Royals [YuuMika]

Capítulo 40 - 1

Yuu jamás se pensó pasar un día sin probar bocado de nada en absoluto. Pero el día sucedió a las dos semanas de cortar comunicación con Mika.

Después del incidente de la biblioteca y la pelea que tuvieron pensó que cualquier pelea se solucionaría después de unos días, pero Mikaela solo lo ignoraba, le mandó cartas que claramente fueron ignoradas, intentó abrir un portal a voz como la última vez, un portal físico... nada funcionaba. El rubio simplemente no quería saber nada de él. Supuso que fingir que todo estaba bien y salir hasta en la sopa en cualquier medio de Sanguinem haría que Mika le dé señales de vida. Pero no sería suficiente, no está vez.

No supo la gravedad de su metida de pata hasta que la única persona en el universo que siempre estaba de su lado lo regañó.

— ¡¿Qué carajos está pasando por tu cabeza?! Dime de quien aprendiste a decir todas esas estupideces porque yo jamás te enseñé eso —Shinya traía el ceño fruncido y Yuu se encogía en la silla de su sala de astronomía—.

— Solo actúas así porque son los Tepes y nadie nunca les ha dicho las cosas en sus caras —.

Shinya se sobo las sienes y se sentó junto a Yuu.

— Es cierto que nadie les ha cuestionado nunca a los Tepes su forma de gobernar. Tú tampoco eres nadie para cuestionar a Mikaela por sus decisiones como Rey, tú nunca has tomado una decisión importante para este reino —El azabache abrió la boca para protestar y los ojos azules del consejero de su padre se blanquearon— No Yuu, decretar feriado tu cumpleaños y hacer una ley de protección para artistas no cuentan como decisiones importantes. Estamos hablando de un criminal que intentó no solo matar a Mikaela si no matarte a ti—.

— Lo sé, pero de igual forma estamos actuando igual que él al matarlo... podríamos negociar quizá-

— Si negociábamos le estaríamos diciendo a todos que existe oportunidad de perdón ante un intento de homicidio a la familia real, y si existe un perdón entonces lo harán otra vez , y la próxima vez, Yuuichiro, no van a fallar —Yuu solo se quedó en silencio—.

Lo que odiaba de Shinya es que siempre tenía razón, su padre lo escogió como su consejero no por ser guapo... posiblemente. Más que cualquier cosa, fue porque este hombre es sensato, astuto y bastante decidido. Tenía razón respecto a eso.

— Quizá...

— No. Sabes que no hay salida y que es la mejor solución.

— Mika y yo discutimos —Yuu suspiró y se abrazó a sus piernas, Shinya apretó los labios al ver esa acción— no sé, solo estaba muy enfadado porque me ocultó todo esa información... y fingió un problema para distraerme de cuando fue su ejecución.

— Mikaela siempre se opuso a que nos reunamos sin ti —Yuu levantó la mirada y ahora sí, tenía una expresión de sorpresa— Dice que tienes un gran corazón y aún si eres blando, fuiste un involucrado en el caso, así que deberías participar —.

— Y tantas veces que estuvimos a solas jamás me lo dijo —.

— Le pedí que no lo haga —Shinya suspiró— También le pedí que te lleve a un lugar apartado, todo eso porque sé que eres un chico sentimental, y este hombre sacaría provecho de eso. Yuu, necesito que conozcas la verdad de las cosas... no me importa si Guren me odia —.

Yuu frunció el ceño.

— ¿Qué mierda tiene que ver eso con que Mikaela sea desquiciado? —.

— Eso no piensas cuando te lo estás besuqueando —Yuu enrojeció tanto que ni si quiera pudo parpadear— ¿Qué, te piensas que soy igual que el inepto de tu padre? Por favor cariño —Rió suavemente y suspiró— Te quiero como a un hijo Yuu, desde que me entere que vendrías a este mundo estaba tan emocionado de verte... me prometí a mi mismo que te cuidaría de lo que sea. Jamás esperé encontrarme con algo de este estilo. Necesito que prestes atención a lo que te voy a decir ¿De acuerdo? —.