SAVE ME | PAST LIES I

Capítulo 46

Ashley se encontraba en su habitación con un libro de los que Liam dio un día antes. Intentó hablarle sobre lo que ocurrió al momento de entrar en su mente, pero él evitaba hablar del tema siempre que ella lo mencionaba; le pedía perdón por haberla sacado de manera brusca y le decía que no podía hablarle de nada, que las cosas poco a poco comenzarían a volverse claras para ella.

Ella no insistió demasiado al ver lo tenso que se ponía el dios cada vez que sacaba a flote el tema; Max estaba en su habitación, solo que en esa ocasión se encontraba algo lejos de la cama, en la cual yacía la chica leyendo, él estaba sentado en un rincón.

Intentaron hablar de lo que les sucedió en ese mismo lugar, el día en que asesinaron a la madre de la chica, pero no avanzaron mucho. Cada vez que Max decía algún tipo de detalle sobre eso, Ashley quedaba muda y el color comenzaba a subir a sus mejillas.

—No sólo fue sexo... —dijo el ángel de repente, provocando que la chica apartara la mirada del libro—. No sé si te amo o sólo es... eso no importa, creo que me estoy enamorando de ti y, no pienses mal; podría estarlo, incluso desde antes de saber quién eras, siempre me pareciste hermosa.

La rubia lo miró durante unos segundos, estaba sorprendida de la confesión del chico, lo que decía no le parecía creíble. Tenían poco de conocerse, unos dos meses y medio, él no podía enamorarse de ella tan rápido ni viceversa. Los sentimientos no podían salir de la nada, eso no tenía lógica, por supuesto, Ashley le tenía aprecio, durante los días en los que tuvo pesadillas, él se encargó de cuidarla, y en sí, siempre lo estuvo haciendo. Siempre había sido atento y amable con ella, por lo que sus sentimientos eran confusos, pero estaba casi segura de que sólo era aprecio, nada más.

O por lo menos, sólo hasta ese momento.

Por supuesto, entendió la perspectiva del chico; sí, él la conocía, tal vez como la palma de su mano, ya que la vio desde su nacimiento.

—No puedes hablar en serio —respondió, dejando el libro a un lado de ella—. No puedes enamorarte de mí tan rápido, es demasiado...

—Yo no me enamoré de ti rápido, fue poco a poco. Comencé a ver las cosas que hacías, prestar más atención a los detalles, a tu comportamiento, incluso bombardee de preguntas a Carissa sobre ti. No es difícil enamorarse de una chica testaruda y hermosa como tú.

Ashley apartó la mirada de Max negando con la cabeza; el corazón le latía con fuerza, comenzaba a sentirse nerviosa teniendo al chico en el mismo lugar que ella.

Era una sensación extraña la que le impulsaba a dirigirse hacia él y abrazarlo, decirle que sentía lo mismo; pero se negaba a hacerlo, eso no era lo que ella sentía y comenzaba a entenderlo, pero tan pronto como lo comprendió, fue como si lo que pensaba hubiese sido sustituido por esa sensación de querer acercarse a él.

Y lo hizo, caminó hacia el chico y lo abrazó.

—Tal vez estás confundido, no te preocupes...

—Hay algo más que nos conecta Ashley, no sólo es el hecho de que sea tu ángel guardián es... complicado, Laín era...

—Bajen, traeré a tu hermana y a Grace de vuelta con...

La puerta se había abierto provocando que Max y la chica se separaran con torpeza, haciendo que ella se diera cuenta de lo que hacía, miró a Liam esperando que dijera algo más.

Pero éste no la miraba a ella, sino a su ángel guardián, con los ojos ligeramente entrecerrados.

—Abriré el portal; los quiero abajo en menos de cinco minutos, al parecer James tiene cosas importantes que decir.

Sin más, Liam se dio la vuelta y cerró la puerta, dando un leve portazo.