Gods & Monsters ||| Finick Odair

28.

—Señorita Wood— era Plutach en la puerta del cuarto de Maggie.

—No esperaba su visita — dijo ella mirándolo desde su silla.

—Necesitamos que venga a la sala central, hay una conversación pendiente — le dijo para luego irse.

Le pareció extraño que quisieran conversar con ella, no lo habían hecho con los demás. Maggie se puso de pie y caminó hacia allá, era el salón de Coin.

Al llegar un hombre le abrió la puerta, en el salón oscuro solamente estaba Coin y Plutach, estaban sentados juntos. Maggie caminó hacia el asiento que estaba en frente.

—Pensé que solo conversaban con Katniss — le dijo Maggie en frente de ellos—Un gusto.

Ella miro a Coin.

—Es un placer tenerla con nosotros, señorita Wood— le dijo ella con su tono tranquilo de voz.

A Maggie le parecía increíble que una mujer estuviera llevando aquella rebelión, en el Capitolio estaba Snow y ahí Coin. Debía odiar mucho a Snow para haber sacado todo eso adelante, en sus sueños Snow hubiera pensando que la mente de eso podía ser una mujer.

— No entiendo, yo soy un soldado más aquí— le pregunto refiriéndose a porque estaba sentada ahí.

—Precisamente no tan así — le dijo Plutach —Usted y su gente del uno son gente valiosa para nosotros.

—Pero los demás de aquí no creen lo mismo — se cruzó de brazos Maggie —Ellos también creen que somos sus enemigos, que Snow nos envió aquí para espiarlos.

—Pero nosotros no lo creemos — se refirió a ella y Plutach – Creemos que son parte esencial, la única manera de poder seguir los pasos de Snow, ustedes saben cómo piensa.

La única persona que conocía realmente a Snow era su madre, pero estaba segura de que ella iba a apoyar a Snow con su vida, era su mundo y le encantaba. Quizás a su hermano no le encantaba, pero ya era algo de inercia para él.

—Me gustaría que acompañara a la señorita Eveerden en todo esto — le dijo Coin, Maggie no entendía a donde querían llegar con aquello.

Quizás a Katniss ni siquiera le agradaría esa idea, Maggie no sabía que pensaba ella. Venía aquí para ayudar, pero nunca imagino que podría estar en frente de algo.

—No lo se, ella ya tiene a Haymitch y con eso esta bastante bien — cruzó sus manos, Maggie —Además esta es la batalla de Katniss.

—Aunque sea la batalla de Katniss necesitamos que alguien la resguarde, no podrá con esto sola — dijo Plutach—La cuidó perfectamente  en la arena y lo hará de maravilla aquí también.

—Solo aceptaré si ella está de acuerdo.

–Se lo plantearemos — le dijo Coin.

Maggie asintió y se puso de pie para enseguida dirigirse hacia la puerta.

—Señorita Wood—Coin le hablo, Maggie se giró hacia ella—En la entrada de los aviones habrá un paquete para usted, espero que le guste.

Maggie se giró con una expresión de extrañeza ¿que paquete podría interesarle?. Salió del salón y fue hacia la zona de los aviones, al llegar ahí le pregunto a varias personas, pero uno de los soldados solo le dijo que esperara.

Ya había pasado una media hora y Maggie se estaba cansando de esperar, pero finalmente había llegado un avión. Las compuertas se abrieron y por segundos no vio nada, pero luego aparecieron dos figuras.

Eran su hermano y su madre.

Maggie no podía creerlo.

—Maggie — le dijo su hermano mientras baja del avión con una sonrisa.

Ellos habían escapado.

Maggie se dirigió hacia allá y quedó frente a ellos, se observaron por unos segundos para luego abrazar a su hermano, no se habían abrazado en mucho tiempo. Jasper la sujetaba fuertemente en sus brazos, quería mucho a su hermana.

—Estás bien— le susurró ella.

Se superaron y luego se acercó a su madre, las dos también se abrazaron

—Snow ya sospechaba de nosotros, tuvimos que huir — le dijo su madre—Nunca dude de tus ideales, Maggie.

Maggie solamente les sonrió.

—Ahora necesito ir a conversar con Plutach y Coin— dijo mientras ella comenzaba a caminar, sus tacones resonaban por todo el lugar—Mientras tanto no dejes que tu hermano mate a Haymitch.