La Secretaria De Sebastián

capítulo 19

3 meses despues

Tengo hambre-pense.

¿pero como me salgo del trabajo?

Odio estar embarazada, Chacha no le deja que comer a Manuela, por eso me cae bien ¡pero que estoy pensando!

Me pongo de pie y camino a la cocina, se que a Sebastián no le gusta que tome cafe pero... tengo hambre.

Tome el cafe discretamente, La puerta se habre y... mierda Sebastián, Tome el cafe con desesperación y el me ve.

—Laura no, eso le hace mal a los huesos de mi pelotero– me grita.

—Tengo hambre– llore.

—Siempre tienes hambre.

—¿A sí?

—Si

—Dormiras solo esta noche.

—No me importa, estas gorda y ocupas espacio– yo abro la boca y paso mi mano a donde esta mi corazón fingiendo estar ofendida, el coje mi cafe y se lo toma... Uyy maldito.

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Hoy salí tarde de trabajar, Y el maldito de Sebastián me dejo así que salí a la calle a tomar el taxi que el pagara.

Todo aquí a fuera esta oscuro y tenebroso, Estaba en la parada donde ya no había nadie, en esto un hombre se me acerca.

—Dame todo lo que tengas– me ordena, Yo rio a carcajadas.

—¿Esta es la parte donde muero del miedo y te lo tengo que dar todo o me mataras?– rio otra vez

—¡Es en serio, dame todo lo que tengas ahora!– me grita.

—Por favor, no es que traiga dinero, Soy bien pobre, oye me caes bien negrito– le digo.

—No me digas negrit... ¿laura?

—¿Negrito?

—Eres la chava de Sebastián, soy Michael, su mejor amigo, oye, eres mas gorda.

—Estoy embarazada.

—¿De mi bro?

—No, de Sebastián– el me mira incrédulo — ¿no me vas a robar?

—No, solo robo a desconocidas.

—Esta bien.

—¿Te llevo a tu casa?

—¿Tienes auto?

—No, pero puedo robarlo

—Mejor tomar un taxi.

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Llegue a casa de Sebastián junto con Michael, toque la puerta ya que el nunca me dio una llave y esta la habré sofia.

—¿Sofía?

—Laura, entra.

—¿Que haces aquí?

—Vine a ver como estabas, Además dentro de ti estan mis dos bailarinas.

—Hola muñeca soy Michael– besa su mano.

—Un gusto Michael, Sofía– le guiña un ojo.

En eso aparece Sebastián con palomitas en la mano.

—¿Michael?, no te esperaba.

—Bueno es que mientras robaba a laura la conocí y quise...

—¿Robaste a laura? – se molesta un poco Sebastián.

—Traqui viejo la chica ya dijo que es bien pobre.

—Además de que te molesta si haz sido TU que me dejaste botada en el trabajo.

—Se me olvido.

—Bueno ya, a ver la película– dice Sofía.

—¿Que película? – pregunté.

—¿Te gusta vivir?

Estabamos a mitad de película, Yo veía a Sebastián de reojo pero el no se daba cuenta, Al terminar la película Sofía me mira.

—¿Te has asustado?– me pregunta

—No, para nada– le respondo.

—¿Segura?

—Si, un loco con máscara en la ventana gritando ¿te gusta vivir? No da miedo, y si me disculpas tengo hambre y sueño, adios– me pongo de pie paso primero por la cocina y sigo hasta el cuarto de abajo, porque no dormire con Sebastián.

Me di una ducha, me puse mi pijama y me acosté, Escuche un ruido en la ventana.

—Que...– digo y no responden así que duermo pero al rato vuelve el ruido — ¡que!– me volteo y no hay nada.

Que mierda.

Me doy la vuelta otra vez, pero el ruido sigue y me pongo de pie.

—¿¡Te gusta vivir!?– grita un hombre con cara Blanca.

—¡AHHHH!– grito y por la puerta entra Michael y Sofía, Fue lo último que vi.

—¿Laura?

Desperte, estaba recostada en una camilla y una mujer me sonrió.

—Que bueno que despierta, su esposó no deja de preguntar por su pelotero– ruedo los ojos y le digo que lo deje pasar.

—Mi pelotero, ¿esta bien?– entró cómo un loco.

—Si, estoy bien, gracias– le digo sarcástica.

—Bueno, vamos a ver a los bebes– me comenta la enfermera.

Hace el mismo procedimiento que la otra vez.

—¿Mis niños de grandes ligas estan bien?– pregunta Sebastián.

—Digame, almenos que chacha sigue viva– le suplicó, La enfermera rie.

—Tiene el sueño de toda madre

—¿Cual?– el sueño de toda madre, no yo

—Tener mellizos.

—Eso lo se– respondí obvia

—Pero son una niña y un niño, felicidades.

Escucho un ruido y veo a Sebastián pegarse contra la pared varías veces.

—Porque una niña, porque– se repetia.

Un niño... Manuela...

—¿Esa agua de haya es venenosa?– le pregunto a la enfermera.

—¿Si, porque?

—¿Me la presta?

En multimedia Michael.

"Patricia"