23: Realidad extraña

8.2K 331 8
                                    

Jeremy Zucker & Chelsea Cutler - you were good to me

Capítulo veintitrés : Realidad extraña

Kelly.

Cuando Tyler salió, algo en mí hizo click, lloré, no por Tyler, si no por Alex, obviamente  que aún me afectaba, que algo me hacía sentir mal todavía y era que aunque quisiera estar desilusionada con él, sólo estaba herida, ese amor que había sentido unos meses atrás seguía ahí, sólo que estaba pausado, cuando papá llegó le hablaron sobre un esfuerzo físico, le dieron unas vitaminas que debía tomar y me dieron de alta, al llegar a casa no hablé, no emití ningún sonido que pudiera llevar a entablar una conversación con mi padre o con Heymi, sólo subí a mi cuarto y tome mi teléfono.

¿Puedes venir a mi casa? Quiero hablar contigo.

No pasó mucho cuando mi puerta estaba siendo tocada, al abrir ahí estaba, sus ojos me veían curiosos, en su cuello estaba el collar que le había regalado hace mucho tiempo, me sonrió y cuando lo hizo, una lágrima bajo por mi mejilla, él había sido la persona que me había ayudado a salir de aquel agujero en el que me había metido años atrás, quería gritarle, pero solo le sonreí, justo como lo hice el día  que lo conocí, lo abracé, porque fue lo único que me estabilizó en ese momento, su aroma a  colonia masculina me llevo de nuevo a meses atrás.

"-¿Quieres ser mi novia?"

"Eres terrible montando caballo"

"Tus ojos hoy están más claros, princesa"

-Pasa- Alex paso dudoso pero no dudo un momento en explorar con la vista mi habitación.

Me senté en la cama mirándolo detenidamente, río, señaló el hueco en mi techo gracias a un día estar saltando en la cama,  donde se golpeó la cabeza  muy fuerte, yo asentí riendo, aún no lo cubrimos, cuando dejó de explorar todo el lugar se sentó a mi lado en la cama.

-¿Cuando?- mi voz apenas sonó como un hilo.

-¿Cuando que?-  preguntó confundido.

- Cuando te desenamoraste- le expliqué y lo vi suspirar.

-No lo hice, sólo fui estúpido- dijo y yo reí.

-¿Recuerdas cuando golpee a esa chica por ti?- pregunté riendo.

-Como olvidarlo, casi fue el mejor día de mi vida- no se porque pero comencé a llorar mucho, era imposible detener las lágrimas.

- Te sigo amando, pero eso no significa que vaya a volver contigo- le avisé.

- Lo sé, lo merezco- dice y pasa su brazo por mi hombro.

-Pero antes de ser mi novio fuiste mi amigo-  le sonreí a medias.

》Pasamos muchas cosas juntos.

- Si, éramos como Bonie y Clyde- reí recordando todo.

-¿Por qué no somos amigos?- pregunté y el me sonrió.

-Podemos serlo si tu quieres- me dijo.

¿Lo amaba? Si, pero él había sido mi amigo por mucho  tiempo, aún siendo novios se comportaba como mi mejor amigo, simplemente no podía dejarlo atrás, no podía odiarlo, ni siquiera sacarlo de mi vida por completo. El era parte de mi vida, parte de la Kelly que se reconstruyó junto a él.

-Fuiste bueno- le hice saber y el asintió.

-Me hubiera gustado terminar de otra forma- me encogí de hombros, No se podían cambiar los hechos.

-A mi también, pero por algo pasan las cosas ¿no?

- Si por algo pasan las cosas- me sonrió antes de besar mi mejilla.

-¿Amigos?- me propuso.

-Amigos.- me acurruque junto a él.

Estaba dejando mi herida ir, me costaría olvidar por completo mi amor por Alex, pero quizás era mejor dejar todo fluir sólo, por otro lado, necesitaba tiempo, para mi, para mi herida, para mi tiempo, necesitaba estar sola un tiempo, se venían muchos cambios a mi vida, sobretodo ahora que estaba por graduarme, que venía el baile escolar, que tenía que elegir a que universidad ir y no tendría tiempo para Ty, por lo menos no ahora, no cuando aún cuando estaba dejando ir mi herida, mi amor seguía allí, para nada latente, pero no ausente.

- Te quiero- Y cerré mis ojos.

***

Cuando salí del café no mire atrás, no lloré, no me frustre, porque lo que haría, lo haría por mi bien, por el suyo, por el de todos a nuestro alrededor, ahora que esto estaba hecho tenía que hablar con dos personas, a las cuales no había visto estas dos semanas y que tampoco me habían buscado para hablar, Nathan y Trina, llegue a casa de Trina, vi que el auto del papá de Nathan estaba ahí, bajé, saludé y entré, los dos estaban esperando en el patio.

-Antes de que digas algo o nos ataques, te diré que ya lo hemos pensado- Trina quien ni siquiera me dejó saludar fue la primera en hablar.

》No nos interesa si estás molesta porque no te dijimos, ya sea lo nuestro o lo de Alex.

-Trina...- traté de calmarla.

-No, cállate, estamos felices, por lo menos hablo por Nat y por mi- señaló al chico que permanecía sentado cabizbajo.

》Si estás dolida porque tu no tienes esa felicidad con Alex o con Tyler,  No es mi culpa, así que si serás una amargada será mejor que te largues.

Me sentía lastimada, ofendida, indignada, porque mi mejor amiga, quien debía conocerme y saber que jamás estaría molesta o celosa de que estuvieran felices, estaba acusandome y atacando de la nada, me había enfadado. Y mucho.

-¿Que estas diciendo?- pregunté molesta.

》Nunca estuve molesta, fingí estar molesta, si.

- Yo..- trató de hablar pero negué.

-Ahora hablo yo- le avisé.

》Es una maldita mierda, que uses mi maldito dolor por mi ruptura amorosa para defender tu argumento sin base. Soy tu mejor amiga  o eso pensaba hasta hace unos minutos, no me molestaría ni tendría envidia de tu felicidad, creo que deberías revalidar todo lo que acabas de decir y pensar si esa de verdad es tu mejor amiga, la que conoces desde hace muchos años.

Y me fui, me levanté, salí, subí al auto, para salir pronto de ahí, estaba confundida, como era posible que todo esto estuviera pasando tan rápido, un día estas haciendo lo que acostumbras y al otro, pierdes a tus mejores amigos y a tu novio ¿En qué realidad extraña estaba?

Mi nuevo hermanastro (en edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora