Capítulo 25

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-Déjame verlo. -Pedí tomando su mano.-

Subió la manga de su campera hasta su codo, dejándome ver una rosa en el especio libre de su brazo que tanto llamaba la atención por lo vacío que estaba.
Sin duda era el tatuaje mejor hecho que había visto en mi vida, aún más bello que las golondrinas en su pecho.

-¿P-puedo tocarlo? -Pregunté algo perpleja y él asintió.-

Extendí la mano hasta que mi dedo índice hizo contacto con la tinta en su piel y me causó escalofríos. Podía sentir cómo la rosa sobresaltaba de lo lisa de su bronceada piel, estaba algo pegajoso, debía ser aquel gel que colocan al finalizar un tatuaje o para curar la piel. Estaba fascinada por el efecto que tenía, pero notaba que decía algo más.

-¿Por qué rayos harías esto por mí? -Dije riendo irónicamente mientras que mis dedos no se alejaban de su piel.-

-No es lo único que haría por tí Emms, pero soy un desastre y tú no lo sabes o no quieres entenderlo, por eso... -Comenzó haciendo que me coloque de pie en la bañera.- ...he hecho una bestia dentro de los pétalos.

Trazó las líneas hasta que logré divisar la imagen que describió, salí de la bañera y lo abracé. Había mojado toda su ropa, pero era lo que menos me importaba.

-Emma... -Susurró intentando apartarme de él pero no se lo permití.- ¿Qué si hacemos guardia esta noche? -Preguntó y me alejé para mirarlo a los ojos.-

-¿Estás seguro? -Inquirí frunciendo el seño.-

-Quiero pasar la noche contigo en la camioneta. Y no pasarás frío, seré tu Jacob personal. -Dijo riendo.-

-Cállate. -Reí golpeando su hombro para luego quitarme la remera y quedar en ropa interior frente a él.- ¿Qué? -Dije al notar que me observaba demasiado.-

-No es justo que me hagas esto. -Masculló negando.-

-Tú te has tatuado.

-¿Así te vengas de tus novios cuando hacen algo para tí?

-¿Novios? -Pregunté riendo mientras que me envolvía en la toalla para salir del cuarto de baño.-

-Aguarda. -Rogó jalando de mi brazo.- Tus heridas han sanado. -Susurró deslizando su mano por mi, ahora, perfecta piel del abdomen.-

-Gracias a tí. -Respondí besando la comisura de sus labios.- Te veo en la guardia nocturna.

-¡No es justo! ¡No fue un beso! -Lo oí gritar desde el baño.-

Ingresé corriendo a mi habitación para cambiarme de ropa cuando el celular de Hemmings resuena por toda la casa y bajo las escaleras colocándome la remera.

-¿Si? -Preguntó Shawn contestando.-

-¿Van a venir por él o les envío una fotografía de su cuerpo? -Dijo chistoso Malik.-

-No sabemos donde están. -Escupió Louis.-

-Ah, lo olvidé. -Suspiró fingiendo sorpresa.- Es un lugar que su Emma conocía, o eso creo yo. ¿Por qué no le preguntan? Oh, lo siento, está muerta. -Finalizó para hecharse a reír.-

-¡Maldito infeliz! -Gritó Niall al parlante.-

-De hecho, soy muy feliz, ¿no Dennis? -Dijo y oí a mi hermano quejarse y luego se apreció el sonido de un golpe seco a lo que cerré los ojos con fuerza, sintiendo como mi pecho se contraía.-

-Es hora de que hagan algún movimiento, ya está herido y no tengo más piel que golpear. -Dijo cortando la llamada.-

Bajé los últimos tres escalones y tomé las llaves del vehículo con rapidez.

-¡Emma! -Gritó Shawn apretando mi brazo derecho haciendo que gire.- ¿¡Qué mierda haces!?

