Hermanastros

Capítulo 9

Capítulo 9

—¡Papá! ¡Por favor! Te estoy suplicando—dijo la chica mientras su padre le daba un sorbo a su café—y sabes que yo no le ruego a nadie papá.

—Lo siento Anna—habló William tranquilamente.

—¡Lo siento más yo! ¿Carrollton? Por favor papá, mis notas son excelentes, he mejorado mucho, te prometo que no te volveré a desobedecer.

—Ya fue suficiente Anastasia, no cambiaré de opinión.

Ella bufó e hizo un puchero, sabía que su padre estaba más molesto que antes con el simple hecho de haber mencionado su nombre completo, pero no cedería, no pretendía ir a un colegio donde prácticamente tratarían de convertirla en una monja.

Con los brazos cruzados salió del estudio de su padre, pensando aun en cómo le haría para convencerlo, ahora no era una niña pequeña y una cartita con corazoncitos y un "lo siento", o una mirada tierna no eran suficientes, tenía que hacer algo en verdad grande.

***

—¿Así que Carrollton?—preguntó Zack en burla—Serás una monjita muy sexy.

Elena soltó una risa por lo bajo.

—¡Ay, púdranse los dos, no es un juego, esto es serio!—gritó Anna.

—¿Qué tan serio?—preguntó Elena.

—Es tan serio como mis estudios, mi vida, mis planes—contestó Anna con cierto dramatismo.

Zack y Elena se observaron entre ellos y después estallaron en carcajadas.

—Ok, es tan serio como mi cabello y mi ropa—repuso Anna.

Ambos chicos dejaron de reírse y pusieron un rostro de seriedad.

—Entonces si es muy serio—dijo Zack observando a Elena la cual asintió.

—Idiotas, yo no soy tan superficial. Pero bueno, tienen que ayudarme, no quiero ir a Carrollton.

—¿Por qué no?—le preguntó Elena—serás una niña buena, ya no te portaras mal y en el próximo desfile de tu padre serás presentada como "Anastasia, la monja modelo del colegio Carrollton del sagrado corazón"

Zack se carcajeó tanto que cayó de espaldas, Anna fulminó a su amiga con la mirada.

—Ustedes dos son de lo peor, se supone que son mis mejores amigos, deben ayudarme.

—Lo haremos, pero como mejores amigos también nos burlamos de ti—dijo Zack—eso hacemos los amigos de verdad.

—Si, es como una ley de vida—agregó Elena.

—Tontos, con sus burlas no me ayudan en nada, al contrario—dijo molesta.

Dio media vuelta y se alejó de sus amigos, que aun reían de ella.

En segundos le dieron alcance y caminaron a su lado mientras ella pensaba que hacer.

Pasaron la tarde paseando por la plaza que frecuentaban, le dieron varias ideas a su amiga, ninguna era lo suficientemente buena, pero al menos lo estaban intentando, el padre de Anna estaba convencido de que Carrollton sería lo mejor para su hija y ella estaba convencida de que ir a Carrollton sería peor que cualquier otra cosa.

—¿Rusa?—preguntó una voz femenina detrás de los adolescentes.

Anna se volvió, para encontrarse con la dueña de la voz con acento italiano, aunque ya sabía quién era, la única mujer que le decía rusa.