HERMIONE
Ya era Lunes Ginny se había quedado a dormir conmigo desde que nos despertamos ayer hasta en la noche no la pasamos platicando de lo ''lindo'' que sería que Malfoy y yo fuéramos novios.
A mi también me gustaría que fuéramos novios pero quién sabe si el sentimiento es mutuo. Me pare para darme una ducha, Ginny seguía dormida cuando salí del baño ya lista vi que Ginny ya no estaba, bajé a la sala común.
-Hola buenos días Ginn.-
-Buenos días Hermy vamos a desayunar, muero de hambre.- comencé a reírme me recordó a Ron -¿De qué te ríes?-
-Lo siento es que me recordaste a tu hermano.-
-Jaja muy graciosa anda ya vamos.-
Caminamos hacia al Gran Comedor no sentamos donde siempre los chicos todavía no han llegado, Parvati y Lavender se nos acercaron. Cada vez que se nos acercan es por que tienen chismes nuevos.
-Hola chicas, ¿nos podemos sentar aquí?-
-Claro.- respondí.
-A ver cuenten ¿Qué chismes hay?- dijo Ginny ansiosa.
-¿Qué te hace pensar que vinimos a contar chismes?- dijo Lavender.
-Porque cada vez que se nos acercan es por que traen chismes nuevos- dije.
-Jaja exacto.- dijo Parvati.
-Ya cuenten.-
-Tenemos tres les voy contar de uno de nuestras amigas. Es de Luna dicen que ya termino con Neville por que no eran el uno para el otro bueno al parecer los dos estuvieron de acuerdo por que al entrar a Hogwarts se separaron mucho y decidieron dejarlo en amistad.- dijo Lavender.
-El otro es de la profesora de DCAO y el de pociones se traen algo entre manos, porque mi hermana una vez que fue a buscar al profesor para ver sobre un trabajo los vio besándose.- dijo Parvati.
-Y el último es de Malfoy ayer que pasaba por el lago vi como Hiromi estaba declarándose a Malfoy y pidiéndole que si quería ser su novio y este le respondía que sí, pensándolo bien hacen bonita pareja. Si tienen un hijo y es varón que me lo regalen
- dijo Lavender.
¿Por qué tuve que sentir esto por Malfoy? ahora tiene novia sentí como mi corazón se partía en mil pedazos, y fue peor cuando los vi entrando al Gran Comedor de la mano.
Mi corazón latía a mil por hora y luchaba para que no salieran las lágrimas de mis ojos mi respiración se volvió agitada, Ginny me miró preocupada.
-Lo siento... chicas tengo que irme.- diciendo esto salí corriendo de ahí, Ginny me seguía no paré hasta llegar fuera del gran comedor.
-¿Estas bien Hermy?- dijo Ginny
-¡NO! ¿Por qué tuve que sentir esto? Y precisamente por él.- la abracé y me heché a llorar, qué tonta fui.
