DESTINY || Yeongyu

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El día esperado llegó, Beomgyu había preparado todo lo necesario para YeonJun pues después de su cirugía tendría que permanecer unos días en el hospital bajo revisión, todo iba a estar excelente y tenia que demostrarle a YeonJun que todo estaba bien pues este no se miraba muy bien.

—Cariño, debemos irnos.—Avisó yendo hasta su amado quien se mantenía frente a la puerta de su hogar apretando sus manos en la maleta que había preparado Beomgyu para él.

—Beomgyu...—Llamó al menor quien se abrazó a él al estar a su lado—. ¿Y si no funciona?

—Funcionará.—Aseguró el menor dejando un beso en su hombro—. Y si no lo hace, que lo dudo mucho, lo volveremos a intentar. ¿Bien?

YeonJun sonrió un poco y asintió dejando un pequeño beso en el cabello del menor suspirando su dulce aroma a chocolates con menta, y sonrió por lo tierno que este era, emocionado, asustado por lo que se avecinaba.

Creyó que los días pasarían lentos, pero no fue el caso y ahora estaba ahí, en camino a su operación para lograr ver el mundo como todos los demás, no le desagradaba la idea pero a su vez le asustaba. Desde que nació fue así, no vio absolutamente nada, y le habían hecho creer que nunca podría hacerlo, se había adaptado a un mundo diferente, tratando de aceptar su destino, sin creer ni tener esperanza, fue así hasta que llegó su amado omega, Beomgyu, quien se encontraba en ese momento a su lado.

—Todo estará bien—. Murmuró su amado haciéndole sonreír.

YeonJun asintió y lo atrajo dejando una de sus manos en su abultado vientre dejando suaves caricias buscando confort en ellos.

—Si, todo estará bien.

— ☆ —

Beomgyu veía como alistaban a su amado para que entrara a su cirugía, sonreía sintiendo como sus ojos lagrimeaban por la emoción que sentía por el gran paso que estaban dando en ese momento, caminó hasta él en el momento que las enfermeras le permitieron acercarse a él y tomó con calma una de sus manos para que acariciara su rostro, YeonJun acunó la mejilla del menor contra la palma de su mano y dejó un pequeño beso en los labios de su amado quien suspiró abrazándose a él.

—Deséame suerte, pequeño.—Susurró YeonJun pasando sus dedos por el suave rostro del menor, delineando cada una de sus preciosas facciones.

—Mucha suerte, mi vida, todo saldrá perfecto.—Beomgyu dejó pequeños besos en los labios del mayor suspirando su aroma.

—Tomé esta decisión no solo para ver todo nuestro alrededor— Habló con calma el mayor delineando los labios del menor bajo sus dedos apretando estos con una tierna sonrisa.— También quiero ver nuestra boda... conocer a nuestro cachorro, deseo poder verte, lo desee en el momento que me enamoré de ti, tener la oportunidad ahora mismo es una bendición para mi. Ahora me daré cuenta si eres feo o no. —Bromeó con una suave risa sintiendo como el menor le daba un pequeño golpe en el hombro.

—Tonto, soy más bonito de lo que te imaginas.—Beomgyu lo abrazo con más fuerza sintiendo como su pequeño vientre se interponía entre ambos y rió un poco por ello sintiendo como sus ojos lagrimeaban aún más.— Te amo, YeonJun, como no tienes idea.

—Te amo mucho más, Beomgyu.—Susurró YeonJun dejando más besos en sus labios.

—Disculpen... ya es hora de que me lleve al joven Choi—. Avisó uno de los enfermeros dándole una gentil sonrisa a Beomgyu quien asintió dando un último beso en los labios del mayor alejándose de él.

—Cuídate—. Dijo Beomgyu mirando como se llevaban a su amado con calma.

Suspiró limpiando las lágrimas que habían escapado, acarició su vientre caminando hacia la salida del hospital, tenía que encontrarse con Karina, necesitaba respuestas.

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—MOKKA