34. Fiesta de pijamas

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MUY BUENAS, CRIATURITAS DEL SEÑOR

¿A que no sabéis qué? ¡Hemos llegado a las mil leídas! ¡Yay! Como recompensa a vuestro trabajo, dentro de poco subiré un "50 cosas sobre mí" a petición de liliana176 . Será una historia a parte. No me gusta mezclar cosas que no tienen nada que ver con la novela.

¡Muchas gracias a todas!<3

¡Y fap para moar!

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MARTES

NARRA ______

Me desperté con un fuerte dolor de cabeza. Era como si me estuvieran gritando continuamente, pero no había ni un solo ruido. Me giré hacia Rubius, que estaba a mi lado. Sí, anoche dormimos juntos.

______: Rubius...

Rubius: Buenos días, pelirroja -dijo con una voz ronca. La típica de por las mañanas.

Me acarició la cabeza y se acercó a mí para besar mi frente.

______: ¿Cómo has dormido?

Rubius: Te referirás a lo poco que hemos dormido, ¿no? -ambos nos miramos con cara de complicidad y nos reímos- Pues bien, he dormido bien -se restregó los ojos-. ¿Y tú?

______: También. Aunque ahora estoy de resaca.

Rubius: Yo también -reímos flojamente, más que nada porque si nos reímos a carcajadas, nos dolerá más la cabeza.

Ambos estábamos tumbados de lado en la cama, mirándonos. No había palabras, tan solo contacto visual. Me encantaba ver a Rubius nada más despertar. Ese pelo castaño alborotado. Esa mirada verde cansada. Su sonrisa y sus hoyuelos... Me acerqué a él, posé mi mano sobre su mejilla y le besé.

Rubius: Te quiero -dijo a poca distancia de mí.

______: Y yo a ti.

Nos vestimos con la ropa de anoche. Al llegar a nuestras respectivas habitaciones, nos duchamos y nos vestimos lo más rápido que pudimos para desayunar en la cafetería con los chicos. Yo me puse unos leggins negros, una camiseta ablusada y sin mangas, gris; una camisa de cuadros, roja y negra, amarrada a mi cintura; y unas botas negras. En el pelo me hice una cola alta.

Salí de mi habitación con todo lo necesario: mi móvil y la tarjeta. Casualmente, Rubius había salido al mismo tiempo que yo.

______: ¿Vamos?

Rubius: Sí -me besó.

Fuimos a la cafetería agarrados de la mano y mirando, cada uno, su móvil. Al llegar allí, los chicos nos vieron.

Mangel: ¡Mira a la parehita!

Laura: ¡Guapos!

Cheeto: ¡Rubiuh, tío güeno!

Les sonreímos y nos acercamos a las mesas de comida. Nos servimos el desayuno en unas bandejas y nos sentamos a comer con nuestros amigos.

______: Buenos días -dije con una amplia sonrisa.

Todos: ¡Buenos días!

______: Chicos, ¿puedo preguntar una cosa? -todos asintieron-. Lili, espero que no te moleste pero... ¿Se sabe algo de Vegetta?

© Gamers VS Vloggers ↪elrubiusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora