Tu Eres El Polo Norte y Yo Soy El Polo Sur (Dominik Santorski)

Capítulo 6: James Hilton

    Narra Camelia

     Entré a la casa y luego a mi habitación, estaba confundida y aterrada ¿Por que quería hablar a solas? ¿Por que tanto misterio? ¿Que es lo que no debo saber? Las incógnitas rondan por mi cabeza hasta ponerme de mal humor. 

__ Tsk...- chasquee mi lengua.- No me gustan los secretos y mucho menos el misterio.- añadí mientras me tiraba en la cama con mi rostro entre las almohadas. Pasó un rato y supuse que James ya se había ido, bajé las escaleras y mis padres estaban hablando. 

__ No te preocupes, todos saldrá bien.- dijo mi padre para luego abrazar a mi madre. 

__ Pero no es justo para ella, te aseguro que nos va a odiar.- respondió mi madre con tristeza.

__ ¿Qué no es justo?.- pregunté y ambos se pusieron blancos como papel. 

__ Nada hija, son tonterías.- dijo mi madre sonriendo pero su intento era evidente que no eran tonterías. 

__ Que bueno que llegas, es momento de hablar.- dijo mi padre serio. 

__ Bien, hablemos.- respondí. Fuimos a la sala y nos sentamos en los sillones, ellos parecían incómodos. 

__ Un amigo dará una fiesta y quiere que vayamos,  así que por favor usa algo decente.- dijo mi padre suspirando.

__ ¿Eso es todo?.- pregunté.- Da igual.- añadí para luego levantarme y dirigirme a las escaleras pero me detuve.- Mamá ¿De donde conoces a James?.- pregunté. 

__ Pronto lo sabrás.- respondió. Decidí tragarme mis palabras y me fui a la habitación ya que era consciente de que ella no diría nada. 

     Narra Dominik

   Camino por toda la habitación intentando controlar mis pensamientos. Estoy inquieto, no puedo negarlo. El hecho de saber que James iría a una cita con aquella chica me enoja, realmente no quiero que nadie a excepción de mi se le acerque. 

__ Ya llegué.- dijo una voz conocida, James.

__ Hasta que por fin llegas.- respondí cabreado.- ¿Que tal te ha ido en tu cita?.- pregunté sonriendo de manera amarga.

__ Espero que no pienses mal de mi, sólo quiero ser su amigo.- aclaró. La verdad es que no se como tomarme eso, sé que el es honesto pero me enoja el hecho de que el puede entenderla y yo no. 

__ No es mi problema.- respondí con indiferencia.- Ella no me importa y tu puedes hacer con tu vida lo que se te de la gana.- añadí de mala gana. 

__ Oh... Entonces si estas celoso.- dijo riendo.

__ ¿Celos?.- pregunté.- No tengo celos, no tengo necesidad de tenerlos.- añadí rodando los ojos.

__ Si que lo estas. Esa chica te gusta y lo sabes, lo que pasa es que no lo quieres admitir.- dijo serio, como si fuera otra persona.

__ Tu no sabes nada.- respondí gruñí,

__ Se más de lo que te imaginas.- respondió desviando la mirada.- Dominik es momento que seas honesto con tus sentimientos.- hizo una pausa.- Tu y yo sabemos que siempre has tenido interés en ella, y  tu manera de ocultarlo es ser malo con ella.- volvió a parar.- Tu y yo sabemos que te gusta, siempre te ha gustado hasta el punto que posiblemente estés enamorado de ella.- finalizó

__ Eso no... No es cierto.- dije inseguro. El tiene toda la razón. 

__ Por supuesto que lo es.- respondió mientras me miraba serio.- Así que ya deja de ser tan marica y afronta tus sentimientos.- añadió para luego acercarse a mi.- Si no lo haces te juro que lo vas a lamentar porque yo mismo te la quitare y te daré una buena paliza que ni recordaras tu nombre.- finalizó en tono amenazante