La novia de mi primo.

Capítulo 11.

Capítulo 11.

AINA POV.

Después de creo yo, un baño de casi tres horas para relajarme decidí salir.

Escuché un ruido en la puerta cuando me giré a por la toalla pero di por hecho que era Taylor y lo dejé pasar.

Miré por el rabillo del ojo y estaba Giselle con la boca abierta - ¡Ah! - chillé y cogí mi toalla - ¡Cierra los ojos, date la vuelta, sal , haz algo! - me coloqué la toalla patosamente y me di la vuelta intentando enroscármela al cuerpo mientras Giselle seguía con la vista pendiente. -¡Giselle! - gemí.

GISELLE POV.

Había estado haciendo una bola de valor durante estas tres horas mientras había salido a pasear.

Así que entré directamente al baño, pensando que se estaría maquillando, porque después de tres horas nadie sigue metida en la bañera.

Pero cuando entré y vi su espalda desnuda con gotas de agua y su trasero, perfectamente formado, y que era la primera vez que veía me nublé.

Estaba... tan sexy con toda su piel al descubierto, con su culo bien colocado, el que me había imaginado hoy tantas veces por encima de sus pantalones.

Y no podía moverme ni decir nada mientras veía como ella abría y cerraba los labios.

Se colocó una toalla dándome la espalda y después se dió la vuelta dando una patada a su ropa interior, no pasé por alto el tanga de encaje rosa palo.

Tiré el objeto que llevaba en la mano y me fui directa a su lado - Giselle... ¿qué?- parecía que las piernas me iban solas.

Coloqué mis manos en sus suaves y mojados hombros e intenté quitar la toalla que cubría su cuerpo, pero ella tenía el nudo encerrado en su puño -Te necesito- dije nerviosa intentando tocar todo lo que mis manos pudiesen -Te necesito ya- ella me miró confusa y yo la levanté a peso hasta el lavabo, cerré la puerta con seguro de forma rápida y volví a su lado -Abre las piernas -susurré. Ella no hizo nada - Por favor, abre las piernas -repetí con ganas.

Me miró - ¿Qué te pasa Giselle...? - preguntó en voz baja y yo la miré.

-Me pasas. Me pasas tú sin ropa- bajé mi mano hasta sus piernas y las acaricié con necesidad, subí rápido hasta sus ingles y sin demorarme coloqué mi mano dónde llevaba necesitando todo este tiempo, su feminidad.

Solté todo el aire de la excitación que me corrompía el cuerpo e intenté explorar, ella agarró mi mano con fuerza - ¿Qué coño haces Giselle?- dijo ahora enfadada sacando mi mano de su entrepierna.

-Estás depilada - lamí mi labio inferior - Estás totalmente depilada...- besé su cuello y me apartó.

-¿Qué problema tienes? - me empujó y tropecé al suelo - Casi me violas- frunció el cejo - y yo cambié mi rostro, ¿qué cojones había hecho? - ¿Primero me partes la cara y ahora me violas? - miré su labio, mierda, me puse en pie dejando distancia para que viese que no iba a hacer nada - No así, Giselle, no así, no me has besado, me has hecho daño - se llevó la mano al lugar dónde estaba mi mano antes - ¿Puedes salir? Quiero ver qué cojones me has hecho, si quiero un polvo sin nada llamo a Joe - chupé mis labios.