***continúa Ith***
Tenía todo el día para alistarme,despues de darme una deliciosa tina, decidí arreglar mi cabello. Lo sequé y lo planché. Acaba de caer en cuenta de lo largo que era. Me puse unas cuantas mascarillas en la piel para tenerla muy hermosa. Resiví un mensaje de Mario a las 6:00pm que decia que iríamos primero a cenar. Ya cercano a las 7:45pm me fui a dar una corta ducha para terminar de quitarme las mascarillas.
Estaba indecisa entre ponerme un outfit o otro. Algo me decía que me pusiera mi primera obción. Me puse mi shirt de Nirvana acompañado de una falda bastante corta color crema casi blanca, con unos tacones finos negros un poco altos y joyas en color oro. En el maquillaje quise ponerme básicamente algo bastante sencillo. Quise resaltar más que nada mis labios, debo reconocer que es uno de mis mayores atributos. Los delinié primero con el mismo color que los pintaría. Un rojo intenso pero al mismo tiempo opaco ocupaba espacio en mis labios. Eran las 7:55pm y me miré por última vez en el espejo del pasillo de mi depa. Mario me esperaba afuera justo a tiempo frente a la puerta principal. Me percaté que Villalobos estaba recostado en el auto.
Abrí enseguida la puerta a su primer llamado. Me llevé una linda sorpresa. Mario llevaba mi misma shirt obviamente de hombre. Sonreimos al mismo tiempo.
- hola princesa que hermosa te vez!- dijo mirandome de pies a cabeza. Sonreí más a su comentario
- hola bebé tu igual te vez muy guapo.
Ya saliendo de mi casa y cerrando la puerta. Mario me tomó de la cintura y me atrajo hacia el dejandome sin habla y besandome apacionadamente. Nos despegamos gracias a Villalobos quien intentaba llamar nuestra atención.
- hola hola, estóy aquí!
Los dos reímos, y procedí a saludar a Villalobos con un beso en la mejilla. Ya en el auto nos sentamos en este orden Villaobos conduciendo ya que recientemente pudo sacar su licencia de conducir, Mario me dejó de copiloto y el atras.
- oye Mario, no que saldriamos solos, solitos, sin compañia?-pregunté
- si y haci sera solo que Villalobos decidió llevarnos para dar una vuelta luego.
- y como regresaremos?
- podemos regresar con Sebas, Rk y sus chicas. Decidieron ir pero todos estaremos a parte. Si?
- me parece muy bien!
Llegamos a un restaurant que estaba muy cercano al cine que visitariamos. Era un pequeño mall de restauranes y cine. Villalobos se retiró y nosotros fuimos al restaurant. Despues de una cena algo romántica Mario pagó la cuenta y fuimos al cine. Pedimos ver una pelicula de terror, era la idea que me diera mucho miedo y terminara en brazos de Mario. No soltó mi mano en toda la película, yo me dediqué a practicamente no ver la pelicula y estar escondiendome entre los esculpidos brazos de Mario inalando su delicioso olor a hombre muy refrescante por cierto. Al salir de la película salimos tomados de mano nuevamente y nos encontramos con Sebas, Rk y supongo que sus chicas.
- hola!- saludé a todos con un beso en la mejilla como de costumbre
- hola Ith, te precento... Ithalia, Andrea... Andrea, Ithalia- habló Sebas precentandome a su chica. Era muy bonita, trigueña de ojos obscuros y pelo ondulado largo negro.
- hola mucho gusto- dijimos al unisono saludandonos
- y ella es Paola... Pao ella es Ithalia la novia de Mario- dijo Rk precentandome con su respectiva chica quien tsmbién era muy bonita a diferencia de Andrea ella era de tez blanca ojos muy grandes color verdes y rubia.
- bueno oficialmente todavía no soy su novia pero pues si soy Ithalia... me pueden decir Ith.
Ellas rieron supongo que entendieron lo que quice decir. Mario me miro algo serio.
- oiga ahora le digo yo... dejame sorprenderte
Yo solo reí y recosté mi cabeza de su hombro. Me estaba comenzando a dar frío y se me avía olvidado traer una chaqueta. Me abrazé de Mario quien entendió mi abrazo y enseguida me comenzó a calentar. Estabamos todos platicando muy a gusto pero me antojé de ir al baño. Y fui, cuando salí del baño me dirigía hacia donde estaban todos. Un señor con un aspecto muy conocido pude divisar en mi camino. Era el maldito de Kenneth. El ninse avía perccatado de mi precencia. Me comenzó a dar mucho miedo. Tanto que le grité a Mario porque casi estaba inmovil.
- MARIO- Grité a lo que el enseguida voltió y respondió
- Ithalia- corrio a donde mi.- que pasa mi vida.- en eso llegaron los demas chicos
- esta aquí- dije dejando ver unas lagrimas salir.
Mario buscó con la mirada pero no lo encontro.
- no esta aqui mi amor
- yo lo vi estaba...- mire a donde estaba y avía desaparecido- ahi y ya desaparecio.
Mario me abrazo muy fuerte.
- ya, ya paso...tranquila yo estoy aquí con tigo, para protegerte.- besó mi frente.
Mario le pidió a Sebas que nos fueramos y nos fuimos todos en el auto de Sebas. Me estaba llevando muy bien con las chicas. Primero Sebas fue a dejar a las chicas en casa de Andrea. Eso fue una larga despedida entre Sebas y Andre y Rk y Paola. Mario y yo nos quedamos dentro del auto observandolos. Ya estaba más tranquila porque Mario me estubo mimando en el camino. Pero mis pensamientos fueron interrumpidos por Mario.
- princesa no sabes nada de Gabriela?
- claro hablo casi a diario con ella porque?
- veo a Sebastián muy triste y se que quiere tener ya una novia porque nos ve a nosotros feliceses y supongo que quiere tener su chica
- y que con Gabi
- a el le sigue gustando mucho, no hay forma de que se pongan en contacto?
- claro, ella no me deja en paz preguntandome por el. Le daré su número.
Mario me sonrió y me dió un tierno beso en el cabello. Me voltié para mirarlo Ya más animada.
- porqué no me lo das en los labios
- en donde quieras te los doy- comenzamos en una tierna guerra de cortos besitos. Hasta que Rk golpió el ventanal del auto que estaba más cerca de mi.
Nos exaltamos y comenzamos a reirnos. Le pedí a Mario que se quedara de nuevo con migo a lo que el accedió pero me dijo que quería buscar su pijama a lo que también accedí.
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Eras todo lo que quería
Dla nastolatkówAveces salir de tu rutina diaria por tres semanas es bueno. Aunque aveces las cosas no salen como esperabas. Como mi caso, jamas pense que tomar estas vacaciones me hicieran tanto efecto. Unas simples vacaciones convertidas en todo lo que quería par...