Después de Yui [D.L] (EDITANDO)

Capitulo 50: Después de todo.

-Es un niño.- Dijo la enfermera caminando hacia mi con el bebé envuelto en cobijas.

Sonreí cansada dispuesta a tomar al bebé, pero Raito se me apresuró y lo cargo en sus brazos.

Estaba por quejarme, pero otro gran dolor me atacó y solte un grito.

Abrí los ojos sorprendida.

-¿Ustedes tienen mellizos o algo?.- Pregunto.

-Tengo un hermano mellizo.- Asentí con la cabeza. - Y Raito tiene dos mellizos, son trillizos. -

-Al parecer la genética a actuado.- Respondió inclinándose frente a mi.- Viene otro más.-

Abrí los ojos sorprendida y clave la mirada en Raito.

Este sólo sonrió de costado y se encojio de hombros.

-¿POR QUE SIEMPRE TE TOMAS TODO A LA LIGERA? AHHH.- Grite cerrando los ojos por el dolor.

Sentí como su mano tomaba la mía y no pude evitar apretar con fuerza haciendo que el de quejara por el dolor.

-AHGG POR QUE TUVE QUE CASARME CONTIGO. ¡SI SON TRES, SI SON TRES JURO QUE TE MATO RAITO SAKAMAKI!.- Comencé a gritar.

-Puja.-Me ordenó el médico.

-Tranquila Baby-chan todo estará bien.- Intento tranquilizarme.

-¿QUIERES QUE ME TRANQUILICE? ¿DE VERDAD ME ESTAS PIDIENDO ESO? COMO SE NOTA QUE ERES HOMBRE, ¿ACASO NO SABES QUE ESTOY PARIENDO A TUS HIJOS? ¿NO PUEDES...ser más comprensivo maldito idiota.- Comencé a llorar.- DEJA DE MIRARME LAS TETAS.-

-Maldicion estas súper histérica.- Se quejo el pelirrojo.

-PUJA.- Repitió el médico y lo obedecí.

El llanto de un bebé comenzó a sonar y una débil sonrisa se dibujo en mi rostro.

-Es niña.- Dijo el médico enseñándome a la bebé.

Un gemido de dolor se escapó de mi boca.

-No, mierda.- Gruñi.

(...)

Ese día 3 niños nacieron.

Si, tuve trillizos, dos niños y una niña.

Casi mató a Raito si no fuera por la anestesia.

Los únicos que asistieron al parto fueron Ciro, Kanato, Ayato (lo que realmente me sorprendió) y Subaru.

"Esa persona" no apareció, y de alguna manera eso me alivio ya que en mi situación, le hubiese gritado algunas cosas no muy bonitas.

Ciro me acompañó durante todo el embarazo ya que la mayoría de este casi mató a Raito en más de una ocasión por que estaba muy sensible y recordaba todo lo que había sucedido cuando era más chica y todo lo que me había hecho.

Pero luego sólo quería estar abrazada a el.

Lo que ahora me resulta muy vergonzoso de recordar.

¿Que decir de los niños?.

Asashi, el mayor. Es muy parecido a Raito, es casi como su clon, hasta la personalidad, es muy jugueton, y a su corta edad de 4 años es todo un casanova en el preescolar. Claro que me hace poner de los pelos cada vez que la maestra le llama la atención por que se mete al baño de las niñas o por que golpeó a otro niño por que miró a su hermana.

Hikari es la segunda, su pelo es castaño como el mio, pero tiene los ojos de Raito. Es bastante parecida a Raito, pero en la personalidad es más parecida a mi.

Y por último esta Ryu. Es mi calco, como si viera una versión mía masculina. A diferencia de sus hermanos, el es más callado y tranquilo, no suele portarse mal pero no se lleva muy bien con Asashi, en el único momento que se ponen de acuerdo es para golpear a algún niño que haya molestado a Hikari.

Raito no quiere que Hikari se acerque a Subaru.

Digamos que una vez nos visitó, y Hikari le declarado en más de una vez el amor que siente por el albino diciendo que se va a casar con el.

Pero eso no me preocupa, al menos no por ahora.

Lo que se me hace complicado es como contarles como conocí a Raito, ya que no puedo decirles "Bueno hijos, su padre y sus tíos me secuestraron cuando tenía 8 años. Pero antes habían secuestrado a mi abuela. Prácticamente abuso de mi durante años utilizandome como banco de sangre hasta que me vi obligada a elegir entre el y sus hermanos. Y lo elegí a el. Y así mis niños es como me case con su padre".

No, no puedo decirles eso. Pero supongo que algún día les tendré que contar.

-¿Mamá cuando va a venir Subaru?.- Preguntó tirando de mi delantal.

-No lo se Hikari.- Respondí revolviendo la olla frente a mi.- ¿Sabes que es tu tío, no?.- Pregunte observándola de costado.

-Para el amor no hay fronteras, aparte el siempre va a ser joven y cuando yo crezca nos casaremos.- Respondió con los ojos brillozos.

Rode los ojos.

-Claro Hikari.- Lo mejor era darle la razón, después de todo es una niña. ¿No?.

-Ya, no me molestes.- Se quejo Ryu entrando con la vista dirigida en un libro de cuentos.

-Fufu... ¿Que pasa Ryu, no soportas una broma?.- Se burló el mayor.

- Ya asashi, no lo molestes.- Intervino Hikari con los brazos cruzados y la mirada fulminante.

-Te tiene que defender tu hermana Ryu, que penoso.- Se volvió a burlar el mayor.

Me gire con la cuchara de madera en la mano y lo apunte.

-Asashi Sakamaki.- Pronuncie su nombre completo para que se diera cuenta que estaba enojada.- Deja de molestar a tu hermano.- Lo regañe y este bufo sentándose en una cilla y apoyando sus codos sobre la mesa.

-Si mamá.- Dijo con un tono molesto.

-Y me cambias el tono.- Lo volví a regañar.

El rodó los ojos pero no dijo nada más.

La puerta volvió a abrirse y por esta entró Raito vestido de traje y con la mirada cansada.

-¡Papá!.- Gritaron los tres niños a coro.

-Hey niños.- Los saludo.- ¿Quien quiere ordenar Pizza?.-

-¡Si! ¡Pizza Pizza!.- Gritaron los tres saliendo de la cocina.

Me cruce de brazos y clave mi mirada en el con los ojos entrecerrados.

-Así que pizza.- Dije ofendida.

-Lo siento Baby-chan es que realmente....cocinas horrible.- Respondió intentando contener la risa.

-Como sea ni que lo hiciera por que quisiera.- Me gire y apague el horno.

Sentí como sus manos se apoyaban en mi cintura y pegaba su cuerpo al mio.

Llevó su boca a mi oido y su lengua acarició el lóbulo de mi oreja haciendo que pegara un pequeño salto.

Bajo su boca a mi cuello y sentí como clavaba lentamente sus colmillos.

Comenzó a succionar hasta que estuvo satisfecho y se separó de mi.

Me giro con agilidad y acerco su rostro al mio.

Nuestros labios se unieron y comenzaron a moverse con lentitud.

Nos separamos después de un minutos y pego su frente con la mía.

-Te amo.- Susurro.

-Yo también te amo Raito. - Respondí con una pequeña sonrisa dibujada en el rostro.

-¿Después de todo lo haces?¿Después de todo lo que te hice, de todo lo que sufriste, de los años?.- Pregunto inseguro.

-Después de todo lo hago.- Respondí colocando mi mano sobre su mejilla. -Te amo Raito.-