Tu Eres El Polo Norte y Yo Soy El Polo Sur (Dominik Santorski)

Capítulo 19: Despertar

    Narra Elliott

    Los doctores ya se habían ido; ellos revisando todo y viendo que nada estuviera fuera de lugar con respecto a mi salud tanto física como emocional. Durante todo el chequeo James me miraba fijamente lo cual  me producía nervios y cierta vergüenza también; además de miedo, ya que sé que  me va a regañar por la estupidez que hice. Una vez que nos quedamos solos dentro de la habitación el fue directo al grano.

__ ¿Por qué lo hiciste Elliott? Responde, justo ahora estoy corto de paciencia.- tragué grueso, no quería hablar de ello.

__ Estoy cansado. Hablemos de eso luego, por favor.- pedí pero ni se inmutó.

__ ¿Qué te hicieron Sylvia y Jackson?.- mis ojos se abrieron. ¿Como sabía eso?.- Tu ama de llaves me contó todo. Y se que la razón de que hicieras esto tiene que ver con ellos y conmigo. Así que habla de una vez.- su tono era rudo. Me da miedo este James, es de pocas.

__ Bueno...- no estaba seguro acerca de si debía contarle o no. Al final decidí hacerlo.- Ellos me estaban amenazando. Querían que me hiciera amigo se Dominik y Camelia, y que los mantuviera informados de todo.- finalicé.

__ ¿Con que te amenazaron?.- preguntó y trague grueso, no podía decirle la verdad.

__ Bueno... Me amenazaron con crear un alboroto y echarme la culpa para que así mi padre me enviara a un internado en suiza.- respondí de inmediato, debía sonar convincente.

__ Esos desgraciados...- gruñó.- Los voy a matar con mis propias manos.- dijo furioso dispuesto a irse; sin embargo, logré tomar su mano para que así no se moviera ni un centímetro. La verdad es que creo que una pelea entre ellos es simplemente innecesario. 

_ Elliott... ¿No hay otra cosa que quieras decirme?.- preguntó mientras tomaba mi mano con fuerza. ¿Acaso el sabe el resto de la historia?.-  ¿No te amenazaron con otra cosa?.- sus ojos estaban serios y trague grueso nuevamente

__ Pareciera que supieras algo... ¿Qué es lo que sabes?.- pregunté.

 __ ¿No te han dicho que es de mala educación responder con una pregunta?.- arqueó una ceja.

__ ¿Y a ti nunca te dijeron que es de mala educación no responder lo que se te pregunta?.- le saque la lengua y el rió.

__ Sigues igual de infantil.- negó con su cabeza y de repente su mano estaba en mi rostro. Lo estaba acariciando. Se sentía muy bien.- Si, se algo más.- su rostro ahora estaba sereno.- Se que te gusto, Elliott.- mi ojos de abrieron como platos. Mi corazón empezó a latir con fuerza y sentía que mis mejillas ardían.- Imagino que ellos te amenazaron con eso, con el hecho de decirme lo que sentías por mi, y sé que cuando dijiste lo del alboroto te referías a que tu padre se enterase de tu preferencia sexual.- finalizó y mi mandíbula cayó al suelo. ¿Cómo es que sabe tanto?

__ Mis padres ya tienen esa idea... Ya sabes, de que soy homosexual... Es sólo que me ignoran para no afrontar el problema.- bajé la mirada.- Ellos me amenazaron con decirte lo que siento por ti y con decirte mi preferencia sexual.- murmuré avergonzado.

__ ¿Tanto te aterraba el hecho de que yo lo supiera?.- preguntó y asentí levemente.- No te rechazaría por ello, eso lo sabes.- asentí otra vez.- Y también imagino que sabes que siento lo mismo por ti.- asentí pero luego negué mientras lo miraba sorprendido.

__ Yo no lo sabía...- susurré.- Creí que sólo me veías como un hermano, nunca como algo más.- añadí. Sentía que mi corazón se salía de mi pecho, estaba feliz. Ambos nos sentíamos de la misma manera. 

__ Antes era así.- admitió.- Pero siempre sentí algo más.- sonrió.- Me sentía un pedófilo, eres un niño en comparación a mi.- me acarició el rostro.- Pero cuando me enteré de que habías intentado suicidarte.... Y luego cuando caíste en coma...-suspira.- Entendí que no podía negar lo que sentía, no podía negar que me muero si no te tengo a mi lado.- se acercó y colocó su frente encima de la mía. Tenerlo tan cerca de esta manera es en verdad reconfortante, así que cerré los ojos.- Me gustas demasiado, Elliott, a tal punto de que te quiero. Y no sólo eso, creó que incluso te amo.- empecé a llorar de la felicidad, después de tanto tiempo al fin me correspondía.