Prof. Sara-... Ahora quiero pedirles que por favor, cada uno se ponga de pie y se presente, iniciando por los nuevos compañeros que terminemos en el salón, provenientes de la tanda vespertina.
Uuufff, esa es una de las partes más típicas del primer día de clases pero nostras tomamos ese tiempo para platicar sobre tonterías porque nos dio flojera escuchar tanto bla bla bla...
Hola soy Luisa... Hola soy Anette... Hola soy Gonzalo... Hola soy Manuel... Hola soy Fernando... Hola soy Alicia....
Oiamos nombres y nombres de personas y personas que se presentaban mientras nosotras nos mensajeábamos y cuchicheábamos sobre el juego de apertura del año, los uniformes... De pronto escuché una voz masculina que me hizo salir de mi conversación.
-Profesora, ¿será que este grupito de allá puede prestar atención? Están ignorando a toda la clase mientras hablan de chicos y sabrá Dios cuantas tonterías más.
Uuuhzzz pude haber estado sumergida en el más profundo sueño pero tengo un radar que se activa cuando hay señales de tensión.
-Eh! Disculpa, ¿nos hablaste a nosotras?
Estaba viendo a un tipo alto, de pelo oscuro y ondulado, con un cuerpo atlético y bien formado, justo como me lo recetó el doctor pero era un tonto, lo que tenía de guapo le sobraba en egocentrismo. Quería captar la atención de todos, dándoselas de la última Coca Cola del desierto y con hielo. No hay nada que me fastidie más que la gente engreída y prepotente.
-Eh! Disculpa, ¿nos hablaste a nosotras?
Estaba viendo a un tipo alto, de pelo oscuro y ondulado, con un cuerpo atlético y bien formado, justo como me lo recetó el doctor pero era un tonto, lo que tenía de guapo le sobraba en egocentrismo. Quería captar la atención de todos, dándoselas de la última Coca Cola del desierto y con hielo. No hay nada que me fastidie más que la gente engreída y prepotente.
-Estoy pidiendo un poco de atención-continuó diciendo-ya que me estoy presentando y veo que ustedes están en algo más.
¿Whats? ¿Y quién se ha creído este por Dios? Mínimo el príncipe de Inglaterra.
-Sí, estás en lo correcto, platicábamos de algo importante, realmente importante-dije algo molesta.
-Oooh! ¿Insinúas que esto no lo es?
-Te lo dije claro o, ¿tengo que dibujártelo?-contesté mientras Alexa estaba sentada detrás de mí y pasaba su mano por mi hombro pidiendo que me calmara porque me conoce, sabe cómo me pongo cuando me sacan de mis casillas. Ella es la más tranquila de las tres, la que siempre le hala los frenos a estas yegüitas salvajes.
Prof. Sara: Eeeh! No boicoteen mi clase! ¿Podrían calmarse? Gracias! Por favor señoritas, el joven tiene razón, presten atención.
-Gracias maestra- contestó el sangroncito ese en forma burlona-Bien, como iba diciendo, soy Maximiliano Almonte pero todos me llaman Max. Como comentó la maestra, vengo de la tanda vespertina, muchos ya me conocen y espero que podamos pasar un buen año juntos.
Luego del pesado ese, se presentaron dos chicos más que al parecer, son amigos de él, de ese tonto engreído que se cree la gran fruta fina. Lo digo porque después, cuando me tocó presentarme escuché burlas casi en silencio y por debajo de las sillas chocaron sus manos en señal de complicidad pero lo ignore porque precisamente estaban buscando provocarme y yo no quiero más problemas de los que ya tengo con las profe Sara.
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La van a pagar playboys
Novela JuvenilOdio las injusticias, la gente que utiliza los sentimientos ajenos para su beneficio y luego abandona como quien arroja a la basura un vaso desechable luego de tomarse el jugo que ha comprado. Creen que las mujeres somos el sexo débil pero están equ...