✵.｡.✰☪Moon's Heir: The dark side in pain.☪⋆ ✯. [Min YoonGi]

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Por todo ese tiempo, Ahry estuvo algo apartada de YoonGi, dejándolo cerrar ese capítulo a su ritmo. Estaba actualmente en su casa, conversando con su padre precisamente sobre la muerte del gobernante, cuando una de las criadas del gran palacio se presenta ante ella.

—Señorita Lee, el Rey solicita verla. Venga conmigo.

Ahry se apresura en seguir a la joven, quien no sería mucho más adulta que ella, hasta ser conducida con el rubio. Él está de pie, solo, y su expresión facial no parece ser la mejor todavía, a pesar del tiempo pasado. Ya ha aceptado la muerte de su padre, pero su extraña quietud es inusual. Cuando la criada se marcha, Ahry se acerca a él. —¿Me llamabas, mi Rey?

Él la mira con una seriedad que asusta, se ve todavía triste y cansado, pero hace su mejor esfuerzo para manejar todo lo que tiene en mente sin dejarla saber de sus más recientes decisiones. —Sí...¿Me acompañarías a caminar en el jardín?

—Sí, por supuesto.

Normalmente ellos dos no pueden caminar libremente por el jardín, pero como todavía están en periodo de luto, nadie está autorizado a vagar por esas áreas de recreo sin la autorización previa del rey, por lo que es de suponer que no habrá nadie merodeando. Ahry sigue al pálido a través del jardín, sin querer preguntarle nada, debido a que quiere escuchar primero lo que él quiere contarle sin que ella pregunte.

Después de caminar por alrededor de un minuto, YoonGi se detiene frente a ella, sigue serio, pero una vez más, se toma su tiempo para apreciar cada pequeño detalle de ella. Sus ojos semialmendrados color café, su nariz un poco respingada y labios rojizos perfectos, también que no lleva maquillaje, y que su cabello está peinado hacia atrás, en una coleta baja, al igual que el resto de las mujeres dentro del palacio, pero no trenzado, ya que según ella, ese tipo de peinado le daña el pelo. Ese rostro...quiere memorizarlo, quiere tenerlo tatuado en su cerebro por toda la vida.

—¿Hay...algo mal? —No quería, pero termina por hablarle primero, mirando a sus ojos. —¿Por qué me querías ver?

Teniendo en cuenta lo que está planeando, no sabe qué decirle. Mientras más la mira, más esfuerzo tiene que poner para pensar en qué responderle, qué es lo mejor para decirle, o si siquiera debe comentarle algo. —Yo solo...quería verte.

En medio de toda la tristeza alrededor, eso, por algún motivo, le había sacado una sonrisa, e incluso sonrojo en su rostro. —Oh, bueno, ya me estás viendo, mi Rey. —Lo mira con detenimiento. —¿Puedo marcharme, entonces?

Él termina por sonreír ante el tono bromista de ella, pero luego vuelve a ser neutral. —No, quiero que te quedes conmigo por unos minutos.

—Está bien, como desees, 내 왕님. —Dice ella, reverenciando un poco.

Ahora es él quien siente mariposas en su pecho, cuando se da cuenta de lo inusualmente sexy que se escucha "내 왕님" en los labios de Ahry. —¿Hmm?¿Acaso me estoy volviendo loco, o lo estás diciendo diferente?

Ella se sonroja un poco más. —N-No...por supuesto que no. Es como siempre, 내 왕님 —Repite. —¿Ves?

Él niega mientras se ríe, definitivamente es un arma poderosa esa frase. Desearía estar en otra circunstancia, tener más tiempo para hacer un buen uso de ella. —¿Puedes escucharme por un segundo? —Con la total atención de la castaña, se aclara la garganta para hablarle. —Yo solo...bueno, quería decirte que estoy agradecido por tenerte todo este tiempo a mi lado, y...y también porque no dudes en venir a verme tan rápido...

Ahry entiende que es difícil para él expresar sus sentimientos, mucho más ahora, así que le sostiene las manos, llevándose una sorpresa con el acto. —¡Oh, están heladas! —Exclama por la temperatura de sus manos, y seguidamente deposita un pequeño beso en ellas, tratando de calentarlas. —Solo estoy haciendo lo que te prometí siendo una niña. Lo hice cuando me volví tu guardia, y...lo hice de nuevo cuando empezamos nuestra relación. Tú únicamente necesitas llamarme, y yo correré hacia ti, mi Rey, siempre.