one shot blue lock

Nagi Seishiro

El nagi mas joven jamás pensó que llegaria a tener pareja, y mucho menos que le dure bastante tiempo.

Pero dicen que con el amor todo es posible.

Eh ahi la razón de por qué su relación contigo duró tanto tiempo.

No es inseguro, pero siempre pensó que te merecias a alguien mejor, alguien que no sea un flojo perezoso adicto a los videojuegos, alguien que sea mas atento contigo.

Una vez trató de decirte eso, que pensaba que no era suficiente para ti... Te enojaste con él por decir esas cosas pero le aseguraste que no habia nadie mejor que él para ti.

Asi que con eso en mente, trata de ser mas atento y cariñoso contigo.

Ya duraron mucho tiempo como para perderte a estas alturas de su relación, asi que aunque no se note el en verdad te ama y no quiere que te vayas de su vida.

Rara vez discutian, normalmente la razón era debido a lo desordenado que puede llegar a ser él.

Contigo no solo aprendió a amar, aprendió a que tenia que poner de su parte si quiere que la relación dure, y que no debeser tan desordenado.

Por que para él fue terrible fuando un dia te enojaste bien feo con él y lo mandaste a dormir al sofá, no pudo pegar el ojo en toda la noche.

Antes podia dormirse donde sea, pero desde que durmió contigo, no hay mejor lugar para dormir que no sea en tus piernas, pecho, en tus brazos, o simplemente a tu lado.

Asi que en la madrugada ya cansado, regresó a su habitación compartida completamente arrepentido te pidió perdón.

-puedo dormir contigo? -preguntó con cara de perrito regañado.

-ven aqui -le hiciste un lugar y no lo dudó, a los cinco minutos ya dormia profundamente en tus brazos, lección aprendida, no volver a pelear contigo.

Por eso eres tan importante para él, por eso te ama, por que eres su motivación para seguir en el futbol.

-despierta, sei -te escuchó canturear su nombre.

Que hermoso suena, asi menos ganas de despertar tiene.

-mhm, cinco minutos más- murmuró apretando el abrazo en el que te tenia atrapada.

Tan cálido y suave, tan cómodo junto a ti.

Sintió tu pecho agitarse por la pequeña risa que soltaste, inconcientemente sonrió al sentir que volvias a acariciar sus blancos cabellos.

-sei, amor, ya es hora de levantarse -insististe.

-estoy cansado, volví hace dos dias -se quejó, tratando de convencerte de permanecer ahi más tiempo.

Era cierto, recien habia regresado de su viaje a Inglaterra por un partido de futbol.

-dos dias, y yo debo de trabajar -trataste de soltarte de él.

-no... No vas -hizo un puchero, enterrando su cabeza entre tus pechos.

-sei... Trabajo desde casa -reiste- me quedaré contigo, pero debo levantarme

-mhm

-si dejas que me levante ahora, podré terminar temprano -dijiste acariciando sus cabellos.

-y dedicaras tu tiempo en mi? -preguntó.

No suele ser muy enzimoso, pero hay dias en los que pareze un koala por que no te quiere soltar.

Hoy es uno de esos dias.

Estuvo lejos de ti por semanas, esperaba que al regresar pudieran quedarse acostados y abrazados todo el dia.

Y seria posible si no tuvieran ciertas nesecidades, como alimentarse, o trabajar.