-¡No voy a quedarme sentada oyendo como lastiman a mi hermano sabiendo dónde está ese estupido idiota! -Grité liberándome de su agarre para cerrar la puerta detrás de mí.-

Un remolino de frío azotó mi cuerpo con fuerza, haciendo que me tambalee hacia atrás. Seguí de todos modos hasta tomar la manija de la puerta e ingresar al auto del lado derecho.

Ahora, ¿cómo mierda se hacía esto?

Coloqué la llave y la giré hasta que el motor gruñó indicando que había arrancado con éxito. Observé la puerta de la casa abrirse, pero presioné el acelerador haciendo que el vehículo haga un brusco movimiento de atrás hacia delante, donde mi cabeza impactó con fuerza contra el volante para luego regresar a recostarme en el asiento. Cerré ambos ojos y sentí mi párpado izquierdo pesar, dándome el indicio de que me había cortado. Apreté los labios en una fina línea y maldije al recordar que debía quitar el freno de mano primero.

Una mano golpeando contra el vidrio me alarmó, por lo que, sin mirar, bajé la ventanilla, oyendo a un Harry irritado.

-¿¡Qué rayos haces Emma!? -Gritó sobre los fuertes ruidos que emitía el viento.-

-Salvo a mi hermano. -Respondí riendo.- Pero olvidé quitar la palanca antes de presionar el estupido acelerador.

-¿Qué? -Preguntó abriendo la puerta y tomó mi barbilla entre su fría mano.- Emms, te has lastimado.

Alcé mis manos y las hice caer contra mis muslos haciendo sonido, en señal de ser algo obvio.

Harry se estiró sobre mí y quitó la llave de la camioneta para tomarme en brazos y bloquearla con alarma.
Cuando volvimos a la calidez que la leña en el hogar otorgaba a la casa, sentí mi cuerpo relajado, afuera hacía un frío mortal.

Me sentó sobre en el sillón frente al fuego mientras que abría mis ojos para sentir el líquido espeso sobre mi párpado incómodo.
En cuestión de segundos estaba frente a mí curándome la herida que causé por idiota.

-Esta noche haremos guardia, tranquila, mañana atacaremos en Stockwell. -Dijo en un tono calmo.- ¿Crees poder esperar?

-Sí, lo siento. -Respondí fastidiada a lo que me observó extrañado.- No puedo hacer nada por mí misma, siempre tengo que arruinarlo todo.

-No lo haces, Emms, tranquila. -Susurró dejando el trapo a un lado para quitar la tapa de un pequeño frasco con un pincel dentro.-

-¿Qué es eso? -Pregunté haciéndome a un lado.-

-Se llama cianoacrilato, es para sanar heridas sin hacer suturas. -Explicó remojando el pequeño pincel en la espesa y transparente sustancia.- Puede arder un poco al principio, ¿de acuerdo? -Dijo y asentí.-

Deslizó el elemento por mi piel haciendo que mis ojos se cerraran con rapidez debido al ardor que causaba sobre mi frente. El corte había sido justo donde comenzaba mi cabello.

-Listo, ¿estás bien? -Preguntó guardando el pequeño frasco para tomar mi rostro acunado entre sus manos.-

-Sí. -Respondí de mala manera.- Lo siento, soy tan idiota. Lo lamento, desde que he llegado sólo...

-Shh. -Sentenció rozando sus labios contra los míos reiteradamente.-

-No, soy un desastre. -Proseguí mientras que sus movimientos no cesaban.-

-Mhm...

-Una idiota...

-Mi idiota... -Suspiró frotando su nariz contra la mía.-

-Te odio. -Mascullé haciendo puños con su campera entre mis manos.-

-Repítelo hasta que lo creas. -Sentenció antes de besarme con ferocidad.- Esta noche prometo que vas a estar bien. -Habló contra mis labios.-

Mejor así, porque será la última, Harry.

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Y se viene lo último... No termina ya ya, pero bueno. Ahora a sufrir un poco, ¿no? Perdón si tardo, hace muchísimo calor y estoy cansada -_-
AliciaEspndola ahora llega la pasión y el drama. Love you xx

SHOOTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora