Amor Imposible

Capítulo 5 Inauguración

Quedé con Elaia para seleccionar los vestidos que íbamos a lucir hoy en la noche . Ya la señora de la boutique estaba en la casa , me empezó a mostrar diferentes vestidos que tenía . Justo en ese momento entró Elaia y me sonrío a modo de saludo , cerrando la puerta .

— Lo siento por llegar tarde el tráfico de Caracas , no ayuda en estos tiempos. — me dijo con la respiración cansada.

Empezamos a probarnos los vestidos que habían traído , pero ninguno me gustaba como me quedaba . Vi uno Rojo que era perfecto para la ocasión , Elaia puso sus ojos en mi vestido .

— Ese vestido , te quedaría muy bien . — Exclamó Elaia.

La vendedora nos interrumpió y nos dice que ese es un vestido exclusivo, que ni siquiera estaba en venta pero que por ser yo, si me gustaba podría tenerlo.

— Anda , ¡pruébatelo!

Me animó Elaia . Me puse el vestido con mucho cuidado para no dañarlo o romperlo . Finalmente cuando ya lo tenía puesto no podía dejar de mirarme en el espejo . Al salir con el vestido puesto Elaia y la vendedora pusieron los ojos de sorpresa , el vestido estaba hecho para mi, me quedaba a la medida .

— Nadie se lo había puesto cuando lo terminé , pero a usted le queda a la medida.

La señora no se equivocaba , el vestido me quedaba a la medida . La tela era de color rojo carmesí, tenía lentejuelas , largo hasta el suelo , con volantes, los hombros quedaban descubierto dando un toque sexy, el cuello era drapeado y una gran abertura hasta el muslo.

— Me encanta — Exclame.

— Te queda hermoso —Añadió Elaia.

Me quedé parada unos segundos más, admirando mi vestido. Me tomé un momento para contemplarlo en detalle, disfrutando de cómo caía sobre mi cuerpo. Al voltear, vi a Elaia probándose su vestido. Ella notó mi mirada y con una mezcla de expectación y nerviosismo, me preguntó:

—¿Qué te parece? ¿Crees que este vestido me queda bien?

Cuando volteó , se había puesto un vestido vino tinto con negro ,abertura de cola de pez , con tirantes finos , escote en V , encaje de contraste , espalda cruzada y malla . Inmediatamente sin pensarlo le dije que le quedaba genial .

Elegimos los vestidos y a los pocos minutos llegó la maquilladora junto con el estilista para terminar de completar nuestro look para nuestra gran noche .

Se acercaba la hora de irnos y finalmente coincidimos todos en el comedor. Al verme los ojos de mi papá se iluminaron y no tardó en decirme lo bella que me veía. Se acercó para darme un suave beso en la frente, lleno de ternura. Sonreí y con un brillo en los ojos, le respondí:

—Tú también estás muy elegante, papá. Te ves muy guapo.

— ¿Señor Benjamín y no va a decir nada de mi vestido ? — Exclamó Elaia.

— ¡Ups! es verdad Elaia , estás muy hermosa esta noche — contestó —, las dos están radiantes.

Elaia y yo nos reímos . Nos sorprendimos gratamente al ver bajar a mi mamá con su cabello cuidadosamente arreglado y su vestido negro pegado al cuerpo . Se acercó a nosotras y nos dijo que estábamos muy hermosas . Al rato llegó la limosina que nos iba a llevar al restaurant.

Llegamos rápido ya que no había tanto tráfico . Cuando llegué vi inmediatamente las luces que alumbraban el restaurante, casi del tamaño de un edificio, en la entrada había una decoración de muchas plantas , unas puertas doradas con negro que hacía llamar mucho la atención . Entramos y todo era más lindo adentro que afuera .