Gojo Satoru y la Pirata de Goma

Capitulo 40

Unos momentos antes.

En el Thousand Sunny, los Piratas Infinitos observaban en silencio la violenta colisión de energías, a sabiendas de que, en el centro de ese torbellino de destrucción, su capitán, Satoru D. Gojo, se enfrentaba a Esdeath.

A pesar de la gran distancia, podían ver el impacto de sus poderes, sintiendo la intensidad de cada estallido como si estuvieran en la misma línea de fuego.

Conis, que se encontraba junto a ellos, retrocedió un par de pasos, asombrada y aterrada por la magnitud de la batalla. Su rostro reflejaba el miedo y el respeto por aquellos dos seres, cuyas habilidades iban más allá de cualquier cosa que hubiera visto en Skypiea.

Pagaya: -Murmura con miedo, su voz apenas audible- Espero que no destruyan toda Skypiea...

Mientras tanto, Luffy permanecía en silencio, con una mirada seria y decidida. A su lado, Zoro y Natsu, ambos de pie junto a Luffy, mantenían sus ojos enfocados en el horizonte donde estallaban la batalla.

Bonney: -Murmura, con una mezcla de admiración y preocupación- Es una locura...

Zoro: -Tono firme- Esa mujer es una bestia, pocos son capaces de siquiera plantarle cara a Gojo.

Nami tragó saliva mientras el viento azotaba su cabello.

Nami: -Voz baja- Cada vez que pelea siempre se las arregla para causar este tipo de caos... eso demuestra lo formidable que es aquella chica.

Chopper, por otro lado, mantenía la compostura como podía; tenía preocupación, pero se obligaba a no apartar la vista, a pesar del miedo.

Chopper: -Susurrando, con una mezcla de inquietud y determinación- Vamos, Gojo... sabemos que puedes hacerlo.

A su lado, Vivi permanecía en silencio, observando la zona de batalla con una expresión tranquila pero profunda. Ella sentía la misma preocupación, pero confiaba en que Gojo lograría vencer.

Robin, sin embargo, se mantenía con una expresión pensativa. Notaba un detalle que la inquietaba.

Robin: -Recordando la vez que Gojo enfrentó a Sukuna- (La intensidad de la batalla entre ellos dos fue mucho más abrumadora que esto, tanto que Arabasta parecía incapaz de contenerlos a ambos. Sin embargo, esta vez, aunque el caos es considerable, no se siente igual) -Inquieta, mientras su mirada se afilaba, tratando de captar algún detalle en medio de la destrucción en el horizonte. (¿Por qué no se siente tan fuerte esta vez?... Solo se me ocurre una cosa... uno de los dos estaba dominando claramente al otro).

Sin darse cuenta, su tensión se reflejó en sus ojos. Vivi, que estaba a su lado, le colocó una mano en el hombro y le sonrió suavemente.

Vivi: -Con voz suave- Él estará bien, Robin... lo sé.

Robin la miró en silencio, y tras unos segundos, esbozó una pequeña sonrisa y asintió con la cabeza, dejando ir un poco de la tensión en sus hombros.

En ese momento, un estallido más grande que los anteriores sacudió el campo de batalla. Una onda de energía envolvió la zona, expandiéndose en el cielo con un resplandor azul y negro, mientras rayos rojos y negros se entrelazaban en el aire como serpientes eléctricas.

Los ojos de los Piratas Infinitos se abrieron con asombro, sin poder contener el impacto de lo que estaban viendo. Fragmentos del suelo salieron despedidos en todas direcciones, y el eco de la explosión resonó como el rugido de un trueno.

Nami: -Con la respiración entrecortada- Eso... fue más intenso que antes...

Una nueva onda de choque sacudió el suelo bajo sus pies, y el cielo sobre ellos comenzó a oscurecerse, como si el día mismo estuviera siendo tragado por el conflicto entre esos dos.