07 de febrero, 1914
Sin destino
Hoy es de esos días donde quiero mandarlos a todos a la mierda.
La genuina y única, Briana Jungwirth, se encargó de decirle a toda mi familia y amigos cercanos que éramos pareja.
Todo paso en la cena de anoche, donde mi madre reunió a sus amigas. Por obvias razones, la madre de Briana respaldo su rumor y todos lo creyeron.— Creí que Briana no te agradaba hijo, es decir, esa muchacha nunca me ha agradado se puede sentir que es mala sangre, no es de fiar cuídate de ella.
— Yo no salgo con ella. Ni tengo nada que ver, ni siquiera sé por qué sigue llegando a esta casa sí ni tu soportas a las Jungwirth.
La expresión que mi madre tuvo en ese momento, es algo que aun tengo en mi cabeza. Fue de esas miradas que haces cuando alguien te dice que estás haciendo algo mal y estas consiente de eso. Pero, no explicas por qué soportas toda esa maldad.
Es como si hay algo más allá de esta familia que no conozco, y jamás he aceptado que me oculten las cosas. Es el mayor símbolo de deslealtad y traición.
Hay un misterio que rodea a esas mujeres y al parecer involucra a mi madre, necesito averiguar qué es.
Por otro lado, Zayn vino a mostrarme otro de sus bocetos. Era un ave, un azulejo para ser exactos, se posó en la ventana del gran salón mientras él limpiaba las ventanas.
Tenía un talento único para los detalles realistas. Aquel azulejo parecía tan real que podrías imaginar que saldría volando del papel. Los colores estaban muy bien difuminados.
Mi viejo amigo había avanzado mucho con las lecciones de arte que tomábamos juntos. Malik siempre dudaba de sus habilidades y temía fallar pero, sin chistar se arriesgo y ahora es todo un artista promedio.
El gran salón tenía algo mágico que podía hacer que cosas buenas sucedieran. Zayn se dio cuenta de su talento para dibujar cuando era niño. Pasaba todos sus días observando por esas grandes ventanas mientras su madre limpiaba; mi piano estaba en esa habitación y aprendí mi primera pieza musical en ese salón.
Estoy escribiendo desde el gran salón. Recargando el cuerpo sobre un viejo piano negro e imaginando cómo sería el príncipe de Austria. Tengo dudas y pienso aclararlas, estoy decidido a escribirle hasta obtener respuestas.
Este cuarto me da tranquilidad. Escribir es una meditación y el azulejo de Zayn colgado en la pared del gran salón me demuestra que arriesgar es ganar, aun cuando este todo perdido.
L.W. Tomlinson
Bonus letter
*borradores*"Estimado H.S. De Austria"
"Para H.S."
"Buen día príncipe de Austria"
"Querid..."¡Debo estar loco si empiezo así!
Sin destino era mejor...¡lo tengo!
"Misterioso H.S."
Así esta mejor..
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The Royal letters || L.S.
Fanfiction"A veces el destino puede hacer que llegues a una persona equivocada, que con el tiempo se convierta en la indicada y no quieras soltarla jamás" - Louis William Tomlinson, príncipe de Cambridge y futuro heredero al trono. (Actualizaciones Lentas)