Una oportunidad para amar (DC#1) [SIN EDITAR]

Capítulo 9

La reunión acabo y estoy en el despacho del señor Ryan, el esta leyendo unos papeles y yo agendo otra vez. La puerta se abre casi bruscamente.

-¡Feliz cumpleaños Kate!.- Veo a la señora Miranda caminar hacia mi, me levanto del sofa y ella me envuelve en un abrazo.

-Ten te traje un regalo.- Me pasa una caja de color morado con una cinta rosada pálida.

-Señora Johnson no debio molestarse, yo, yo no puedo aceptar esto en serio.

-Katherine es mi regalo, quiero que te quedes con el, ¿quedo claro?.- Asiento.- Bueno abrelo.- Hago lo que me pide suelto el delicado moñon y saco la tapa, quedo sorprendida al encontar un hermoso vestido blanco con flores naranjas y verdes, el escote era en v era muy bello tenia tirantes gruesos, dentro habia una caja pequeña, la abri dentro habia una pulsera, tenia cinco dijes, unos lentes, un libro, una cacerola, un infinito y mis ojos se empañaron mucho, era...era un portátil pequeño, las lagrimas se acumularon y cayeron unas pocos.

-Yo...yo.

-¿Te gusto?.- Dejo de lado aquellos regalos y la abrazo ahora yo fuertemente sorprendiendola.

-Muchas gracias señora Johnson, yo, muchas gracias.-Me alejo un poco y ella limpia mi rostro.

-De nada preciosa.

-Con permiso, Hola mamá, nos vemos.- Mi jefe sale rápidamente de la oficina.

La señora Johnson a los pocos minutos sale, me coloco la pulsera y sonrio mi móvil suena es un número privado.

-Katherine Lawrence.

-Señorita Katherine soy Morgan.

-¿Que sucedio Morgan?.-Me levanto asustada.

-El señor Ewan desea hablar con ustedes lo antes posible.

-Ahora puedo, el señor Ryan salio.

-Entonces porfavor venga.- Escribo una nota agendando lo que hay dentro de cuatro horas y se lo dejo sobre el escritorio, salgo con mi regalo, mi maletin y móvil en mano.

-Buenos dias Morgan.

-Señorita.- Le entregó mis cosas y el me dice que suba, lo hago conozco perfectamente la casa.

-Hola Ewan.

-Kate viniste.- Su rostro pálido y triste de asoma, me acerco a su cama y tomo una silla cercana.

-¿Cómo ha estado?.- Tomo su fría mano.

-Mal Kate ya no me queda mucho tiempo.

-Ewan.- Susurre triste.

-Kate ya me resigne tengo un montón de dinero y ahora no me sirve, ya lo intente todo, se acabó ya no quiero nada más.

-Eres fuerte.

-Kate ya crie a mis hijos, e conocido a mis nietos y ahora se que Jennifer se casara, pronto lo hara el resto.

-Pero.

-Si algo me pasa, esta todo en el testamento.- Asiento.- Quiero que si muero antes de que se case mi pequeña Jennifer, quiero que la realice si o si no importa lo que pase no importa lo que suceda que se realice, prometemelo porfavor.

-Lo prometo Ewan.

Regreso a la oficina, Morgan amablemente se ofrecio a llevarme y después a dejar mis cosas en casa se lo agradeci.

-¿Kate?.- Levanto la vista hacia mi jefe.

-Si señor.- Me hace una sela para que me acerque hacia él, asi lo hago.

-Tenga.- Miro extrañada a aquella pequeña caja de color negra, la vuelve a tender hacia mi y la acepto.

-Abralo.- Así lo hago, separo mis labios, es una hermosa y fina cadena de oro blanco, no tiene nada es simple, y bellos muy bella.- Feliz cumpleaños.

-Señor esto es mucho yo no.

-Aceptelo y punto, no se hable más.- Asiento y le doy las gracias.

Me despierto por el sonido de mi móvil algo desorientada, rebusco en el mueble de noche y lo encuentro.

-¿Diga?.

-Kate, él, el señor Ewan.- Me levanto de golpe.

-¡No!, Morgan dime que no es lo que pienso.

-Se fue.

Veo a la gente de idas por aqui y por alla todo es oscuro, la señorita Jennifer esta llorando sobre su prometido, Ethan esta sentado con los codos apoyados en sus rodillas, el señor y la señora Johnson estan recibiendo las condolencias, no veo a mi jefe por ni un lado, comienzo a acercarme y veo a alguien sentado apoyado en un árbol fuera del patio, tiene la cabeza agachada y se quien ese ese cabello esa postura es solo de una persona que conozco bastante bien.

-¿Señor Johnson?.- Pregunto el levanta la vista, sus ojos estan cansados y sin vida.

-Kate.- Se levanta y sin darme tiempo para pensar sus brazos me rodean sujetandome fuerte hacia él, me quedo hay sin moverme siento el aroma de mi jefe.

Han pasado ya tres dias de que el se nos fue, después de mucho tratar de convencer a la señorita Jennifer de casarse acepto. En tres dias seriabla boda.

Llegó a la empresa justo el trasporte se demoro un poco más y como el señor Johnson ya no pasa por mi, necesito un taxi.

-Cancele todas mis citas, saldre.- No dije nada, hoy no tenia nada.- Espere aqui hasta que vuelva.- Asiento y corre a la salida.

Tres horas después llega.

-Se leyo el testamento de mi abuelo.

-Lo lamento señor.- Se sienta en su silla se quita la corbata y la chaqueta solo queda con la camisa, se desabrocha un botón. Pasa sus manos por su cabello.

-Siéntese frente a mi.- Asi lo hago, su mirada oscura y penetrante de color verde azulada me ve directamente.

-Mi abuelo dejo varias cláusulas en su testamento y solo me las dejo a mi, asi que...una de ella decia y cito." Para mi nieto Ryan dejo todas mis propiedades, en Francia, en L.A, En Nueva York y mi casa principal, desde mi muerte, pero las acciones que poseo dentro de la empresa se le otorgará solo si mis otros nietos desisten"
Ethan dejará la empresa no quiere ser algo que no es, dejara sus estudios le comento quiere dedicarse a sus estudios, el quiere ser ahora psicólogo y no le interesa la empresa a mi hermana le da igual y como sigue todos desistieron, estaba feliz la empresa iba a ser para mi, asi que seguiré, "Oh Ryan no pensaste que seria tan fácil conozco a mis nietos y como tal para que obtengas la mitad nuestra empresa deberás casarte antes de los treinta y uno, por ahora solo quedaras con lo que tienes, tengo el poder notarial nietecito, asi que encuentra pronto el amor y tendras que durar con ella un mínimo de dos años, solo recuerda a veces encontramos el amor en quien menos pensamos. ", faltan cuatro meses para que cumpla los treinta y uno no confío en nadie, no tengo amiguitas, no me casare con perosnas que no conozco asi que solo tengo una opción y la tomare.- Se sienta correctamente en la silla tomando esa poso del amo del mundo, su rostro con una seriedad completa, junto sus manos y hablo.

-Señorita Lawrence, casese conmigo.