Capítulo 41: Enamorado

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Narra Niall:

- ¡Vamos hermano! Tienes que levantarte. - Insiste Greg.

- No me levantare, no lo haré. - Digo escondiéndome de nuevo entre las sábanas.

Recibo otro almohadazo.

- Si no te levanta, la próxima vez será agua. - Advierte.

- Trae toda el agua del mar si quieres. No me levantare. - Digo sonando muy seguro.

- ¡Vamos Niall! Te perdono que faltes uno o dos días al colegio, pero ¿tres? Es inaceptable. - Refuta Greg.

- No podría soportar un rechazo más de ella, sólo no. - Digo.

- ¡Dios! Esto me recuerda tanto cuando en Mulligar no querías ir al colegio por...

- Ni la menciones. - Advierto saliendo de mi "capullo".

Ella es de lo último que me quiero acordar.

- No me refería a Olivia, me refería a... ya sabes,... lo otro.

¡Oh!

- Bueno, no importa. - No es bueno recordarlo ahora.

Se sienta a mi lado.

- Sé que es difícil, pero recuerdas lo que dijimos.

Sí.

- Debemos hablar cuando tengamos dificultades. - Lo recuerdo bien.

- Entonces, aplícalo. - Demanda Greg.

Sin pensarlo dos veces, me pongo de pie y voy hacia mi colección de muñecos de Disney. Tomo entre mis manos a Minnie, para posteriormente tomar asiento de nuevo al lado de mi hermano.

- Melissa Brown, eso me pasa. - Digo tratando de no llorar.

- Ya sé eso hermano, pero nunca nos explicaste el por qué. - Me informa.

Contemplo a Minnie.

- Pues llegue tarde al baile. Ella no quiso escuchar mis razones y de repente dijo que todo lo que sentía era un sueño, que no era real... Yo aun así le dije 'te amo', pero ella no me creyó. Iba a pedirle que sea mi novia esa noche, pero no paso. - Le conté.

Esa noche, esta iba a hacer mi pregunta: ¿Quieres ser mi novia?

Noto que algunas lágrimas recorren mis mejillas.

- He intentado todo este tiempo buscarla y ella sólo no quiere verme. - Y eso me parte en dos.

- Nunca pensé que volvería a confiar en una mujer, pero ella sólo apareció y... lo cambio todo.

Puede sonar cliché, pero así lo siento.

- Cuando voy a dormir, hay tantos recuerdos que me atacan, como si quisieran que la vaya a buscar a medianoche.

Y sería capaz.

- Como esa vez que fuimos al parque...

"- ¡Ya para Niall, juro que vomitare! - Gritaba divertida, mientras dábamos vueltas sin control.

- Pero es divertido. - Digo girando aún más rápido aferrándome a sus manos.

Su cabello acariciaba el aire, mientras yo tomaba sus manos con mucha fuerza.

- En serio Niall, ya basta. - Y así la deje.

Rápidamente cayó al gras y yo la seguí.

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