Un mes más tarde...
Narra Rubén:
Hoy nos íbamos un día de campo con toda la familia. Pero antes mi madre me llevo con alguien que según ella me haría muy bien ver.
Nos subimos al auto y ella manejo.
Fue un largo camino y hablamos de todo con mi madre. La echaba mucho de menos. Y se la veía feliz por mi presencia. Yo estaba igual.
Luego de una media hora llegamos.
La casa se me hacía conocida pero no sabia de quien era.
Mi madre me agarro del brazo y fuimos juntos a la entrada de la casa.
Ella estaba tan ansiosa como yo en ver cómo reaccionaba.
Toco la puerta una, dos veces hasta que una chica abrió.
No percate de quién era hasta que levantó la mirada y no creía lo que veía. Era Alex!
Hace mucho que no la veía.
Alex: como los viejos tiempos
Rubén: como los viejos tiempos- ella no paraba de sonreír y yo tampoco.
Madre: oye Rubén quédate con Alex y nosotros nos vamos de campo.
Rubén: pero la familia
Madre: no te preocupes ya les he dicho.
Rubén: gracias- la abrace y ella se fue directo a mi casa en el coche.
Alex: te he extrañado
Rubén: yo igual- nos quedamos sonriendo mirándonos con esas miradas de antes cuando éramos unos niños.
Alex: ven pasa pasa.
Entramos y la casa estaba igual que antes. Solo que... Sus padres no estaban.
Ellos habían fallecido en un accidente cuando ella ya era un poco mayor.
Le pego muy duro y yo no estaba para ayudarla.
Alex: oye Rubius estás bien?
Rubén: es que la casa está igual. Igual de cuando éramos pequeñitos.
Alex: si lo sé, no quise cambiar nada- hizo una mueca- bueno quieras algo de comer o tomar?
Rubén: nono estoy bien gracias- le sonreí.
Alex: bueno pues ven- me cogio de la mano- hay que recuperar el tiempo perdido.
Me llevo a la parte de arriba de la casa y fuimos a donde estaba su habitación cuando pequeños.
Estaba diferente a que antes porque ella es más grande pero el mural que habíamos hecho seguía ahí.
Rubén: hostia! Te acuerdas cuando hicimos eso?
Alex: claro que si. No lo he querido sacar. Era lo más cercano que tenía a ti.
Rubén: perdona por..
Alex: no te preocupes por favor. Tú no sabías que mis padres fallecerían.
Rubén: bueno pues. Fue lindo encontrarte en España. Me hizo muy bien.
Alex: a mí igual. Ven siéntate. Que quieres hacer?
Rubén: no se. Yo tengo mucho calor.
Alex: quieres ir a la pileta?
Rubén: okay
Alex me presto un bañador de su hermano y ella se fue a poner un bikini.
Salió del baño y Madre mía! Que cuerpo que tiene. Bueno deja de mirarla.
Alex: oye Rubius que miras?
Rubén: eeee... Nada nada. Perdona.
