Capitulo 42

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Todos estaban en la orilla que los separaba del Thousand Sunny que estaba encima del altar de sacrificios. A excepción de Gojo y Luffy que estaban en la proa del barco donde Luffy aún abrazaba la cabeza del Sunny.

Gojo: -Con una sonrisa despreocupada- Luffy, ve con los demás debo hacer algo.

Luffy: -Asiente, con una sonrisa- Bien, ¿pero qué harás?

Gojo: -Con una sonrisa divertida- Ya verás.

Luffy deja de abrazar al Sunny y estira sus brazos a una rama de un árbol que se encontraba en la orilla, llegando con los demás.

Todos estarían viendo a Gojo que se había quedado sólo en el Sunny.

Gojo empezó a elevarse en el aire mientras observaba al Sunny con una leve sonrisa. Al estar a unos metros de distancia este extendió su mano apuntando con la palma al Sunny.

Nami: -Confundida- ¿Qué está haciendo?

Vivi: -Sin entender- Ya lo veremos.

Natsu: -Emocionado- Conociendo a Gojo hará algo increíble.

Bonney: -Con una sonrisa juguetona- Solo espero que no destruya el Sunny -Observaba como Gojo apuntaba al Sunny con la palma de su mano-

De repente, el Sunny fue cubierto por una energía azul y empezó a elevarse al cielo despegándose del Altar de Sacrificios. Con un movimiento fluido de sus dedos, dirigió al Sunny hacia el mar de nubes y lo colocó con delicadeza.

Luffy: –Saltando de emoción– ¡Gojo, eso fue asombroso!

Robin: –Con un tono analítico y un leve interés en sus ojos– Es fascinante cómo puede manipular el espacio a su alrededor.

Nami: –Suspirando aliviada, pero aún con una pizca de nerviosismo– Al menos lo hizo sin causar un desastre.

Vivi: –Sonriendo suavemente– Es impresionante, pero también aterrador pensar en lo que podría hacer con ese poder si lo usara de otra forma.

Zoro: –Con los brazos cruzados y una leve sonrisa– Cada vez me convenzo más de que no hay nada que esté fuera de su alcance.

Chopper: –Con los ojos brillando de emoción– ¡Es como magia, pero mejor!

Bonney: –Riéndose divertida– ¿Magia? Esto es simplemente Gojo siendo Gojo, rompiendo las reglas de la realidad como si fueran de papel.

Natsu: –Con una sonrisa divertida– No entiendo nada, pero sí que fue épico.

Gan Fall: –Con un tono sorprendido– En todos mis años, jamás he presenciado algo semejante.

Pagaya: –Con los ojos fijos en el Sunny– Es como si pudiera manipular el espacio mismo. Nunca imaginé ver algo así.

Conis: –Con una mezcla de asombro y gratitud– Increible... cuanto poder -Pensativa- Pero no se compara a lo que vimos antes cuando estuvo luchando.

Pagaya: -Con nerviosismo- Totalmente, por un momento pensé que todo acabaría para Skypia.

Gan Fall los observó con incredulidad sin poder entender.

Con el Thousand Sunny ya en el mar de nubes, Gojo descendió con calma, disipando la energía azul que había envuelto su mano mientras la tripulación lo observaba desde la orilla. Una vez en tierra, adoptó una expresión seria, algo poco común en él.

Gojo: –Con tono firme– Bien, es hora de dividirnos en dos grupos. Uno guiará el Sunny a la salida de Skypiea, y el otro buscará la ciudad de oro.

La tripulación permaneció atenta.

Gojo Satoru y la Pirata de GomaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora