cap30: noruega

593 16 0
                                    

nos alojamos en una cabaña chiquita en medio de un bosque repleto de nieve con Fran.


se me congelan los huevos Chiara_ se queja tomando la chocolatada caliente que le prepare junto a la chimenea.

no es para tanto mi amor_ lo abrazo para que sienta más calor.

Ya habían pasado dos semanas despues de que gano f2. 
Ambos mirábamos el fuego, sin hablar, solo disfrutar de nuestra mera presencia.

Pipi_ me llama lo cual hace que lo mire de inmediato. 

si amor, que pasa?_ pregunto.

cómo hiciste para superar lo de tu abuelo? _ aunque me extraño la pregunta supuse que era con el fin de conocernos.

supongo que no lo supere_ respondo casi con obviedad_ lo sigo extrañando con mi vida.

cómo fue eso?


bueno, viste que te dije que estuve cuatro meses con el?

si.


un día, un lunes recuerdo. Venía ya muy mal por unos dos meses por ahí. Y yo estaba todo el tiempo con él. Excepto a la noche que era cuando lo cuidaban mis tías o mi papá. _ explico.

resulta que ese lunes yo me voy a las nueve de la mañana a ver cómo estaba ya que en la madrugada me dijeron que estaba muy mal, solo esperaban la hora.
Mi tía que lo cuido en la noche se fue viste y entonces me quedé yo y mi papá hablaba con mi abuela en el comedor._ Franco me miraba atento mientras tomaba su chocolate.

el abuelo ya no me reconocía hace semanas pero de vez en cuando tenía momentos de lucidez y hablábamos como antes. Cuando sucedía eso mis esperanzas de que se sane aumentaban, pero, después venían las recaídas viste.

por qué no te reconocía?_ me pregunta Fran.

porque el cáncer se le fue al hígado, no podía comer nada. Creo que lo único que podía tomar es la leche fortificada viste.
Y al ser que no podía comer bien y tener todos los nutrientes el oxígeno no llegaba del todo a su cerebro haciendo que este no trabaje muy bien y no pueda unir las cosas. O sea, el me miraba y capaz me reconocía pero no podía decir que yo era su nieta Chiara.
No sabes lo deprimente que era para mí tener que ir a verlo y que el me diga:

¿quien sos?

totalmente destructivo.


que feo_ en la cara de Fran se podía distinguir tristeza sincera.

si, entre a la pieza de los abuelos y estaba el acostado con su pijama, lo habían terminado de bañar y tenía olor a bebé_ sonrió ante el recuerdo, era la primera vez que lo hacía _

en cuanto me ve me dice "hola Chiara" con una sonrisa, con lo que le quedaba de fuerzas. Me dije a mi misma que mientras haya una sonrisa habría un motivo para seguir viviendo, quería aplazar el momento de la despedida viste.

entonces el me pide que le cante, fui a buscar la guitarra y le cante las canciones que cantabamos juntos, el lagrimeaba y trataba de no mirarme, yo creo que sabía que el iba a morir, por eso no quería mirarme para que no me de cuenta de ello supongo, pero yo ya sabía que no quedaba nada.
Por eso escribí esa canción. La que al principio dice.





no hace falta que me quites
la mirada,
para que entienda,
que ya no queda nada...


_canto_


cuando dejo la guitarra lo tomo de la mano y me pregunta si yo era feliz, no era muy feliz que digamos, con lo de mi pierna, él y Evan. Pero jamás le hubiera dicho lo contrario.
Luego hablamos de política, y después fui a buscar un poco de agua. La abuela me dijo que seguramente quería escuchar mi voz por última vez cuando le conté que estaba lucido. Obvio yo le respondí que no diga eso.

cuando entro a la pieza de vuelta el abuelo ya había cambiado, no me contestaba, sus ojos se le entrecerraban, me miraba como una desconocida, pero, una desconocida en la cual podía confiar..._ yo miraba como el fuego ardía mientras mis ojos transmitían el dolor de mi alma.

yo solo lo miraba y pensaba que quizás la abuela tenía razón, el se estaba despidiendo. Por cuatro meses le pedí a Dios que lo sane, luego, cuando lo veía llorar del dolor, no tener fuerzas para tragar y dormir todo el día. Le pedí que por favor lo llevará con él porque no soportaba que el sufra. De todos modos, se tardó dos meses. Dos meses que sufrió._ está vez hablaba con enojo.

entonces le pedí por última vez a Dios. Le dije.

si es posible, sanalo. Pero si no, llévalo por favor. El ya sufrió mucho de chiquito, no hagas que siga sufriendo mi abuelito...

el abuelo me miró, me sonrió, suspiro, y se fue. Así, en cuanto termine mi oración.

miro a Franco y este estaba sorprendido.

en serio? _ asiento ante su pregunta.

este me abraza por los hombros y tengo la libertad de poder llorar libremente.

Chiara, sea como fuere. Haya sufrido mucho o poco. Tu abuelo debe ser la persona más feliz y orgullosa de lo que se convirtió la nieta que crio. Sos una persona maravillosa, sos hermosa física y mentalmente y muy talentosa. El está muy orgulloso seguramente_ habla mientras tiene sus manos en mi cara secando las lágrimas que recorrían mis cachetes.

vos decís?

si..._ deja un tierno beso en mi frente.

ahora tengo un único consuelo, que lo pude ver cuando vos volviste a mi vida_ lo miro sonriente.

yo?? en serio? cuál? _ pregunta Fran también con una sonrisa.



que yo disfrute tanto tanto tanto cada momento junto a él, y goce tanto tanto tanto su presencia en mi vida. Que ahora que se fue duele un poquito menos cada que lo recuerdo porque se que después de todo sigue acá_ señalo mi corazón.

y sigue conmigo en forma sentimental, mandándome amor por todas partes. A través de vos_ lo señalo a él_

Franco, yo creo que fuiste un regalo del abuelo, y creo que es el mejor regalo que me pudo dar...


Chiara, te amo_ Fran me besa.





te amo para siempre, Franco Colapinto +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora