Capitulo 23.

4.3K 208 15
                                    


Kate se tardaba demasiado y me encontraba de los nervios. ¿Que haría si estuviera embarazada? La apoyaría claro que si. pero....¿Que haría Ryan al respecto? ¿Que harían sus padres? Ellos eran muy religiosos y ya les costaba digerir que su hija fuera "rebelde" que casi ni le hablaban imagínate lo que harían ahora.

A ella la considero mi mejor amiga. Siempre había estado a mi lado desde que me mude y me apoyo cuando pasaron los incidentes con Blake. Aunque le había ocultado cosas pero era por no darle más disgustos. No queria meterla en mis problemas y ahora si estuviera embarazada aún menos.

La puerta del baño se abre al fin y sale Kate pálida con el test en la mano.

–¿Que ha salido?–Pregunto con la voz temblorosa.

–No lo se, aún tengo que esperar unos minutos.

–Tranquila.–Le digo mientras voy hacia ella y le doy un abrazo.–No importa lo que salga, todo va estar bien.

Ella se limpia las lagrimas de los ojos y mira el test. Se queda mirándolo fijamente. Sus ojos están abiertos como platos para después sentarse en la cama sin decir nada.

–¿Kate? ¿Que salió?

Los nervios me estaban matando hasta el punto de querer tirar de mi cabello.

–Lo...estoy.–Dice con un hilo de voz.–Voy a ser mama Bo.

¡Dios mío! Me tapo la boca con las manos y me siento a su lado cogiendo su mano temblorosa.

La veo reírse mientras llora. Su estado me confunde y no se si debo felicitarla o no.

–¿Se lo vas a decir a Ryan?

Se queda callada unos segundos y suspira.

–Si pero todavía no, necesito un poco de tiempo para asimilarlo.–Contesta con un tono de voz decaído.–
–¿Que voy a hacer bo? Mis padres me matarán.

–Kate, saldrás adelante. Yo voy a ayudarte en todo lo que pueda.–Ella intenta sonreír pero se queda en una mueca.

–Voy a marcharme, necesito estar sola con un bote de helado de chocolate.

–¿Seguro? ¿Estarás bien sola?

Me preocupaba y no quería que se fuera de mi casa. No me agrada la idea de que estuviese sola en este momento. Pero entendía que quisiese su soledad para pensar con claridad.

–Si, estaré bien. No te preocupes Bo. Te llamaré más tarde ¿si?–Me intenta convencer levantándose de la cama.– Gracias por todo. Sabes que te quiero ¿no?–Asiento con la cabeza y las lágrimas pican en mis ojos pero me las trago.

Nos damos un abrazo más y la veo marcharse.

Me vuelvo a quedar sola con un nudo en el estomago. Todavía no podría creer que Kate estuviera embarazada.
Tampoco podía sacarme de la cabeza aquel sueño horrible. Se sentía tan real como si estuviera muriendo. Como si Blake fuera capaz de hacerme daño. No dejo de darle vueltas a todo. De recordar lo de anoche, a él apuntando con la pistola aquel chico. Pero todo era borroso, muy borroso y no podía recordarlo bien que sucedido después. ¿Quien era Blake en realidad? Me estaba entrando otra vez dolor de cabeza.

Oigo como un ruido en el balcón de mi habitación. El corazón me va a mil. Es él.

Le veo entrar como si fuese un experto en colarse en casas ajenas vestido todo de negro con una capucha sobre su cabeza.

-Hola.–Me dice mientras se queda quieto mirándome con miedo de mi reacción.

-Hola.–Le devuelvo el saludo con la voz algo quebrada.

Las últimas horas habían sido suficientes fuertes como para hacer que todo se derrumbase en mi interior. Lo había estado conteniendo todo dentro. Y verlo ahora solo había hecho que todo se agritase.

Dejo las lágrimas salir mientras él me observa y no me importa que lo haga porque la mayoría es todo por su culpa.

No dice nada mientras se acerca a mi y se sienta al borde de mi cama. Me rodea con su brazo y me atrae a su pecho.

–Esta bien Bo, suéltalo todo.– Su tono de voz es bajo y dulce.

No puedo evitar enterrar mi cara en su pecho y seguir llorando a pesar de que se que estoy siendo patética. Pero el que me provoca dolor es el único que me consuela.

BlakeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora