La van a pagar playboys

Beso equivocado

¿Beso? ¿Cómo que beso? De que habla el? Pasaron mil cosas por mi cabeza, yo no sabia como reaccionar. —Bueno, esta es una oportunidad para hacer de las mías—me dije a mi misma.

—Aaah con que quieres un beso. 

—Así mismo es—contestó sin vacilar

—Bueno, yo te daré uno pero tengo que prepararme para ello. No ando por la vida regalando besos al por mayor y detalle.

—Jaajaja como quieras hermosa, yo se esperar.

Si el quería un beso, pues claro que lo tendría, sin duda alguna. 

— Permite ir al tocador. En seguida vuelvo.

—Claro guapa. Te esperaré aquí. 

Camine despacio y me percate de que una chica que estaba a unos pocos metros de nosotros esta mira y mira a Max. Me dirigí directamente a ella. Era alta, con unos ojos enormes, dientes chuecos y algo alocada según la percibí. Yo acepto a todos como son, no me fijo en esas cosas pero ella era exactamente opuesta al prototipo  de mujeres que atraían a Max. Para mi travesurilla era perfecta.

—Hola! Me llamo Leira—mentí—Ese chico de allá es mi hermano Max. El me pidió que viniera hasta aquí para hablar contigo. El es un poco tímido, no es de mucho hablar pero me comento que esta loco por darte un beso. Por fa , no le vayas a decir que yo te lo conté—agregué mientras ella se ruborizaba al escucharme. Eso solo me dejaba claro que ella no dudaría en aceptar el fulano beso—Me pidió que te dijera que va a estar en la casa del terror esperándote. Yo lo voy a llevar para que se junten.

—Bue-bue-bueno, está bien—contestó muerta de los nervios. Por un momento, me sentí mal de engañarla con algo así pero ella se moría por besarlo y Max quería también, solo que no de ella así que sería una hermosa travesurilla que la chica disfrutaría y Max detestaría.

Me regrese de volada en busca de Max. Lo encontré sentado justo donde me dijo.

—Wow! Fuiste y rápido.

—Si, solo necesitaba escoger un buen lugar para besarte porque me da pena.

—¿Pena? ¿A qué o por qué?

—Es que nunca te he besado y me lo pediste así tan de repente que me pone algo nerviosa—conteste con la mía por dentro. Loca por hacer lo mio.—Decidí que sera en la casa del terror ya que aunque me asusto mucho, es mas privada y solitaria ya que muchos le temen.

—Mmm esta bien—contesto extrañado—Vamos.

Caminamos juntos y vi que la chica aun no entrar. Lo tome de la mano mientras le hacia señal por detrás a ella para que supiera que ya iba a entrar con el. Lo pare en una zona donde todo era pura oscuridad, nada se veía mas que el ligero.

—Aquí esta bien—le dije a Max—pero no quiero que me toques, déjame hacerlo solo a mi.

—Esta bien. 

Hice otra seña a la chica quien se acercó tranquilamente y lo tomo para besarlo. Parecía que lo iba a devorar. Salí corriendo, los deje en eso. Pobre Max. Moriría al saber lo que le hice. Moría de risa fuera de la casa pero a la vez me sentía un poco mal porque no es bueno que a uno lo engañen pero luego recordaba que Max se merecía eso y mas.