PDV Tyler
-¿Como me queda?- preguntó Kelly mientras se miraba en el espejo enfundada con su vestido color tinto.
-Amor ya te e dicho 5 veces que si, te ves maravillosa-digo y me acerco a ella para posar mis manos en su cintura.
A los 36 años de Kelly sus cuerpo seguía siendo un cuerpo envidiable, luego de haber tenido 3 niños seguía siendo una chica hermosa.
Iriamos a la casa de Trina y Nathan a pasar navidad con toda la familia, los chicos ya tienen 16 años y es un dolor de cabeza lidiar con su etapa de rebeldía.
-Quitate ese intento de zarcillo de la oreja Jackson- le exijo a mi hijo cuando entro en su habitación.
-Me queda bien, solo porque eres un anciano y no lo ves como yo lo veo no me lo quitare- respondo con tono burlón.
-A ti e gustaría que este anciano te quite el móvil- digo con tono amenazador.
Zachary ya había pasado por la etapa de rebeldía, pero a Jackson este año no le había caído muy bien, luego de haberle gritado a Kelly que no era su madre a estado distante con todos y grosero conmigo, cosa que tenía un poco insegura y deprimida a Kelly.
-Bien, ya que te quitaste eso, debemos hablar- pude sonar brusco, pero en verdad soné cansado.
Jackson había crecido, tenia 16 años, era casi mi retrato, sacando algunos rasgos de su madre, era la vil copia de un Tyler de 16 años, su cabello era color avellana igual de fino y matizado que el mío, su cuerpo igual de robusto y su terquedad era idéntica a la mía, tenia las mejores notas de su clase, un trabajo (que no era necesario pero al parecer para el si) en fin, era un chico ejemplar hasta el momento de su rebeldía.
-Si es por lo que le dije a mamá, lo sé, se que me pase y hablaré con ella hoy, solo estoy cansado de que me exija tanto, creo que pretende que haga lo que ella no pudo hacer- suspiro- pero no puedo papá.
-Oh mi muchacho, no me gustaría que fueras como alguno de nosotros dos, porque el ser humano tiene su propia esencia, y la tuya no sera la misma que nosotros, tienes que ser lo que tu quieras, como quieras, pero siempre sin olvidar de donde provienes- lo abrazo pensando en como necesite que un padre me dijera eso y mis hijos no pasarán por lo que yo pase.
una media hora después nos encontrábamos en el auto todos, las gemelas y los chicos iban atrás, mientras Kelly iba a mi lado sosteniendo mi mano libre, cantábamos villancicos y gaitas navideñas, cantábamos y reíamos como siempre lo hacíamos en navidades.
cuando íbamos cerca de la casa de Trina sonreímos al ver que había cumplido su promesa de ser la casa con mas luces de la cuadra, Kelly hablaba por teléfono con Hensy que también venia en camino junto a Alvin y el pequeño Drew.
todos habían agrandado sus familias, Nathan y Trina, tenían a Alexandra y a Sana, una chica de 17 años que adoptaron en un viaje a Irak, Hensy y Alvin tenían a Drew y a Calie, una bebé de 4 meses, Alex se casó con una mujer de Boston, que según tenía tres hijos, Jacob se había ido a vivir con su sobrina, mi madre vivía con mi tía y debes en cuando me visitaba.
desde hace 5 años pasamos todos juntos la navidad, ya sea en casa de Nathan y Trina o en mi casa.
al estacionar el auto las gemelas salieron corriendo hacia la puerta de la alumbrada casa, en donde antes de poder llegar, Alexandra ya había abierto, las tres niñas se fundieron en un abrazo grupal exagerado, los segundos en salir fueron los padres de la pequeña morena, en donde Trina corrió hacia Kelly sosteniendo su panza de 6 meses de embarazo.
- Me encanta tu vestido, yo no puedo usar un vestido así, estoy gorda y...- en menos de 5 minutos ya teníamos a Trina llorando.
Kelly le susurro algo al oído y la llevo adentro, mientras Nathan y yo, sacabamos los bolso de ropa, que eran aproximadamente 6, ya que luego de la cena nos quedamos a esperar que fueran las 12 los más grandes para abrir los regalos.
-Una bonita casa alumbrada- le digo a Nathan burlón.
-Bonita es la factura de luz- dice riendo sacndome una carcajada.
Al entrar a la casa, los chicos estaban sentados en la sala con Sana, quien se reía con ellos mientras se acomodaba su hijab, a pesar de ya no vivir en irak, Sana llevaba la religión de su antigua familia.
-Hola Sr Hulk- dice la chica sonriendo, era una muchacha muy educada.
-Hola Sana, estás muy linda hoy- le digo en tono amable a lo que ella sonríe.
Al entrar a la cocina Kelly estaba con un delantal y cocinando algún platillo navideño para todos, Trina esta en un lado comiendo quien sabe que, últimamente sus antojos son algo raros, hace una semana me llamo gritando que quería un hot Dog de New Castle, viaje 2 horas solo para comprarlo, para que luego me dijera que quería una pizza.
-Kelly estas rara, ¿que tienes?- le preguntó cuando la veo palidecer.
Ella deja caer la cuchara con la cual cocinaba y sale corriendo hacia algún lugar de la casa.
A lo que todos en la cocina nos quedamos mirando por el camino en el que ella iba.
-¡Que esperas! ¡Ve a ver que sucede!-reaccionó al grito de trina y corro por el camino que había desaparecido a Kelly.
Reviso cada habitación hasta encontrarla en el baño llorando.
-Dejame- susurra intentado salir del baño.
A lo que mi cuerpo respondió con tomarla de la mano y abrazarla, aunque mi esposa era terca y orgullosa, este acto hacia que se ablandara.
-Lo siento- susurra y luego me abraza con mas fuerza.
-¿Que sucede?-pregunto asustada y confundido.
Ya de por sí, nuestra relación es un tanto dramática, pero casi de todos estos momentos dramáticos salen cosas buenas, o bueno la mayoría.
-Y-yo n-no se que suc-cedio y-y...-no pudo terminar la oración cuando busco algo en el bolsillo, una hoja blanca fue tendida hacia mi lo cual me hizo pensar las mil maneras en las cuales podría escapar.
-Kelly ¿que es eso?-los ojos de Kelly se cristalizaron y hizo una ceña pa insentivarme a abrirla.
Por el presente documento se le hace la positiva de una prueba de embarazo hacia la Ciudadana con nacionalidad Estadounidense Kelly Alexandra Hawards Lee...
-Kelly...
-Lo sé, lo siento, yo no sabia que las trompas se vuelve a unir y en verdad es un caso raro..- la mire uno minutos viendo como el nerviosismo recorría sus facciones.
Le sonreí y la abrace, amaba a Kelly, era la persona más dulce y compresiva que conocía, era mi esposa, la mujer con la cual decidí que pasaría el resto de mi vida.
-Uno más no hará daño, aun somos jóvenes, seria más bonito- trataba de ocultar mi nostalgia.
¿Otro bebé?
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Mi nuevo hermanastro (en edición)
Teen FictionDicen que del amor al odio solo hay un paso, este amor es verdadero y real, se cruzaron como dos estrellas fugases y se separaron como las mismas, el amor entre Kelly y Tyler es mas fuerte que ellos mismos. Pero ¿estarán preparados para todo lo que...