Hermanastros

Capítulo 22

Holaa!!! :) aquí les traigo el cap., y tengo que decirles... Gracias por seguir leyendo, comentando y votando, lo aprecio muchísimo, en verdad que las amo, les regalaré a Zack, Alex y Axel, ¿Los quieren? no :( bueno, ustedes se lo pierden, me los quedo yo :D

para las que leen Mi Mejor Amigo... he estado escribiendo, pero la historia se me resiste, se me ha complicado un poco, pero no voy a dejarla, lo juro.

Bueno, mucho bla,bla,bla, a leer :)

pd: entre mas comentarios dejen mas pronto subiré el próximo cap.

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Capítulo 22

No la reconocían, eso era más que obvio, tenía el cabello liso y sedoso, su uniforme ya no era tan largo, aunque no era tan corto como el de Anna o Elena y sus zapatillas de piso relucían y eran lindas y femeninas, no toscas como las que usaba antes.

—Vamos, deja que te admiren—dijo Anna mientras sonreía orgullosa por haber ayudado con aquel cambio.

—No me gusta mucho que me admiren, siempre me pongo nerviosa, actúo como una estúpida, no sé si recuerdan mi primer día aquí, pero estaba muerta de la vergüenza, todos me miraban como si fuera un bicho raro.

Elena soltó una carcajada.

—En especial Zack—agregó la pelirroja.

—Zack es idiota—dijo Elena.

—¿Hablando mal de mí?—preguntó Zack que las sorprendió, llegando por detrás.

—¿Se puede hablar bien de ti?—preguntó Anna.

—Sí, la mayoría de las chicas habla de lo bueno que soy en...

—¡No nos interesa!—gritó ella.

Reina y Elena soltaron una carcajada.

—Bueno, también dicen que soy bastante apuesto, sin omitir sexy y divertido—dijo sonriendo de lado.

—Sí, claro—dijo Elena poniendo los ojos en blanco.

—¡Es verdad!—dijo el rubio un poco ofendido—pregúntale a quien quieras, te dirá que soy irresistible.

—Bien, Reina ¿Zack te parece irresistible?

Reina se quedó en silencio sin saber que contestar. Zack se tragó las ganas de decir que Reina no contaba, estaba claro que ella no tenia ni idea de cualquier cosa que tuviese algo que ver con el sexo opuesto.

—Uhm...

—Vamos Reina, contesta con la verdad—insistió Zack dedicándole una sonrisa que él consideraba seductora.

—Creo... creo que si eres apuesto, y también divertido, pero no creo que seas irresistible—contestó Reina; estando con Anna y Elena le era muy fácil hablar con la verdad.

—¿Qué?—gritó indignado—¿no crees que soy irresistible?

Ella negó con la cabeza. Anna y Elena estallaron en carcajadas.

—Déjame decirte que necesitas ir con un oculista, preciosa. Soy irresistible para todas.

Reina alzó los hombros, no le parecía demasiado irresistible, y menos con esa actitud de superioridad.

—No para mí—dijo ella.

—Ya lo veremos—finalizó con una sonrisa torcida y dio media vuelta para ingresar al salón.