Amor Imposible

Capítulo 11 Dejando el pasado Atras

Domingo por la mañana. El  sartén chisporroteaba, llenando la pequeña cocina de un aroma tentador a cebolla caramelizada. Mientras removía con maestría, repasada mentalmente mi presentación de la publicidad de el señor Jeremías para la noche . Mi jefe me pidió que fuera a la oficina hoy en la noche porque quería tener una reunión privada y intima .

Nuestro profesor entró a la cocina para probar los platillos que habíamos hecho . Coloque un plato en el mesón y con mucho cuidado puse el filete de carne , lo bañé con la salsa de hongos y vino tinto   y de último las cebollas  caramelizadas .

El profesor se acercó a mi plato , agarró los cubiertos y empezó a cortar  la carne con el cuchillo , se metió a la boca un pedazo e inmediatamente puso una cara de satisfacción y gusto .

— Te felicito Ruiz este platillo está exquisito , la carne suave y jugosa, el sabor del vino en los champiñones le da un toque cítrico ,  las cebollas dulces y exquisitas . Felicidades.

Todos aplaudieron al mismo tiempo . Me encanta cocinar y sabía que lo hacía muy bien . Terminamos nuestras clase , yo recogí mis cosas y me quité mi uniforme.

— Nuestra empresa cuenta con muchos trabajadores, para que tengas tu publicidad a tiempo — Dice mi jefe esa día ese mismo día en la noche. 

— Vine a Venezuela por pocos días y quiero llevar la publicidad a Miami...  estoy interesado  en contratar temporalmente algunos de los empleados a mi empresa en Miami . — Dijo el cliente Jeremías.

— Si por su puesto,  podría enviar algunos de mi personales a su empresa .

— Está bien, trato hecho.

Me alegre escuchar que el señor Jeremías aceptara la propuesta . Firmó los papeles , nos dimos las manos y salió de la oficina. Recogí mis cosas y salí por la puerta de la oficina . Me detuve en seco porque mi jefe me llamó .

— Alec antes que te marches... quiero felicitarte por tu gran trabajo, estoy muy orgulloso de ti .

— Muchas gracias , hago lo posible para que nuestra empresa siga  creciendo . — dije mientras me acomodaba la corbata.

Me despedí de mi jefe y bajé al estacionamiento. Saque la llaves del carro y vi a Cloe bajándose de su auto deportivo .

— Alec , que sorpresa encontrarte — dijo sonriendo levemente .

— Cloe... ¿ Qué haces por aquí ? — pregunté sorprendido .

— Vine hablar con mi Jefe... — suspiró — Voy a renunciar a la empresa Alec .

— ¿ Renuncias  ? . ¿ Así de repente ? . — Pregunté atónico.

— Si , me voy al extranjero  . Necesito un cambio.

Hice una pausa tensa . Mientras buscaba las palabras adecuadas .

—Wow . No sé qué decir . Me sorprende mucho .

— Lo sé . Iba a ir a tu casa a decírtelo en persona... pero ya que estás aquí .

Asentí , todavía procesando la información .

— Bueno , fue lindo verte . Espero que tengas una vida feliz y que consigas a la persona que si te haga feliz ya que... yo no pude hacerlo . Lo siento .

— No te tienes que disculpar . Ya quedó todo en el pasado . Te agradezco mucho todo lo que vivimos juntos . Aprendí mucho de ti.

— Yo también aprendí mucho de ti Alec .

Se hizo una pausa incómoda , pero llena de nostalgia.

— Bueno , tengo que irme . Mi vuelo sale mañana temprano.

— Claro . Te deseo lo mejor en esta nueva etapa .

Nos dimos un abrazo fuerte . Cloe se alejó con una sonrisa triste .

— Cuídate mucho.

Me pasé la mano por el cabello y me subí al vehículo .

<<¿ Por qué me siento así ? . Se supone que debería estar feliz por ella . >> Me dije a mí mismo .

Enciendo el motor y comienzo a conducir.

<< Supongo que es normal sentir algo así . Después de todo , pasamos muchos momentos juntos . >> dije mirando por la ventanilla.

Me detengo en un semáforo rojo . Y miro mis manos en el volante .

A veces , la vida nos enseña a soltar aquello que , por más que queramos , ya no nos hace bien. Y aunque duela es necesario para seguir.

Y eso fue lo que hice , sabía que Cloe me estaba haciendo mucho daño y tome la decisión de dejarla ir . Me lleve las manos a mi rostro para limpiarme las lágrimas .  El semáforo se puso en verde y acelere , dejando el pasado atrás.