sesenta y uno

505 148 51
                                    

Regresamos a México. Ambos habíamos planeado nuestro vuelo juntos, era cierto que no volveríamos a vivir juntos y que dejaríamos de llevar una vida como casados. Pero empezaríamos a llevar una relación de novios, eso era para mejorar

—¿Quieres que te lleve a tu casa?.— preguntó mientras salíamos del aeropuerto

—Es extraño que digas que es solo mi casa.— reí —Pero nos tenemos que acostumbrar.—

Asintió dándome la razón. Quizás podríamos sentirnos extraños durante algún tiempo, pero todo mejoraría

—Vamos, me gustaría que fueras a ver a Mushu.— ofrecí, él me miró —Nuestro bebé está deprimido.—

—Ahora que nos vamos a divorciar, creo que sería bueno tener la custodia compartida.— dijo y reí —No es broma.—

Había dejado en el estacionamiento del aeropuerto mi auto. Fuimos, subimos nuestras maletas y él se subió en el puesto del conductor

—Bueno, ¿qué te parece si te quedas a Mushu durante los fines de semana?.— dije mientras subía en el lugar del copiloto

—¿Solo dos días?.— alzó una ceja

—Es más mi hijo que tuyo.— discutí —Es justo.—

—No es justo, por tu culpa no llevaremos un proceso pacífico.— bromeó

Arrancó y nos fuimos. Mientras íbamos a mi casa puse un poco de música, teníamos una playlist juntos así que la reproduje

—Hay algo que no hemos pensado.— exclamó con la vista en el camino —¿Cómo diremos que nos divorciamos, pero que seguimos juntos? Nos verán como pendejos.—

—Creo que si es por nuestro bien, no me importa lo que digan los demás.— solté un suspiro —La gente ya intuye que nos estamos separando, no demos explicaciones y ya está.—

—Se darán cuenta cuando nos vean juntos en eventos o cuando vean nuestras interacciones.— siguió —Yo no pienso ocultar que estamos juntos.—

—Entonces solo nos queda soportar.— reí un poco

La gente no entendería la decisión que habíamos tomado y era mejor así. Yo amaba a Roier, pero necesitaba conocerlo de nuevo, necesitaba darme cuenta de que éramos muy jóvenes para el matrimonio

—¿Al menos vamos a decirle a nuestros amigos?.— cuestionó

—Los chismes vuelan rápido entre todos ellos, pero prefiero no decirlo por ahora.— indiqué

—¿Por qué?.— preguntó ahora

Tenía miedo de arruinarlo. Sentía que si nuestra relación se divulgaba podría ser perjudicial para nosotros. Aún seguíamos en un "periodo crítico" así que quería que los demás supieran que estábamos juntos cuando tuviéramos algo más sólido

—Yo sé que acabas de decir que no piensas ocultar que estamos juntos, pero hazlo durante un tiempo.— pedí —Necesitamos estabilidad y solo la tendremos si nos enfocamos solo en nosotros.—

Me miró se reojo y se mantuvo en silencio durante algunos minutos

—Por el bien del lore lo haré.— se resignó —Una relación secreta me parece emocionante.—

Reí. Después de tanto tiempo volví a sentir una conexión con él, sabía que lo quería, pero ahora también lo volvía a entender.

El resto del camino lo pasamos hablando sobre cuando solicitaríamos la anulación del matrimonio, era la primera vez que podíamos hablar sobre el divorcio sin que doliera.

Cuando llegamos a casa me ayudó a bajar mis maletas. Entramos a casa y nuevamente una ola de melancolía me invadió, hace bastante no estábamos juntos en lo que había sido nuestro hogar

—¿Quieres que vaya por Mushu?.— preguntó

Ya era costumbre que lo dejáramos con su madre, pero esta vez había contratado a alguien que lo cuidara

—Ya le mandé mensaje a quien lo cuidó, en cualquier momento lo traerán.— conté

—Pensé que lo habías dejado con mi mamá.— dijo y rio algo nervioso —Me apendejé.—

—Está bien, igual sentía que pedirle que lo cuidara sería incómodo.— confesé

Nos quedamos en silencio durante algunos segundos

—¿Tienes hambre?.— pregunté —Podemos cocinar algo juntos, como en los viejos tiempos.—

—Las únicas veces que cocinábamos juntos era para hacer competencias para ver quien lo hacía mejor.— recordó riendo —Y yo siempre ganaba.—

—Presumido.— bufé —Entonces ya no te invito a cocinar nada.—

Me alejé caminando hasta la cocina, pero de inmediato él me siguió. Reí por su constante manera de querer llamar mi atención

—Hagamos otra competencia.— pidió y negué

—No porque siempre pierdo.— fui honesta, él me miró burlón

—Por favor, es algo que es divertido hacer juntos.— suplicó

Suspiré, aunque diera mi mayor esfuerzo, ya tendría todo perdido

—Depende, ¿qué quieres si me ganas?.— cuestioné para saber si debía acceder

—Que me acompañes a un lugar.— dijo y lo miré intrigada —Es algo que ya estuve planeando, te pondrá feliz.—

—Dame una pista para ver si me conviene.— pedí mientras me cruzaba de brazos

—Lo sabrás cuando pierdas.— rio y lo miré fijamente —Solo diré que los reencuentros son lindos.—

La palabra "reencuentros" hizo eco en mi cabeza, ¿a qué se refería con eso?. Había logrado provocarme curiosidad así que sin pensarlo mucho decidí acceder a su desafío

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: 2 days ago ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

𝐃𝐈𝐄𝐍𝐓𝐄 𝐃𝐄 𝐋𝐄𝐎𝐍 [Roier X Tú] (FDC #2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora