte, nos vemos muy pronto, bycitooooooo.

-Incógnita 🤫

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